III.

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Tomó el té que había comprado en el local y dio un sorbo, cerrando los ojos debido al sabor y a la tibieza del líquido, sonrió, y observó por la ventana, dejándose maravillar con la lluvia que para ese momento parecía incesante y potente. Suspiró y miró su reloj, Wonwoo llevaba cinco minutos de retraso, pero no le importó, después de todo, el mayor nunca era tan puntual para algo, excepto para el trabajo, llegaba incluso antes que él

Comió del pastel de maicena, manjar y coco rallado y sacó su teléfono, después de todo, tenía niveles que pasar aún en Zombie Tsunami

¿Aun con ese juego? Desde que te conozco que ya lo llevabas por la mitad y de eso van casi ¿seis meses?-rieron leve y Mingyu por fin levantó la vista de su celular

Por supuesto que sí, ya te lo dije, terminaré de jugarlo cuando pase todos los niveles, y me faltan cuatro más o menos-le sonrió-pensé que no vendrías

¿Y perderme tu explicación de lo del otro fin de semana? Por supuesto que no-tomó el recipiente con té del alto y tomó un poco-esto está muy bueno- y se fijó en su pastel, sacando una orilla-vaya, muy bueno también-cruzó ambos brazos sobre la pequeña mesita de madera y sacudió su cabello, que debido a la lluvia se había humedecido un poco-¿y bien?

Lento, vaquero, tienes algo aquí-y con su pulgar quitó unas tiritas de coco rallado que habían quedado en la comisura de los labios del mayor, sonriendo-y tu cabello, Jun se enojaría mucho si te ve así-acomodó y peinó son sus dedos el desordenado y brillante pelo de color negro azabache, para dejarlo como a él le gustaba-ahora si-se acomodó de igual manera que el chico pálido, dejando que sus rostros quedaran relativamente cerca y sonrió, notando como un suave color rosa se colaba en las mejillas de Wonwoo, aunque no se movió de su posición inicial-bien, yo...de verdad me gustas, eso-y no pudo evitar mirar hacia otro lado, totalmente avergonzado. Después de todo, nunca se había confesado a otra persona y menos a un hombre, porque a pesar de que siempre supo que le gustaban las personas de su mismo sexo, siempre fueron ellos quienes le pedían salir o ser su novio, nunca él, por lo tanto, todo esto era totalmente nuevo y totalmente aterrador también

¿Desde cuándo?

Desde que nos presentaron-miró la superficie de la mesa-pero no te dije nada hasta ahora porque creí que era solo un crush, algo pasajero y que al saber que eras hétero se me pasaría, pero fue al revés-mordió su labio

Eso explica que ese día en el elevador no me hayas saludado-sonrió autosuficiente-bien, entiendo tu punto de vista y debo decir que estoy realmente halagado, nunca en la vida se me habían declarado de manera tan torpe y borracha como la tuya-rió bajito y Mingyu pudo sentir como se burlaba de él y mordió su labio aún más-aunque eso no signifique que no me haya gustado-el pelinegro levantó su mentón con su mano derecha y lo observó de cerca, con un brillo en sus ojos que hasta el momento no había aparecido y que el alto nunca había observado-si tengo que serte sincero, empecé a cuestionar mi heterosexualidad cada vez que nos veíamos, es decir, todos los días. Me preguntaba por qué cuando sonreías me hacía sonreír, por qué cuando llorabas me daban ganas de ser tu apoyo y confortarte, por qué cuando salíamos quería ser la única persona con la cuál bailaras y te emborracharas, por qué cuando Jun te maquillaba y peinaba lo odiaba, porque podía tocarte más que yo y hasta que me dijiste que te gustaba, vaya, eso cambió todo para mí. Nunca pensé que fueras gay, Mingyu, y por eso tampoco quise hacerme falsas esperanzas y también porque estaba muy asustado, demasiado. Jamás me había gustado un hombre, ni siquiera en la universidad y si tengo que serte realmente honesto, pensé que algo había mal conmigo, tuve que incluso hablarlo con mis padres

I: the journalist {meanie}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora