Ese Secreto..

4. Mi compañera

Al primer recreo del lunes salí a caminar con Sofía y lo que vi era de esperarse, no se en que estaba pensando al imaginar que Damián podía darme una oportunidad de ser su polola o algo así, estaba besándose con una chica que al parecer no era su ex, decidí salir rápidamente de ahí y hacer como que no vi nada.

- ¿Estas bien?.-me preguntó Sofía

- Claro.. -dije mientras no podía contener el odio

- Tu mereces alguien mejor.-

- Caí a sus pies como una estúpida.-

- Ya encontrarás un chico que te sepa valorar.-

- Simplemente estoy enojada, no se como fui tan tonta.-

- ¡No digas eso!, El fue el estúpido.-

- Claro..-

Después de esa pequeña conversación me senté en mi puesto, me puse los auriculares y la música al volumen máximo, no se como lo soportaron mis oídos pero realmente estaba muy enojada y nisiquiera con el, era conmigo misma.. Lo estúpida que fui, lo ingenua, lo confiada.
Obviamente tenía que tocar el timbre otra vez para indicar la entrada a clases así que estaba obligada a ver al responsable de mi humor y además sentarme a su lado. Cuando entró a la sala mágicamente se me olvidó el enojo y llegó la vergüenza de siempre pero esta vez era peor ya que lo había visto hace algunos minutos comiéndose con una chica.

- ¿Te pasa algo?- me preguntó

- No.-dije mientras revisaba mis mensajes en whats app

- ¿Que te pasa?-

- Nada.-

- Te ves rara.-

- Tal vez.-

- Como digas.-

Entró la profesora y comenzaron las clases
Después de las clases todavía quedaba el segundo recreo y aún faltaba el almuerzo y la salida..Y todo un día para verlo, pero con las horas y lo que estaba "destinada" a ver me aburría.

- Entiéndelo, el es un estúpido.- Dijo ella.

- Un estúpido que me gusta.-

Tocó el timbre Otra vez ..

- ¡Vamos!- Dijo Sofía.

- A donde quieres ir? -Respondí.

- A almorzar (?-

- No tengo hambre.-

- Vamos.-

- No quiero.-

Ella casi nunca iba a almorzar así que compró unas galletas de Soda y ese fue mi almuerzo (junto al de ella), no se en que estaba pensando, tan distraída .. Ese niño si que quitaba gran parte de mi tiempo.

- ¡Escuchame! -dijo una voz..

- ¡¡OYE!! - seguía molestadome

- Ah? - dije extrañada

- Quieren hablar contigo.-

- ¿Quien?-

- La profesora.-

- En serio, ¿Cuando?-

- Vino recién, tienes que ir ahora.

Salí de la sala y la profesora (jefe) estaba ahí, no sabía que hacer y miré a los demás que estaban, eran alrededor de 5 de mis compañeros.
- ¿Que pasó en matemáticas?- Dijo la profesora.
Ahí me acordé que hablaba lo del otro día cuando no trabajé por que me dió vergüenza preguntar, ahora que lo pienso fue muy estúpido de mi parte, y si.. Uso bastante la palabra ESTUPIDO.

- ¡Hablen!, odio que se queden callados - Dijo ella.

- No se.- Respondí.

- Como que¿"no se"?

- Me dió vergüenza preguntar -Bajé la mirada.

- Y ustedes? -Dijo refiriéndose a los otros 4 que estaban conmigo.

- No entendimos.- Respondieron.

- Llamaré a sus apoderados, entren a su sala, tienen clases- Dijo.

Entramos y Damián me comenzó a mirar fijamente (mirada que preferí evitar). Después de un mes ya no me daba vergüenza hablarle y se me fue el pánico pero la cosa es que dejamos de hablar, lo cambiaron de puesto por que conversaba mucho con sus amigos que se sentaban atrás, el había terminado con su polola y estaba coqueteando con otra más, yo seguía babeando por el, no puedo creer en lo que perdía mi tiempo..
(Un mes después)

-Maldito lunes, por que no desapareces de la semana, podríamos comenzar con martes y así tendríamos 3 días para descansar, a todo esto tengo que entregar un trabajo mañ..-

Me tropecé con alguien..

-Disculpa, no me di cuenta que venías.-

Me dio un poco de vergüenza y respondí sin verle el rostro

-No te preocupes, yo tampoco me Di cuenta.-me decidí para verle la cara y quedé helada.

Un poco mas alta que yo, era bastante delgada, tenía cabello castaño y ojos genialmente negros. Ella me seguía mirando pero yo no sabía que hacer, hasta que me di cuenta que era mi compañera

- Disculpa.-dije sin pensar

- No te preocupes, da igual.

- ¿Vamos juntas?.-

Fuimos directo a la sala para luego continuar con la rutina de la semana, los mismos compañeros con esas miradas estúpidas de cuando llegas tarde, el mismo recorrido de la puerta a mi asiento.

Después de esa clase, en el recreo quería ver a la chica que vi en la mañana así que me armé de valor y le fui a hablar Mientras Sofía me dejaba sola por que "esa chica" era demasiado rara, la miré un momento y noté que estaba sola escuchando música con sus auriculares.
- Hola.- Le dije.