Capitulo 4: Una herida del pasado

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>>narrando tn______<<
Estaba llorando mientras L me abrazaba. De algún modo me sentí reconfortada en sus brazos y sentí una necesidad por decirle todo lo que había estado guardando por tanto tiempo. Sequé mis lágrimas y rodeé con mis brazos el cuerpo de L temerosa.

—Ellos murieron frente a mi—susurré mientras lo abrazaba con mas fuerza—habíamos salido al médico por que yo estaba enferma. Un hombre estaba esperándonos afuera del consultorio, y nos siguió, al principio pensamos que no era nada significante, pero luego nos siguió en coche. Entonces...—me detuve, el recuerdo era muy vívido—entonces empujaron el coche de mis padres hacia el acotamiento y salió de la calle, dos hombres bajaron del auto y corrieron, apuntaron con sus pistolas a mis padres y les dieron. En seguida, me apuntaron a mi, yo estaba petrificada, pero otro hombre atrás grito que me dejaran viva—L me abrazó muy fuerte y besó mi frente, después me apartó y me vio a los ojos. No dijo nada. Solo me miró por un instante y lo abracé de vuelta. Odiaba esos recuerdos. Nunca entendí por qué habían hecho eso, ni quién estaba detrás de eso.

—cuando era niño, solía pensar que este lugar era mágico, Sungyeol y yo imaginábamos muchas historias y una de ellas era que salvábamos  a una princesa de un ogro que se había comido a sus papás. Yo siempre era el príncipe y Yeol era el caballero valiente, y como el no quería a la princesa, ella siempre me elegía a mi—dijo L mientras me soltaba

Me compró un helado y nos sentamos a ver como los niños jugaban, me sentía mejor, después de haberle contado a alguien.

Me llevó a mi casa y platicamos un rato. Finalmente nos despedimos, y entre a la casa. Esta vez no parecía tan sombría como antes.

Al día siguiente llegué a la escuela y de nuevo estaba Dongwoo esperándome, traté de evitar que me arrinconara como siempre, así que lo saludé.

—hola

—¡hey! Finalmente has cedido—dijo Dongwoo sonriendo

—no, en realidad creo que no puede ser tan malo ser amigos

—y ¿que te hace pensar en eso, hermosa?—me dijo hoya

—me refiero a que prefiero ser su amiga a su enemiga

—eres inteligente, entonces—dijo alegremente hoya, pero Dongwoo hizo un gesto de que callara

—pero sabes que yo no quiero que seamos amigos—dijo con gesto pícaro

—lo siento, pero mi corazón le pertenece a alguien más

—¿y quien es ese tonto?—su rostro se volvió severo

No supe que contestar, de hecho estuve a punto de decir que L, pero no quería que se metieran con él, y entonces vi pasar a Sungyeol.

—él—dije señalándolo

Dongwoo lo vio desafiante

—¿ah si? Ya veremos

Sungyeol le echó una mirada molesta mientras que hoya se reía disimuladamente

entonces entendí que Dongwoo no dejaría en paz a Sungyeol de ahora en adelante, vaya lío que había causado de nuevo. " ¿que hice?" Me pregunté frustrada.

Caminé hacia mi salón y vi a MyungSoo, de nuevo ensimismado. Me senté a su lado y saqué de mi mochila un dulce de limón de los que suele comer Sungjong, y lo dejé en el banco de sungjong.

—¿que es esto?— me dijo L

—un dulce, comámoslos juntos, antes de que empiece la clase—le respondí

—pero ya casi suena el timbre—objetó

—andaaaaa, nadie se dará cuenta—le hice un gesto de suplica

Tu Sonrisa, Mi fuerza [terminado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora