Capitulo 3. Bienvenida a mi mundo

243 7 0
                                    


Edward Pov

El roce con su pierna había conseguido que hasta mi última terminación nerviosa cobrara vida. La deseaba, por mi mente pasaban miles de imágenes, había tantas cosas que quería hacer con ella

-si de verdad deseas seguir con esto debes primero firmar esto- llame al camarero para que me diera el contrato. De inmediato le entregue la carpeta a Rosaline

-¿Qué es esto?- preguntó Rosaline preocupada

-es un contrato de confidencialidad-ojeo el contrato- mira mi vida privada es muy importante para mí, si deseas que esto continúe y quieres ser parte de mmm mi estilo de vida debes primero firmarlo pero si no lo firmas no llegaremos a nada mas

-¿Cuáles serian los términos del contrato?- preguntó mientras bebía vino

-es bastante simple, no puedes hablar de mí, o de lo que me rodea a cambio de algunos beneficios-

-¿Qué beneficios?-se acerco a mi inclinándose sobre la mesa ofreciéndome una vista espectacular de sus perfectos pechos

-firma y lo sabrás-al decir esto sus ojos brillaron, lo firmo de inmediato

-listo quiero saber mis beneficios-

-bueno tendrás acceso a una cuenta bancaria para que compres todo lo que necesites a cambio de aceptar mi estilo de vida

-explícame ¿Cómo es su estilo de vida?-

-sería mejor que te lo muestre-tendí mi mano para dirigirla, ella accedió de inmediato

-Jacob, a mi departamento por favor- tenía un departamento destinado para mi vida privada, no iba a meter a mi casa junto con mi hermanita Alice a mi nueva sumisa- este es otro de los beneficios, el apartamento es tuyo tanto como dure nuestro trato- al entrar simplemente quedo anonadada-bueno te mostrare mi estilo de vida-me zafé la corbata-desvístete y recógete el cabello- ella obedeció de inmediato dejándome ver su escultural cuerpo, pero algo estaba mal, las mallas y el liguero no iban con una sumisa

-quítate las mallas y el liguero- a trompicones se las quitó rápidamente- ante todo te dirigirás a mí como señor y pues mmm ¿Cómo te iniciare?-meditaba en la forma que le daría a mi mundo- ¿látigo o fusta?- al oír esto su rostro se lleno de pánico- no te preocupes, ni siquiera podrás imaginar la cantidad de placer que podrás tener, siempre y cuando me obedezcas ¿entendido?

.si señor- respondió rápidamente

-si todo está claro empecemos-con un ligero movimiento la coloque de rodillas- solo te moverás si yo te lo ordene. Fui hacia la habitación para recoger las cosas que utilizaría, sentir el cuero de los restrictores de movimiento hacia que mi mente funcionara a mil por hora, pero hoy usaría lo básico, esposas, vendas y mmm tal vez un juguete extra, una pequeña fusta con algunas texturas para que toda su piel se inicie en sensaciones nuevas y excitantes, al volver ella se encontraba de pie observando a su alrededor

-¿acaso te dije que te podías parar?-de inmediato se arrodillo- te hice una pregunta Rosaline

-no señor-

-entonces eso quiere decir que me acabas de desobedecer ¿sabes lo que eso significa?- sus ojos brillaron por el miedo y el deseo

-no señor-

-bueno tu desobediencia merece un castigo-la rodee y la levante-inclínate sosteniéndote del sofá- ella obedeció coloqué las esposas restringiendo su movimiento, dejándola inmóvil en esa posición, acaricie si torso totalmente desnudo hasta llegar a su cuello y rozarlo con mi pulgar-con esto tendrás que confiar plenamente en mi, después de vendarte todo tu cuerpo se volverá más sensible- con mucha agilidad vende sus ojos dejando una imagen perfecta ante mi

La fusta recorrió su cuerpo, haciendo que se estremezca

-si se te ocurre correrte durante tu castigo, lo duplicare y solo será para mi placer ¿entiendes?

-Si señor-

- serán solo 5 azotes pero no te preocupes no dolerá- cuando la fusta tocó su piel la dejo con un tinte rosáceo hermoso, con cada azote Rosaline se acercaba cada vez más al éxtasis pero no la dejaría esto era su castigo. Al culminar estaba completamente excitada y deseosa, totalmente lista para mi


Amor o DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora