Salvada por el popular (Jarry)

Capítulo 5

Harry's POV's

Piiiiii, piiiiii, piiiii...

Me desperté asustado y todo por una estúpida llamada. Todo había sido un pesadilla, pero para mí había sido real, todas las emociones aún estaba allí. Pude jurar que por unos instantes su corazón dejó de latir, en tan solo un mes Jade se había convertido en alguien muy especial para mí, alguien tan frágil que sentía la necesidad de protegerlo. Mire el reloj, dos de la madrugada. ¿Quién llamaría a estas horas? Cogí el teléfono y en cuanto vi su nombre descolgué sin pensarlo.

- ¿Jade estás bien? - pregunté preocupado.

- No - contestó entre sollozos y gemidos ahogados.

- ¿Te ha vuelto a pegar? Te juró que lo mato, no te muevas, voy para allá.

- No. No, por favor no vengas, no quiero que tú también salgas herido - dijo en un susurro - Mañana te lo contaré todo per por favor no vengas, estoy bien te lo juro.

- ¿Y si estas tan bien cómo es que llamas ahora? - oí como en la otra línea Jade aguantó la respiración, seguido de un "me desmaye" - Te desmayaste, quizás porqué las palizas son cada vez más fuertes. Tienes que decírselo a la policía.

- No, ya hemos hablado de eso, no puedo, sigue siendo mi padre. Sé que es difícil de entender, pero no puedo hacerlo.

Nos despedimos y me volví a dormir, pero el sueño no venía. Sé que Jade le tiene cariño a su padre, al menos al antiguo, pero esté la maltrata y ella no hace nada para evitarlo y yo me siento impotente de no poder hacer nada. Decidí no darle más vueltas, de todas formas hablaría con ella en unas horas.

Jade's POV's

Después de llamar a Harry me fui al baño y vomité todo lo que había comido en el día, esta era la mayor paliza que me había dado. Cortes se extendían por todo mi cuerpo, sangrando y haciendo casi imposible su movilidad. Al día siguiente me desperté tarde así que no tuve tiempo de comer nada, aunque tampoco es que tuviese mucha hambre. Las heridas tenían peor aspecto así que me puse una sudadera encima de una camiseta de manga corta, una bufanda y unas gafas de sol. El invierno había llegado y ahora los árboles estaban sin hojas y mi nariz estaba roja, al menos llevaba mi gorrito de lana y mis guantes. Las clases pasaron normales pero la hora de la comida llegó, y como temía, Harry no pudo mantener a las Betas alejadas para siempre. Tiffany, Evelyn y Ashley se encargaron de que supiera quien mandaba allí, pero su venganza fue más dura que todas sus palizas anteriores, hasta tal punto que mi cabeza acabó varias veces estampada contra la pared del lavabo.

El resto de la mañana me la pasé en el lavabo, llorando y cortándome. Al final de las clases me senté en las escaleras a esperar a Harry como cada día, cuando vi el coche me incorporé lentamente, aún adolorida por las dos palizas seguidas que había recibido hoy. El camino a su casa fue silencioso, nadie habló pero sabía que cuando llegásemos a su casa empezaría el interrogatorio, pero rezaba para que no fuese así. Una vez en su casa nos dirigimos a su habitación.

- ¿Bueno que tal si hoy estudiamos biología? - dije intentando evadir el tema de mi padre.

- ¿Y qué tal si hablamos de la paliza que te ha dado tu padre? - mierda, no me Iba a librar.

- No es nada, de verdad, déjalo estar.

-No lo haré y lo sabes. Al menos déjame curar tus heridas, porqué sé que no llevas esas gafas por el sol - dijo soltando una pequeña risita - Ven - dijo acercándome a su cama.

Entonces posicionó sus manos en mis caderas, en ese instante dejé de respirar y mi corazón se aceleró, él me levantó y me sentó en su cama.