- Cenicienta- (01)

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You're becoming a dream to me, a fairytale fantasy.

Nothing can never compare
An imagen to my memory.

Girl, I'm asking: could you be my queen?

Ella apagó el mp3 al escuchar los aporreos en la puerta de su habitación. Si es que a aquel cuartucho infectado de cucarachas se le podía llamar habitación.

Las paredes estaban pintadas en un turbio color verde, que hace años fue un tono pastel. El paso del tiempo y la humedad hacían que aquella horrorosa pintura se desprendiera hasta al suelo, dejando ver los viejos ladrillos.

Un pequeño armario color caoba sin puertas guardaba todo su vestuario, que no consistía en otra cosa que un chándal, dos vaqueros, una camiseta azul cielo, un jersey turquesa y una camisa a cuadros. De la percha colgaban un abrigo y una chaqueta azul con mangas blancas.

- ¡Ella, abre la maldita puerta!

Sin ganas se levantó del colchón lleno de muelles y abrió la puerta.

- Bendita la hora...¿Porqué no me hacias caso?

La voz chirriante de Annie se le clavaba en la parte trasera de su cerebro, así que intentaba ignorarla la mayor parte del tiempo.

Pero realmente, su hermanastra conseguía ponerselo muy difícil.
La pelirroja siempre andaba gritando, maldiciendo, corriendo por toda la casa con su maldita gata Lucy a cuestas.

Estaba comiendo a cada hora, armando un desastre en la cocina o llenando de migas y manchas grasientas los sofás. Desorden y suciedad que más tarde tendría que recoger y limpiar Ella.

Pero aun con toda su dejadez y su martirizadora voz de gallina, Annie era la menos mala.

Y eso fue exactamente lo que recordó cuando vió a Drisella acercarse a su habitación, con su característica sonrisa malévola en sus labios.

- Hey, Ella Mugrientela.

Annie rió ante su broma, como siempre hacía. Ella se cruzó de brazos y decidió zanjar la conversación.

- ¿Qué queréis? Estoy muy ocupada.

-¿Y tú con que?- la del pelo rojo preguntó con sorna -no tienes amigos, ni novio, ni ropa que doblar.

Ambas se rieron y las ganas de asesinar en Ella aumentaban cada segundo. No podía concebir que pudiera odiar tanto a alguien que formaba parte de su propia familia.

- Tienes que lavarnos unos vestidos. El viernes tenemos una fiesta de cumpleaños.

Y así era Drisella. Lanzaba sus órdenes como la señora de la casa, arqueando una ceja con superioridad y agitando su frondosa melena oscura.

Su hermanastra mayor casi no vivía en casa, más bien andaba de discoteca en hotel gozando la buena vida. Pero cuando ella estaba, se notaba.

-¿Y porqué demonios tendría yo que hacer eso?

La mandíbula de Drisella se apretó en tensión, a la vez que agarraba con fuerza el brazo de Ella.

-Porque tú y tú padre el impedido sois un par de parásitos que viven a costa del dinero de mi abuelo, sin aportar nada a esta jodida casa.

Ella sintió su corazón encogerse en su pecho mientras las lágrimas resbalaban por sus mejillas, para alegría de Drisella.

-Eso no es justo- Ella replicó con un susurro, sabiendo que esa era una guerra perdida -Mi padre trabajó muchísimo y tú lo sabes. Él mantuvo a esta familia hasta que sufrió aquel maldito accidente.

La morena sonrió complacida, sintiéndose ganadora de aquella pelea que ella misma empezó.

Odiaba a Ella, la odiaba aunque no sabía porqué.

Cuando sus padres se casaron, las tres eran inseparables. Drisella adoraba cuidar de la pequeña Ella y Annie era el juguetito de las dos.

Pero el tiempo pasó, la inocencia de la niñez dejó paso a la rebeldía adolescentes. Se volvieron muy distintas, quizá demasiado. Cada una creció a su manera, con su propio carácter y su propio pensamiento. Envenenadas por la rivalidad malsana que su propia madre alimentó.

-Eres mi criada y no se hable mas- Drisella ladeo su cabeza y le lanzó un trapo húmedo color beige a los brazos, sin dejar de sonreír.

-Creo que hay dentro está tu rata- Annie susurró señalando al trapo.

Ella abrió rápidamente el trapo mientras escuchaba el ruido de los tacones de sus hermanastras al alejarse.

Y allí estaba, húmedo y temblando de frío su pobre hámster.

-Gus, gordito...¿qué te hicieron esas brujas?

El animal siguió temblando, aún cuando Ella lo metió en su cama y lo arropó con su manta.

¿Cómo podían tener tanta maldad aquellas tipejas?

Ella no lo entendía, aunque, claro...En Lily Tremaine tenían una buenísima maestra.

Si tú buscabas villana en el diccionario, de seguro te salía su descripción: fría, egoísta, interesada y soberbia.

A pesar de ser una mujer realmente hermosa, su opaca personalidad ensuciaba su belleza.

Ella no entendía como su padre, un hombre honesto y cariñoso, fue a enamorarse de semejante diabla.

Obvio, todos piensan con el pene. Y los que no...seguro que son eunucos

Ella rió suavemente ante su propio pensamiento, ya aliviada al ver que Gus había dejado de temblar. Le dió de comer unas cuantas pipas con su mano y lo volvió a meter en la jaula.

Gus corrió a refugiarse en un rincón, tapándose su cara con las manitas. Jack, el otro hámster, corría como loco en la rueda.

-Ojalá entendieran lo importantes que son para mí, señor Gus y señor Jack- Ella les sonrió, observando cada uno de sus pasos -Si alguna vez os llaman bichos, no les creáis. Ustedes son más que eso.

Algo vibró debajo de la almohada. Ella fue corriendo a por su móvil y se tumbó en la cama, cara a la pared.

Nadie en aquella casa debía tener conocimiento sobre su Sony Xperia E. O acabaría en el fondo del cubo de basura.

El icono de whatsapp se iluminó en la parte alta de la pantalla.

Maia
Buenos días, princesaaa
11:23

Ella
Buenos días? Llevo tres horas despierta
11:24

Maia
Necesito descansar...tengo ke estar deslumbrante para la fiesta
11:26

Ella
Fiesta? Ke fiesta? Y desde cuando vas tu a una fiesta? :0
11:27

Maia
Discúlpame, pero yo soy muy sociable....además a ese cumpleaños no podemos faltar
11:29

Ella
Cumpleaños??? Seguro ahi es donde van mis hermanas...pasando del plan :(
11:30

Maia
:o es el cumpleaños de
<3 JAIME ARTHUR<3 no puedes faltar!!!
11:33

Ella
No se kien es ese tipo y no me importa. No kiero compartir espacio con las siamesas y además no tengo ni ropa.....
11:37

Maia
Tu no te preocupes por nada yo te preparare para ke seas la mas bonita
11:38

Ella
Pero...y mis hermanastras? Y Lily? No puedo dejar a mi padre solo :( y ni ropa tengo es mas ni me invitaron
11:41

Maia
No te preocupes mas yo usare mi magia y bidibum!!! todo arreglado

~Broken Disney~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora