Tercer grado

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{Narra Iván}

Qué bien he dormido esta noche, la verdad he descansado un montón, además, hoy puede ser un día de los de no olvidar, a ver que tal se da la tarde con Amaia. Estoy ansioso.

*Grrr*

Vale, creo que eso es mi tripa, muero de hambre, a ver si hay bollos porque si los hay voy a desayunar de lo lindo.

Llego hasta la cocina y me pongo a buscar en el armario de los bollos, espero que me quede algún bollicao, se me hace la boca agua solo de pensarlo

-          Iván, ¿podemos hablar un momento?

Ya está aquí mi madre, por el tono de voz parece que ocurre algo.

-          Dime mamá, ¿qué pasa?- a ver que la pasa, tiene cara rara

-          Te acuerdas de la tía Carmina, la hermana de tu abuelo Alfredo ¿Verdad?

-          Si mamá, claro que me acuerdo, ¿Le ha pasado algo?

-          No Iván... veras…es que… sé que hace mucho que no te ve y esto te parecerá una locura pero, me llamó esta mañana y me dijo que te vio ayer en Madrid cogido de la mano con una chica.

Vale, mi cara es un puto poema, esa señora, que hara como 3 o 4 años que no me ve, ayer precisamente me vio con Amaia, y para colmo llama a mi madre para contárselo, pero a esta señora ¿Qué más le dará mi vida? Y lo que es peor, ¿porqué tiene esta cara mi madre?

-          Eh, bueno, puede ser, ayer estuve con una compañera de clase y puede que la cogiese la mano para algo, no me acuerdo- A ver si diciéndole esto deja el temita ya, que madre más brasas

-          Iván no me mientas, ¿es tu novia verdad?- Su cara no cambia, y lo peor es que cuando se le mete algo en la cabeza no hay quien se lo saque.

-          Mamá que no, es una compañera de clase

-          ¿Por qué no me cuentas las cosas Iván?

-          Mamá, vale ya por favor, no es mi novia, no hay nada que contar, no seas agonías- me hace ser borde, no lo puedo evitar, esta mujer me saca de mis casillas, ¿Cómo se puede ser tan cotilla?

-          Esta bien, como quieras, cuando me lo quieras contar, aquí me tienes- Bien, parece que se va

-          Y dale con que la abuela fuma – susurro casi inconscientemente.

-          ¿Dices algo hijo?

-          Nada mamá, nada

Por fin se ha ido, a ver si puedo desayunar de una jodida vez. Aquí está mi bollicao… Ñam.

*Me gusta el futbol porque soy, dios en casa por un día, sentadito en mi sofá veo la champions y la liga*

Y ahora ¿quién me llama por teléfono? Esto es un suplicio, no me van a dejar desayunar a gusto.

-          ¿Si?

-          Hola Iván, soy Carlos, hemos quedado esta tarde para ir a echar un partidillo, te pasamos a recoger a las cuatro- Bueno, lo que me faltaba ya

-          No tío, hoy no puedo, tengo planes- Seguro que me van a hacer otro tercer grado, lo presiento.

-          ¿Cómo que otros planes? ¿Has quedado con una tía?

-          Eso no te interesa Carlos, tengo otros planes y punto tío.

-          Venga ya chaval, nos conocemos desde hace muchísimo, dime como es la pava, o mejor, ¿Quién es?

-          No te voy a decir nada, no te incumbe, si algún día hay algo que contar te lo contaré, no seas como mi madre

-          ¿Cómo tu madre? Vamos, que se lo has contado a tu madre antes que a tu colega de toda la vida… muy bien tio, muy bien

No me jodas, esto no puede estar pasándome a mi, me desesperan, pero ¿Cómo pueden ser las personas tan cotillas? Pero ¿Qué más les dará? No tengo por qué darle explicaciones a nadie de lo que hago o dejo de hacer con mi vida.

-          No, no se lo he contado a mi madre, pero a ti tampoco te lo voy a contar, y pienso apagar el móvil esta tarde, no voy a dejar que me deis el coñazo por el whatsapp toda la tarde, que te conozco y se lo vas a contar a estos y se lo pesados que os ponéis.

-          Que sepas Iván que esta te la guardo

-          Que vale tío, hablamos por la noche, chao.

Colgó, por fin, que pesada es la gente amigo… Voy a mandar un mensajito a mi Amaia.

Recuerda que a las 4 en Moncloa, lleva dinero suelto, me debes un café ;)”

Hay que ver lo que me gusta jugar por whatsapp y con ella ya ni te cuento, me encanta y me muero de ganas de verla. Otra vez, la sonrisa de bobo de ayer… pero ¿Qué me ha hecho esta muchacha?

“Me acuerdo, y si se me olvida ahí está el señor para recordármelo”

“Sí, yo te lo recuerdo que tengo ganas de verte, nos vemos esta tarde reina”

Ahora si, voy a comerme mi Bollicao de una maldita vez, que al final mis tripas me van a comer a mi y también me tomaré un cafecito, hablar del café con la niña me ha dado ganas de tomar uno.

La lluvia en el cristal te dibujóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora