A Escondidas

Capitulo 9 ~Reconciliaciones y confesiones~

Capitulo 9 ~Reconciliaciones y confeciones

+Narra Zoro+

Sanji se postró a mis pies, sus lágrimas parecían no querer cesar y él parecía no querer llorar, pero ninguno de los dos se detenía, el rubio seguía llorando y sus lágrimas salían a la par de sus sollozos.

No me gustaba verlo triste, y mucho menos que la única causa de su tristeza fuera yo.
La verdad es que me dolía, quería que ese rubio fuera feliz, pero...vaya, lo será con un celoso como yo?
No me agrada en lo absoluto que trate así a las chicas. Siempre les da lo que quieren y....las complace en todo, las mima y les dice cosas que me gustaría que me las dijera a mí.
Suena muy estúpido enojarse tanto por tan sólo eso, pero es que...siempre es igual. Yo también quiero que me mime de esa forma, como si a nadie le importase y no sólo vieran que somos dos hombres, sino que vieran el cariño que nos teníamos....pero......amor entre hombres era indebido, casi un delito, y no estoy seguro de que nuestros nakamas lo aceptarán como Robin, ella es muy comprensiva, tal vez por eso lo "permitió".

-Qué va a pasar ahora? - lo oí decir como suplicando una respuesta- m-me amas aún? -

Claro que lo amaba, más que eso lo adoraba, a casa segundo quiero estar con él. Claro que ahora mismo......no lo demostraba.
Quisiera decírselo, besarle y hacerle entender que me encanta cada parte de su cuerpo, amaba su olor, su forma de ser, simplemente lo amaba, pero algo me impedía hablarle, unos labios, sus labios.
Estaba tan metido en mis pensamientos que...no me dí cuenta que esos delisiosos labios se acercaban para juntarse con los míos.
Para qué usar palabras si puedo demostrárselo?
Sus lágrimas se mezclaban con nuestros labios, haciendo el beso salado, sabroso. Él se estaba separando cuando reaccioné, le agarré del brazo y lo atraje hacia mi cuerpo, juntándonos completamente.
Tomé el control del beso en poco tiempo. Era un beso apasionado y lento, que cada vez se volvía más y más apresurado.

Me separé- lo que pasará será que tú y yo estaremos juntos para siempre, si me lo permites.....- hablé

El rubio me miró sonrojado y sonreía mientras secaba sus lágrimas.

-Claro que te lo permito, marimo idiota- dijo rodeando mi cuello con sus brazos

Puse mis manos en su cintura- te amo, cocinerucho de mierda-

-Y yo a ti, cabeza de césped-

Nos acercamos nuevamente, queriendo unir nuestros labios una vez más, antes de volver a fingir. Esta vez el beso fue lento, lento y apasionado, sentía que el contacto de nuestros labios transmitía todos los sentimientos que no son capaces de explicarse con las palabras.
Junté las caderas del rubio con las mías. Lo quería más cerca cada vez, lo necesitaba más cerca, necesitaba tenerlo a mi lado siempre, a cada minuto, lo...... necesitaba a él.

<<Cómo es que ese rubio me llegó a gustar tanto?>>

Me preguntaba cada vez que lo besaba, o simplemente cada vez que cruzábamos miradas. No sabía la respuesta, y tampoco me importaba en lo más mínimo, sólo sabía que lo amaba, y eso era lo único que me interesaba.
Cada momento a su lado era como si el tiempo se detuviese, era como si las agujas del reloj dejaran de girar, haciendo que cada momento con el rubio se volviera más intenso, más especial.
Esos pensamientos pasaban por mi cabeza antes de oír una voz demasiado familiar, una voz a la que conocía hace tiempo, esa voz era de Luffy.

-Z-Zoro.......San....ji.....qué están haciendo? - habló el capitan, quitándose el sombrero, sin comprender lo que sucedía

-L-Luffy- tartamudeó Sanji

-L-Luffy......- repetí mirando al inocente mugiwara

-Ustedes......se.......besaron......? -

-Y-yo.....eh......- dijo el rubio