Dani aparcó el Seat negro de su madre que realmente no podía conducir porque no tenia carnet y bajó del coche sin decir nada. Antes de abrir la puerta revisé mi cara ante el espejo retrovisor y tras ver que todo seguía en su sitio bajé del coche de un salto. Dani cogió la nevera portátil en la que llevaba la comida que él mismo había preparado y comenzó a andar por el sendero que llevaba hasta la laguna.
Supongo que os preguntareis ¿que mierdas es la Laguna? Desde que Daniel y yo estamos juntos tenemos un pequeño escondite que solo habíamos compartido con Kate, Erik y Roy ya que son nuestros amigos y sabían guardar el secreto. La laguna era una zona alejada de la ciudad que se supone que estaba protegida por ser área rural y que nadie podía invadir pero, ya que nosotros éramos solo 5 e íbamos cada mucho tiempo nadie sabía que lo utilizábamos como punto de reunión. Me encantaba ir a La Laguna, era un lugar lleno de árboles con una zona de rocas donde solíamos comer y luego un pequeño riachuelo con una catarata, aún que el hecho de que lo llamaran La Laguna no tenía sentido.
- No han llegado aún- dijo Daniel parándose en la zona de las rocas.- Nena tenemos media hora solos para darnos un buen baño sin la supervisión de nadie.- Teniendo en cuenta que habíamos quedado a las dos y media y aún eran las dos, todo lo que me había dicho tenía sentido y me resultó bastante tentador.
Sin responderle me quité la camiseta y los shorts que llevaba, dejando solo como prenda el bikini azul marino que llevaba, le guiñé un ojo y me lancé al agua cristalina.
-Ui nena como me pone que hagas eso- Gritó el quitándose la camiseta y lanzándose al agua junto a mí.
Buceé para que no me encontrara pero él me agarró del tobillo y me atrajo hacia su cuerpo, saqué la cabeza para respirar y le sonreí.
-Me encanta tu bikini.
No pude evitar sonreír y le premié con un beso, en el cuello, como al él le gustan.
Me agarró de la cintura y no tardó en bajar al culo. Le rodeé el cuello con mis brazos justo cuando él juntó sus labios.
Justo en ese momento unos gritos interrumpieron el momentazo y cuando Dani y yo nos giramos vimos a Erik y a Roy sacándonos una foto con la Nikon de Roy.
-¡Gallinas! Dejaros de tanta foto y mojaros un poco.- Grite riéndome mientras ellos dejaban la cámara y se quitaban la camiseta.
Las mujeres mandan.Bueno se que los capítulos que subo son muy cortos pero prefiero subirlos cada poco tiempo y que sean cortos a largos cada mucho tiempo. Si os gusta o tenéis algo que decir ponérmelo en un comentario que me haría mucha ilusión.
Hasta el proximooo!
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A falta de tus besos
Novela JuvenilImagínate que a un cojo le roban su su bastón, eso hiciste tu conmigo pero llevándote mi corazón.