Arrastrame al infierno

Capitulo 39

-Acaso eres estúpida!-

Logre incorporar me y pude ver a Dominic a mi lado. Su cara ya no me demostraba comprensión si no furia.

-Yo solo estaba tomando un baño-

-No trates de verme la cara!-

Puse mis pies descalzos en el suelo y me levanta algo mareada para salir de aquella habitación pero el me sujeto antes de que cruzara la puerta.
Lo mire perpleja por la fuerza con la que me sostenía.

-Suelta me- dije en voz casi audible.

-A donde vas?-

Me solté de su agarre y corrí fuera del lugar.
Salí a la calle descalza y con tan sólo una camiseta. Todo era frío y aun no distinguía bien las cosas, me faltaba el aire pero seguí corriendo hasta estar lejos de ese lugar.

Tropecé con algunas personas hasta que ya empecé a caminar. Escuchaba muchos gritos pero a mi alrededor no había nadie que hablara.
"Tu quieres hacerlo!"
-Que cosa?-
"Has lo de una vez!"
-Que?-
"AHORA!"

-Que quieres que haga!- grite con todas mis fuerzas.
Un chica se ha cerco a mi y me tomo por los hombros.

-Te encuentras bien?-

Vi su vestido tan lindo y blanco, su cabello rubio, sus labios rosados. Era bonita; demasiado bonita para ser real.

-Podrías acompañarme a ese lugar- apunte a un local cerrado al otro lado de un callejón
-Vivo justo en esa puerta. Puedes ayudarme a llegar?-

-Claro que si cariño- me levanto y recargando me en ella caminamos sobre el callejón.
-Es aquí?- me soltó mientras ella intentaba abrir la puerta.

Mire a mi alrededor y vi una botella de vidrio. La tome rápidamente y le di con todas mis fuerzas en su cabeza.
Callo al suelo aun consciente pero algo aturdida. Me acerque a ella y con un trozo de la botella empecé a rasguñar su cara lentamente mientras ella lloraba.

-No me caso a engañar, tu no eres real- repetía tras cada corte que le hacia -No dejare que me lastimes como se lo haces a Dominic-

Ella suplicaba que me detuviera pero eso solo me motivaba a seguir con mi tortura hasta que decidí cortar su cuello.
La contemple por un segundo para después quitarle la ropa y ponerle la mía.
Yo con la suya me fui. Camine por la calle como si nada hubiera pasado mientras miraba como se empezaba a meter el sol.
Volví a el pequeño departamento caminando.

No había nadie cuando entre. Todo estaba en silencio un silencio muy extraño que causaba inseguridad.
-Dominic- susurré como si no quisiera que hubiera respuesta.
Vida dentro de la habitación y no estaba, tampoco en la bañera. Todo estaba solo y justo como lo había dejado.
Fui a la cocina para tomar un poco de agua fría pero estaba vacío el refrigerado todo estaba en una bolsa de basura.
Los vasos están rotos en el lava platos.

Escuche la puerta abrirse y tuve un pequeño sobre salto.
Me escondí debajo de la barra temblando como si me congelara.
Escuche los pasos que venían en mi dirección , mi respiración se torno mas lenta.

-Sora no tienes que esconderte solo soy yo- mis ojos se llenaron de lágrimas mientras corría para abrazarlo.
Deje que me apretara contra el mientras le decía que no me soltara.
-Donde estabas?-

-Solo quería que las voces dejaran de gritar me-

Su cara se torno sombría mientras tomaba mis manos
-Que sucedió?-

-Disfrute su sangre pasar por mis manos y fue... Increíble- tome su cara entre mis manos y bese sus labios sus dulces y cálidos labios
-Yo quiero vivir esta adrenalina contigo-