Rachel (Faberry AU)

Capítulo 2

Mientras pasaban los créditos Rachel le tocó el pelo a Quinn.

—Realmente me gusta cómo tienes el pelo ahora — le dijo, y Quinn sintió como su sonrisa duraba más de la cuenta. ¿Su mirada permanecía en su boca, o estaba imaginando cosas?

—Gracias —logró forzar.

Rachel le soltó el pelo y se volvió para ver la película. Quinn tomó varios sorbos nerviosos de su vino. Estaba a sólo unos pocos centímetros de distancia y su calor la intoxicaba.

— ¿Tratas de derrotarme? —Rachel le preguntó, mirando la copa de vino casi vacía. Ella bebió su vino en un suspiro y volvió a llenar los dos vasos. — ¡No he perdido en todo el año!

Quinn se echó a reír, y se desvaneció un poco de su nerviosismo. Rachel realmente tenía que estar tratando de seducirla, ¿verdad? Comenzó a imaginar todo tipo de cosas sexuales que podrían hacer más tarde, y el hecho de que fueran tan amigas, sólo incrementaba la intimidad. ¿Qué diría Rachel si supiera todas las fantasías locas que ella estaba teniendo en ese momento?

Quinn mantuvo a escondidas sus miradas a su mejor amiga mientras veían la película. Se aseguró de beber tan rápido como pudo, ya que Rachel se negaba a beber menos de ella. La morena hizo un juego de coqueteo de eso, riendo y apoyándose en su contra cada vez que Quinn trataba de beber. En poco tiempo la botella se había terminado.

Rachel no perdió la oportunidad de apoyarse en ella o abrazarla, mientras se reían de cada comentario que hacían. La película proporcionó una fuente constante de cosas para que Quinn se pusiera quisquillosa e hiciera chistes. Se alegró de tener la película, porque habría estado totalmente silenciosa por el nerviosismo de otra forma. Cada vez que Rachel se apoyaba en ella, sus brillantes ojos chocolate o su sonrisa linda, su pelo largo y castaño le llamaban la atención y la dejaban sin habla por un momento.

Se preguntó si debería dar el primer paso, o si sería Rachel. No había manera de que no estuviera tratando de seducirla, ¿verdad? Rachel se movió un poco más cerca, un poco fuera de equilibrio por el vino.

—Entonces, ¿cómo está el novio? —preguntó con un gesto dramático. Ella y el novio de Quinn nunca se habían llevado bien. Para Rachel él era un imbécil.

—Oh, nos separamos hace una semana o dos... —Quinn le dijo, omitiendo que lo había dejado porque no podía dejar de pensar en las chicas... o en ella.

—Eso es muy malo —dijo Rachel, apoyando su barbilla en su hombro, con el aroma del vino deslizándose con gusto por la mejilla de la chica. Quinn mordió su propio labio. La cercanía de Rachel hizo que se congelara. Ella se quedó mirando los labios carnosos de su mejor amiga, preguntándose si debería girarse y darle un beso.

Antes de que pudiera tener el coraje, Rachel se movió de nuevo para sentarse en el sofá y comenzó a ver la película otra vez. El shock de lo que ella casi había hecho hizo a Quinn inestable y nerviosa. Se encontró varias veces mirando por encima a sus pechos y mirando a su amiga, que estaba súper atractiva con esa camisa ajustada. No podía creer lo que estaba pensando.

El riesgo era enorme, pero la posibilidad de lo que podría suceder entre ellas era increíble. Quinn pensó en lo divertido que sería. La combinación de su amiga y su novio en una sola persona, sin el pene, literalmente, era atractiva. Sabía que Rachel la trataría grandioso, y, mejor aún, podrían tener sexo en cualquier momento que quisieran igual que su hermana pequeña y su novia... esa palabra, novia, se metía debajo de la piel de Quinn. No podía creer que estuviera pensándolo, pero tenía mucho sentido. ¡Deseaba a Rachel como su... novia!

Miró los labios fruncidos de su amiga y sus brillantes ojos chocolate. ¿Cómo en el mundo podía contemplar tener eso con ella? ¿Qué pasaría si Rachel la rechazaba? Ella estaría soltera y sin amiga. Quinn siempre la echaría de menos cuando se hubiese marchado... realmente no la quería perder como amiga.

Ella se mantuvo en la indecisión hasta que la película terminó. Cuando miró por encima, Rachel estaba dormida contra el brazo del sofá. Debería haber esperado eso, teniendo en cuenta la cantidad de vino que habían tomado. Se sintió estúpida. ¿En qué había estado pensando?

Por supuesto Rachel no estaba tratando de seducirla. Quinn se sentó a su lado en el sofá y le acarició el cabello largo y castaño. Se quedó mirando el hermoso rostro de su amiga, y algo importante se le ocurrió, ya había perdido su amistad con Rachel.

No podía disfrutar de su amistad con esa explosión de pensamientos locos cada vez que la chica estaba cerca.

El corazón de Quinn latió con fuerza cuando se dio cuenta que en realidad iba a hacerlo esta vez. Estaba asustada, pero extrañamente aliviada. Puso su mano sobre el abdomen de la muchacha dormida y la sacudió con suavidad. Cuando ella comenzó a moverse, lo que indicó que estaba medio despierta, Quinn se armó de valor. La elección era explotar o seguir, y ella optó por hacerlo. Se inclinó y besó los labios carnosos de su mejor amiga.