Llegamos a la habitación, y dentro, esperábamos encontrar a Sara, pero no fue así, no teníamos ni idea de donde podía estar. Nos tumbamos cada una en nuestra cama, sin decir nada, mirando al techo. Todo era muy raro, y había sucedido muy rápido, estábamos charlando, tranquilamente, y en ningún momento había notado a Sara, rara, es más, se la veía contenta, no tenía ni idea que le podía estar pasando. Me giré para ver a Carol, y Laura, la primera, estaba abrazada a un cojín, boca arriba al igual que yo, en cambio, la segunda, estaba hecha un ovillo, y de vez en cuando pegaba un respingo, seguramente, estaría muy dolida, es la que mas a pecho se tomaba los problemas, decidí levantarme, y tumbarme con ella en la cama y abrazarla.
- Helena, ¿por que ha hecho eso Sara? – me pregunto
- No lo se Laura, yo también estoy muy confusa, no creo que halla hecho nada malo… ¿Vosotras creéis que soy como ha dicho Sara? - se lo tenía que preguntar, si pensaban eso de mi, sería mejor que no siguieran fingiendo, eso solo empeoraría las cosas.
- Para nada Helena, no te preocupes, seguro que a Sara se le pasa rápidamente, no te preocupes, son tonterías, al final siempre acabáis perdonándoos. - me dijo Carol, que se había tirado en la cama a nuestro lado.
- Si Laura, no te preocupes, no te dejaremos, e intentaremos que Sara entre en razón. - toda la presión y mal estar que tenía, con estas palabras desaparecieron, no me merecía a unas amigas mas buenas, aun que me enfade con ellas, son sin duda las mejores, siempre están ahí para lo que necesito.
Después de darnos un buen achuchón, nos cambiamos, y nos metimos en la cama, no paraba de pensar, que en el primer día que estábamos aquí, me había peleado con una tonta, que se cree que el campamento es suyo, con un guaperas egocéntrico, y con una de mis mejores amigas, bueno la verdad es que no todo había sido malo, había conocido a Kevin, que es muy amable y gracioso, y David, que es majísimo.
Sin darme cuenta, los ojos me empezaron a pesar mucho, y tan rápido como me desperté me quedé dormida.
Por la mañana, Carol se levantó la primera, nada mas levantarme me giré para ver la cama de Sara, pero como me esperaba, Sara no se encontraba en esta, ni por la habitación, si hubiera llegado de madrugada la hubiéramos oído, esperaba verla en el comedor, y decirla que lo sentía por cualquier cosa que le hubiera molestado, y que intentaría llevarme mejor con Susana, y en general con todos, con los que en estos momentos no aguantaba. Laura se levantó y entró en el baño, yo me levante y comencé a preparar la ropa que me iba a poner, decidí ponerme, unos shorts azul fuerte, con una camiseta blanca de encaje, y las vans color azul claro. Cuando Laura salió del baño, entre yo, y me duché, y me maquille de forma sencilla, al salir me puse la ropa ya preparada encima de la cama, y salimos hacia el comedor.
Nos sentamos en la mesa, donde habíamos decidido sentarnos durante todo el mes, y al girar la cabeza para mirar la comida que había, vi que en la mesa de los snobs del campamento, estaba Sara, riendo con Marcos, en ese momento todos los pensamientos reconciliadores que había tenido, para pedirla perdón, desaparecieron, y tenía unas ganas tremendas de matarla, estaba ligando con mi Marcos, haber no es que sea mío, ni me guste ( o eso creo), pero es que se había fijado en mi, y era tan guapo, y encima con una de mis mejores amigas.
- ¿esa no es Sara? - preguntó Carol.
- Si, es ella, ¿con quien esta? - dijo Laura, achinando los ojos.
- Con Marcos… - les dije bajando la cabeza, me sentía un poco mal, como traicionada.
- ¡¿En serio?! Que fuerte. - dijo Laura pegando un saltito.
P.V.O Sara.
Estaba muy cabreada, la verdad es que no me gustaba pelearme con Helena, pero Susana, fue muy convincente, la verdad que Helena era a veces como la describía ella, pero había algo, que no me hacía sentirme bien, estaba confiando en una chica que acababa de conocer, y que no sabía de verdad si era como decía ser, y estaba dejando tirada a una amiga de toda la vida, y la verdad es que no sabía porque estaba ligando con Marcos, no era mi tipo, pero sólo por fastidiar a Helena lo haría, yo sabía que ella sentía algo por él y no quería reconocerlo, él no se quedaba lejos, porque mientras que estamos hablando no para de mirar la mesa donde estában las chicas, y sobre todo se fija mucho en Helena. Pero aunque estuviera enfadada con ella, no quiero dejar de llevarme con las de más, siempre me han apoyado y mucho. ¿Qué debía hacer? ¿Debería pedirle perdón a Helena? ¿O tal vez, debía seguir con el grupo de Susana y Marcos? No sabía que hacer.
bueno ya esta aquí, este capítulo es mas corto, porque el siguiente va a ser mas largo de lo habitual , espero que os guste¡¡¡ muchiiisimas gracias por leer¡¡ :)
ESTÁS LEYENDO
Ne me quitte pas
RomanceHelena, es una chica de 16 años, que hace un viaje con sus 3 mejores amigas, este viaje le cambiará la perspectiva de la vida y del amor para siempre. Este libro es ideal para las adolescentes que intentan buscar a su amor verdadero... espero que...