Halo: La historia de un Spartan.

7.Gracias a Dios, no revienta el Gran Cañón.

La siguiente misión fue ir al Gran Cañón a ver si conseguíamos información. Fue ir al Gran Cañón. La misión consistía en coger a uno de ellos, interrogarle y matar al resto. Lo primero lo hicimos con éxito y les sacamos algo de información: lo de Dandoran era una información trampa o una casualidad que nos vieron, así que iba a ser en Alderaan. Se encontraba después de un cinturón de asteroides y un sistema planetario. Y también nos contó que hubo un fallo técnico y se iba a tardar en hacer en un mes más. Con esto transmitimos la información a la base y le dejamos vivir (era un hippy), luego fuimos a ver cómo era la base y vimos que era una planta hidroeléctrica rehusada para sus intereses y decidimos atacarles desde los conductos de ventilación, era la manera más sencilla. Nos preparamos para la masacre con nuestro equipamiento habitual, solo que con silenciadores. Mientras nos infiltrábamos vimos que estaban preparando un ataque, seguramente iban a África, a un puesto avanzado. Tendría más heroísmo nuestra misión. No sólo íbamos a reducir su ejército, sino que íbamos a impedir un ataque,¡genial! La estrategia era hacerse con el núcleo de la base y de ahí destruir los demás sectores. Cuando llegamos al sector central, Óscar empezó la cuenta matando a un grunt desde arriba. ¡Boom, headshot! Después de eso se pusieron frenéticos y disparaban a todos lados, así que bajamos a por ellos. Y comenzó el tiroteo. Nos comenzaron a disparar, pero estábamos detrás de una gran máquina (el núcleo) y de ahí comenzamos a disparar. Apuntaban bien, pero reventaban su núcleo y nos facilitaban el trabajo. El núcleo reventó y 10 de ellos también. Así que salimos al ataque con toda la artillería. En 5 minutos no quedaba nada de ellos. ¡Demasiado fácil! Fuimos al sector 2 y tardó más en caer, pero cayó con un disparo mío al final. Comenzó con un headshot del jefe a un brute. Y comenzaron a disparar. No era difícil. El 3 también y el 4 también, con más dificultad obviamente. El 5 fue la fiesta de verdad. Estaba plagado de hunters. Tuvimos que salir por los conductos. Antes colocamos cuidadosamente unas bombas en la sala. Pero nos vieron al salir y reventaron la ventana frontal y ahí accionamos las bombas. Sólo volaron por los aires 20 de los 30 que había. Y porque sean 10 no son más fáciles. Revientan un escuadrón entero solo 2 así que 10 eran... bueno, el caso es que se pusieron a disparar explosivos de plasma verdes mientras huíamos y cuando les sacamos 50 metros comenzaron a dividirse en parejas (su naturaleza) y fueron a por nosotros de dos en dos. Nos paramos a debatir la estrategia.
-Los que tengan armas con punto de mira es recomendable que se pongan en un punto alto para dispararles a la cabeza y a la espalda.-dijo el inquisidor.
-Y los que tienen armas normales, de disparo cercano, ocultos tras las rocas, es lo mejor.-dije yo.
-Ok, esa será la estrtegia.-dijo Sebastian, el jefe de Ayuda Mundial.
Y ahí estaba yo, con el MTG, apuntando a la cabeza de los hunters. Llegó la primera pareja y se convirtió en carne de cañón para el inquisidor y yo. La segunda y la tercera igual. Pero para la cuarta necesitamos ayuda de los de abajo, que los reventaron a base de granadas. La última fue la difícil, eran más grandes que los demás e iban armados con escudos en ambos lados y cañones en ambas manos. Comenzaron a disparar y no tardaron en caernos rocas como bombas. No había mucho peligro hasta que cometimos el error de hacer una retirada estratégica y fuimos más vulnerables. Caían rocas y disparos por todos lados y no tardo en venir una oleada de agua. Salimos corriendo como alma que lleva el diablo. Afortunadamente el agua y las rocas mataron a los dos hunters y logramos escapar escalando. Nos recibieron en la base como héroes e hicimos una fiesta en honor a la vital información conseguida. Fue lo mejor, pero, si queréis de verdad ver lo que es la aventura de la guerra, esperad a que os cuente la próxima misión.