-------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Mónica era una chica rubia, con el pelo liso, delgada y que siempre llevaba una sonrisa de oreja a oreja. Aquella mañana se levantó fresca como una rosa, algo raro porque solía despertarse de muy mal humor y con un timbrazo de su despertador, pero aquella mañana no había sucedido eso.
Fue a desayunar y le extraño no ver a sus padres desayunando a toda velocidad para ir a trabajar ya que trabajaban de lunes a sábado, asique fue a despertarlos, pero para su sorpresa no estaban durmiendo, miro el reloj y vio marcando las 10:00.
-¡No me jodas, las 10:00 de la mañana!, imposible, imposible, imposible, maldito destino-¿por qué mi madre no me habrá despertado? Se pregunto a si misma- Mierda es verdad que me he levantado temprano a estudiar, joder me he quedado durmiendo.
Se vistió veloz, cogió un zumo de la nevera y echo a correr, y como era de esperar la suerte no estaba de su parte ese día, desde su casa tardaba 10 minutos al instituto pasando por una calle que a esas horas parecía un desierto ya que llevaba a gran parte de los institutos de la zona, era una calle con bastantes semáforos, que solían estar en verde ya que pasaban pocos coches.
Pero aquel día le pillaron todos los semáforos en rojo, además la calle por la que llevaba justo a la puerta de su instituto estaba cortada por obras, asique por mucho que corrió llego en vez de a y 10 que era la hora de comienzo de la 3ª hora llego a y 30.
Cómo era posible que a ella la chica más puntual de su instituto, se hubiera quedado dormida y además hubiera llegado tarde al examen.
Cuando llego a su clase, pidió disculpas al profesor, avergonzada se sentó en la silla y el profesor le entrego el examen, la única cosa positiva que estaba teniendo esa mañana es que se sabía el todo de memoria, haberse levantado pronto valió la pena. Contesto todas las preguntas y a pesar de haber llegado tarde termino la primera y segura de sí misma entrego el examen.
En el recreo fue a hablar con los profesores de las 2 primeras horas para disculparse, los profesores no le dieron importancia ya que era raro que Mónica se quedara durmiendo. Y tras aquellas conversaciones salió al recreo a hablar con sus amigas.
-Hola chicas, que asco de día llevo-Saludo Mónica, con una expresión de tristeza.
-Ya nos habíamos dado cuenta, has llegado 2 horas tarde y eso es muy raro en ti ¿qué te ha pasado?- pregunto Roció, tan sonriente como siempre, era imposible ver aquella chica morena triste algún día, nadie sabía cómo se las apañaba pero siempre era el alma de la fiesta.
-Puf, esta mañana me he despertado a las 4:30 para estudiar física y química, pero me he quedado durmiendo y no me he despertado hasta las 10, y además cuando venía todos los semáforos estaban en rojo y la calle por la que vengo siempre estaba cortada, os juro que no he podido tener más mala suerte-Explico Mónica
-Madre mía tía lo que no te pasa a ti no le pasa a nadie- comento entre risas Paula, que como siempre salto con sus comentarios graciosos cuando a la gente le pasan cosas malas.
-No seas así Paula, la pobre Mónica esta mañana lo ha tenido que pasar muy mal, además es tu amiga no deberías reírte de las desgracias que le pasan- Defendió a Mónica, Claudia, que aunque era muy callada y tímida siempre defendía a sus amigas cuando era necesario.
Cuando termino el recreo las chicas volvieron a clase, las 3 ultimas horas transcurrieron con normalidad. Y por fin llego la hora de irse a casa.
