c a p í t u l o 5

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Ashley PDV

Los últimos días han sido los mejores.

Espero que sepan de lo que hablo. La mayoría Justin ha ido a mi casa y no sólo hemos tenido sex*, hemos hablado mucho, en serio, llegue a conocer mucho a Justin.

O eso es lo que yo creo.

No me ha querido decir por qué salió de Canadá y cuál es su trabajo, y yo no soy lo suficientemente boba para no saber que se trata de algo gordo. Bastante gordo y grande. No son muchas las pistas que me da, sólo sé que a veces recibe dinero, mucho dinero, y llamadas misteriosas de un momento a otro.

Así que aquí estábamos. Él con su cabeza en mi abdomen mientras yo hacía masajes en esta.

—Deberíamos salir— digo aburrida

—¿Adonde?— cuestiona levantado levemente su cabeza para mirarme

—Pues no lo sé, una fiesta, bar, lo que sea.

—Espera reviso mi celular, debo tener alguna invitación.

Efectivamente, casi 20 minutos después estaba con Justin entrando a la fiesta de alguien desconocido.

—¡Vamos por cervezas!— dijo en medio de todo el ruido de la música. Asentí y fuimos en busca de la cocina

Una hora después ya estaba totalmente borracha y había perdido a Justin.

Fruncí el ceño al creer haber visto a Sara y Lauren. Las seguí hasta que me di cuenta que en serio eran ellas. ¿Por qué no me dijeron que vendrían? Zorras.

Decidí ignorarlas y me fui a bailar. Empecé a mover mis caderas en medio de la multitud, cuando unas conocidas manos atraparon mi cintura.

—Te he estado buscando— susurro en mi oído

Lo ignore y empecé a moverme entre sus brazos. Me voltee y miré a sus ojos.

—Mira lo que he conseguido— saco un par de pastillas de su bolsillo. Sonreí y tome una viendo como él tomaba la otra

En minutos, mi alrededor se volvió confuso, feliz.

Oh Dios, no recordaba lo bien que se sentía estar drogada.

Mire a Justin felizmente y lo besé, como nunca, como si el mundo se estuviera acabando en esos mismísimos segundos.

Escuche un vaso caer cerca de nosotros, haciendo que todo el alcohol salpicara en mis pies. Me separé de Justin y mire para maldecir al responsable.

Al ver a Sara, lo único que hice fue sonreír con malicia, muchos puntos para mí.

Justin no estaba en sus cinco sentidos para darse cuenta de esto, me volteo bruscamente la cara y me volvió a besar, esta vez mordiendo mis labios con sus dientes. En segundos encontramos una habitación vacía en la casa y lo hicimos.

Estaba muy feliz. Pero no quería volver a las drogas, no lo haría de nuevo.

Yo había conocido mucho a Justin, pero él a mí no, tal vez se espantaría con mi pasado.Temía de este, no es que hubiera sido una prostituta, criminal o algo así, pero fue algo lleno de tristeza y sufrimiento para mí.

Rápidamente volvimos a la fiesta, pero esta ya estaba acabando así que nos fuimos completamente desorientados y drogados.

Al amanecer llegue a mi casa y me puse a dormir junto a Justin.

No fuimos, nuevamente a la universidad pero ya no importaba, no estábamos haciendo nada ahí en realidad.

Comimos un montón y jugamos video juegos hasta que Justin hizo una pregunta que me inquieto muchísimo, sabía que lo preguntaría pero no que sería tan pronto.

I'm a bitchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora