Arrastrame al infierno

Capitulo 35

-Sora! ya regrese!- grito Dominic desde la puerta.
-Donde estas?-

-Dominic!!!- fue un grito desgarrador ya no aguantaba más.

-Sora!-

Estaba en la habitación de Dominic aterrada. Esta no soy yo que me esta pasando ya no puedo con esto.
Dominic entro a la habitación asustado.

-Sora, que tienes-

-Yo no. Yo no quería- tomo mis muñecas ya cortadas.

-Que sucedió?-

-Yo solo quería que ella estuviera bien con nosotros para que no digiera nada. Podríamos ser una familia pero no quiso- me levanté y camine hasta donde lluvia el cuerpo de Debony -Trato de escapar y tuve que detenerla-

Abrase a Dominic con mucha fuerza y sin dejar de llorar. Necesitaba que me abrazara, que me dijiera que todo iba estar bien. Yo no era mala yo no quería hacer nada de esto.

-Vámonos- susurre -Me quiero ir de aquí-

-Lo aremos, nos iremos- beso mi frente y me separo de el -Ve por a empacar poca ropa y todo lo que necesite llevarte yo are lo mismo y quédate afuera ya saldré yo, okey?-

-Okey-

Todavía estaba temblando cuando salí de la habitación de Dominic cubierto de sangre. Me sentía muy sucia pero supongo que no había tiempo de bañarme y cambiarme. En una mochila puse unas cuantas blusas, jeans, shorts y tacones. Obviamente también ropa interior. Guarde todo el maquillaje en otra con desodorante, mi cargador, la portátil de Dominic y salí de la habitación. El todavía no salía pero lo obedecí y fui fuera de la casa.

Espere unos minutos a que saliera sentada sobre una piedra me preocupaba un poco lo que estuviera haciendo pero sabía que teníamos que irnos sin dejar algún rastro.

-Listo- salió con dos mochilas que dejo a mis pies.

-Nos vamos?-

-No hay una última cosa que hacer antes de irnos-

-Que?-

Camino a la puerta de la casa, de su bolsillo saco una caja de cerillos y encendió uno.
-Otra vida se a aquí-
Tiro el cerillo dentro y todo el pasillo se encendió. El fuego se iba extendido. Ahora se lo que estaba haciendo.

Camino a donde estaba yo y me tomo la mano. Los dos nos quedamos hay quietos observando como se consumía la casa cada segundo que pasaba.

-Todo estará bien ahora- susurro en mi oído.

Ya no había nada porque quedarse luego me comunicaría con mi padre eso era lo de menos. Inventaría algo que sirviera como excusa y la escuela pues ya no había mucho que hacer, me había dado de bajá hace unos días. Aquí se acababa otra vida más. Otra historia más.