Diez

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Alex no sabía por qué diablos su boca estaba chocando contra la de Eleanor Friedberger, sólo sabía que, en alguna parte de su mente, eso estaba bien aunque tuviese pareja, una pareja meramente NO heterosexual cómo todos lo esperaban.

Pero siguió la corriente.

Las manos de la castaña viajaron hasta el cuello de Kapranos y ahí permanecieron hasta que la mágica se acabó, o sea, cuando Nick McCarthy llegó.

-¿Al... -Tartamudeó el alemán boquiabierto; Alex la separo de inmediato.

-Bu-bueno –Musitó ella-, nos vemos afuera –Y le guiño el ojo. Acto seguido aparto sutilmente a McCarthy de la puerta y salió.

Y se quedaron solos.

-¿Pero qué coño fue eso, Alex? –Interrogó Nick despectivamente

Alex suspiro incomodado

-N-nada –Titubeo sin darle frente

-¿Nada? –Reprendió de nueva cuenta- ¿Nada? ¡¿Me estas jodi...

-¡Carajo, carajo, cálmate, Nick! –Vocifero harto- Actúas como si fuera un enorme pecado

-¡Estabas besando a la bruja nariz de patata!

-¡Cállate! –Suspiró con pesadez y ya no sabía si recriminarle el apodo o dejarlo pasar- Fue una confusión

-¿Una confusión? –Repitió socarronamente- ¿Te imaginas que en vez de haber sido yo, hubiera sido Michael?

Alex palideció al instante.

-¿Ahora si te preocupas, no? –Reprocho

-Ella comenzó –Advirtió en modo de defensa

-¿Y por qué le seguiste?

-Y-yo, no, no lo sé

-¡Ay por favor!

-Nick, por favor, no me cuestiones más –Se desplomo en una silla-. Estoy jodidamente cansado, la presentación ha estado buena pero necesito descansar y no reproches de tu parte

-Ni siquiera tocamos Michael; yo quería tocarla, quería que Mike's la escuchará también

-¿Mike's? –Frunció el entrecejo-. ¿Desde cuándo son tan amigos?

Nick inquirió haciendo un gesto desagradable

-¿Qué te pasa, Kapranos? –Interrogó-. ¿Por qué te molesta que lo llame así? ¿Te molesta que me encariñe con él y no con la bruja neoyorquina que canta para morir?

-¡La cabeza me explotará, Nicholas!

Nick suspiro entonces.

-Bien –Le dio la espalda-. Sólo espero que lo pienses mejor y no hagas una pendejada; y por pendejada me refiero a lastimar a Michael.

******

Cuando Alex pudo tranquilizarse cambio su camisa y tomo algo de licor. Tomo una bocanada de aire, colmándose de mucha paciencia.

Salió del camerino con cautela, no quería que nadie lo viera, ni Michael.

Pensaba en todo lo que Tore le dijo, "-Es por el bien de Franz Ferdinand. A ninguna chica le atrae eso, Alex; ¡Ellas quieren fantasear contigo, no contigo y otro muchacho! ¡Le llevas catorce años de ventaja, 14!"

Pero antes de seguir su camino por el angosto pasillo, alguien le giro por la cadera y le plasmo un beso.

-¿Mi-Michael? –Balbuceo el rubio anonadado sin poder articular bien las palabras, la boca del contrario obstruía la suya.

-Estuviste genial –Le dijo. Volvió a devorar su boca con un libido lleno de morbo- Cantas mucho mejor en vivo

Sin querer sonrió.

Y al fin le correspondió.

Tomo su cintura con suavidad y lo pegó aún más a su cuerpo y fue guiándolo hasta una puerta poco conocida, aunque bueno, ¿Qué tan conocida tenía que ser sí tenía un letrero de "SÓLO PERSONAL AUTORIZADO" en tinta roja?

Giró la perilla, con el cuerpo de ambos empujo la puerta y entraron.

Lo único que podían identificar era una mesa y una ventana sumamente angosta y pequeña en dónde entraba apenas la luz de la luna; Alex tomó al chiquillo por los costados de su cuerpo y lo sentó en la mesa.

Michael lo envolvió por las piernas, lo abrazo y los dos quedaron muy pegados entre sí, sin una cavidad de aire o un hueco por donde mirar.

El castaño bajo sus manos hasta la bragueta del pantalón; empezó a rozar su mano contra el bulto del contrario, quien ya estallaba por sacarlo. Tras maniobrarlo una y otra vez fue sacándolo de poco en poco. Kapranos daba leves gemidos que pronto fueron haciendo eco en los oídos de Michael.

Alex, por su parte, desabotono su camisa y fue acariciando su cuerpo, aserciorandose de hacerlo lento y satisfactorio, aunque para Michael, cualquier cosa que Alex hiciera era perfecto, porqué Alex era perfecto ante sus ojos.

Michael dejo de maniobrar sobre Alex y dio paso a la penetración...

-Ouch... ahhh –Gimió el menor-, hm, ouu, A-Al... ¡Ouh!

Y fueron intercalándose más y más.

Words os love and words of leisured

words of poisoned darts of pleasure

died and so you died...



Michael | Franz Ferdinand FicDonde viven las historias. Descúbrelo ahora