no se alejaron mucho de allí, aunque de nuevo ni el tiempo ni la distancia fueron importantes.en medio de ninguna parte, alla donde se había combatido de forma angustiosa por la mañana, ganando y perdiendo un metro de tierra estéril al pie de una colina apenas perceptible, vio los cuerpos destrosados de un grupo de hombres.también ellos llevaban el uniforme del enemigo.
-¿lo recuerdas?
-nos dijeron que esta colina era esencial, que podía variar el curso de la propia guerra, que. ..
-¿donde estabas tu
-allí....no se.
-vamos,no mientas. ya no es necesario.
na tierra parecía haber revenado desde fuera y desde dentro. todo eran agujeros, barro, y los colores, los mismos colores de todo el sector: marrón y rojo, ocres que la lluvia acabaría de barrer. los cuerpos diseminados daban al conjunto el aspecto de un jardín macabro. eran las plantas muertas de n suelo muerto. la mayoría estaban destrozado.
-me he quedado atrapado, solo-comenzó a decir el soldado.-caian bombas por todos lados, los disparos barrían el aire en rodas direcciones, y de pronto, por entre la bruma, les he visto a ellos, avanzando.
se detuvo.
la niña le presiono la mano con aquella ternura especial.
-les he arrojado una granada-dijo el soldado.
después había hechas o a correr.
-mirales
-¿por que?
- por que ahora has de saber la verdad.
se acerco y les miro. descubrió que ya no sentía ni el miedo de unos minutos antes ni el odio de todos los días anteriores. el enemigo, cada uno de aquellos soldados, tenía un rostro humano, unos ojos abiertos sorprendido por el minuto final, una máscara de facciones. algunos habían muerto al instante al estallar la granada entre ellos. otros habían tardado más. uno miraba su propia mano abierta, arrancada de su brazo, caída frente así mismo. otro había tenido tiempo para sacar de su bolsillo una fotografía.
el soldado también llevaba una fotogrifia en el bolsillo.
tan y tan parecida a aquella.
una mujer, un bebe en el regaso,
un lugar plácido, un hogar, una sonrisa.-todos tenemos a alguien-dijo con amargura.y miro a la muerte con toda esa amargura detenida en la garganta-yo luchaba por mi esposa y por mi hijo, por su libertad, por mi país, por mi.....
<<también en eso te han engañado>>
-ven soldado-dijo la niña.