Dark Obsession

Capítulo 38

En la semana, a Jake y a mí nos llega la invitación para la fiesta de cumpleaños de Luna que será el sábado, estoy emocionada, pues será el primer cumpleaños que pase junto a mi hija. Andy me avisa que debemos ir disfrazados, yo se lo comunico a Ale y Max, quienes también han recibido sus invitaciones y, al igual que yo, se entusiasman. El miércoles, al salir del trabajo, Jake me manda un mensaje donde me dice que no podrá pasar a recogerme, me relajo, sé cómo es su trabajo, y lo estresante que es. Camino por la ciudad rumbo a mi casa, cuando algo me detiene, me toman del hombro y al girar, veo a Jeremy, sigue igual, la cólera me invade, mas no sé el por qué.

Jinxx: Hola Abi, que gusto verte
Abi: Yo no opino lo mismo
Jinxx: Supongo que no...
Abi: ¡¿En donde diablos te has metido?!
Jinxx: Me fui con mi hermana... ¿pero por qué la preocupación?
Abi: ¡¿Por qué la preocupación?! ¡¿En serio quieres saberlo?!
Jinxx. Pues sí...
Abi: Veamos... en los últimos meses te has empeñado en forjar un sentimiento que jamás va a ser correspondido, a eso súmale que tu novia está embarazada y esperando un hijo tuyo, te desapareces sin saber si esta bien o no
Jinxx: ¿Y?
Abi: ¡¿Es una maldita broma?! ¡¿Acaso me estás tomando el cabello?! ¡¿Qué no te importa tu hijo?!
Jinxx: Claro que me importa
Abi: No parece –Doy media vuelta para seguir con mi camino, pero de nuevo Jeremy me toma del brazo- ¡¿Qué diablos quieres?!
Jinxx: Hablar contigo
Abi: ¡Grábatelo en la cabeza Ferguson! ¡Tú y yo no tenemos nada de qué hablar! ¡Lo nuestro es pasado y nunca podrás recuperarlo!
Jinxx: Dame la oportunidad...
Abi: ¡No! ¡Vive tu vida, y déjame vivir la mía!
Jinxx: ¡¿A lado de Jake?!
Abi: ¡¿Y de quien más entonces?! ¡Él es el único que no me ha fallado, que no me ha dado la espalda como lo hicieron Andrew y tú en su tiempo! Y no dejaré que alguno de los dos se empeñe en hacer fracasar mi relación –Siento una punzada en la cabeza tan fuerte que me hace doblar de dolor, siento como Jeremy me toma de los codos-
Jinxx: ¿Te sientes bien?
Abi: De maravilla... ahora largo ¿sí? Aléjate de mí –Tomo mi bolso y emprendo camino-

La cabeza sigue punzándome poco a poco, pero intento olvidar el dolor en ese momento, mi respiración se agita y me detengo un momento a tomar un poco de aire en una banca. Los dolores comienzan a bajar poco a poco, hasta que por fin ya estoy estable, y tranquila para poder seguir mi camino. Sé de qué se tratan esos dolores, sé por qué me dan, pero no me había dado uno desde hacia tiempo, cuando aún vivía en casa de los Biersack. Al llegar a casa todo esta silencioso y aburrido, hasta que los ladridos de Ernie irrumpen el silencio. Lo cargo, juego un poco con él y estando en mis brazos, lo subo a mi habitación. Me quito la ropa del trabajo y busco entre la ropa de Jake una playera que me quede lo suficientemente larga. Cuando la encuentro, rápidamente me la pongo y bajo a la cocina a hacer la cena de esta noche. El reloj marca las ocho de la noche, pero no hay rastro de Jake, cosa que me preocupa, le marco al teléfono y de inmediato me manda al buzón, mi cabeza piensa en mil y un posibilidades, entre ellas, que la pila se acabó, o quizás solo no quiere responderme, cosa que considero improbable. Las horas pasan, y simplemente nada, me he resignado a cenar yo sola, mientras miro la televisión. Llaman a la puerta, me levanto y abro la puerta, es Jeremy de nuevo, justo cuando estoy por cerrarle la puerta en sus narices, mete el pie y la traba, no me queda más remedio que abrir la puerta.

Abi: ¿Qué necesitas?
Jinxx: Primera, saber si estás bien
Abi: Por supuesto que lo estoy, ¿qué más?
Jinxx: Vamos Abi, ya no seas tan cortante conmigo por favor
Abi: ¿Y cómo quieres que sea después de como te has comportado?
Jinxx: ¡¿Desde cuando te importa lo que le está pasando a Alejandra?!
Abi: ¡Desde que es mi amiga! ¡Y así como yo me preocupo por ella, ella se preocupa por mí! –De nuevo una leve punzada ataca mi cabeza, pero intento resistirla-
Jinxx: Claro, si vieras como habla de ti
Abi: ¡Por todos los cielos! ¡Conozco a Alejandra, ella no es una hipócrita como los chicos de la universidad! ¡A mí no me vas a confundir Ferguson! –Otra punzada, ahora más fuerte-
Jinxx: Todos en la universidad fuimos completamente transparente contigo
Abi: Claro, tanto así que me vieron la cara de estúpida después de que comenzaste a andar con Sammi, ¡¿no es así?! –Grito, estallo, y la tercer punzada me hace caer al suelo, provocándome un fuerte dolor de cabeza-

Y ese mismo dolor comienza a aumentar, grito de dolor, lloro de desesperación, me siento mal, a lo lejos escucho la voz de Jeremy, está preocupado, apenas y puedo articular unas palabras, siento como me toma entre sus brazos y me levanta del suelo. El dolor aumenta, y simplemente no lo aguanto, no sé cómo soportar esta agonía, este dolor.

JINXX
Cuando vi que Abi se había desplomado al suelo, rápidamente me acerqué en su auxilio, solo la escuchaba decir que la cabeza le dolía, y no sabía que hacer, lo único que mi mente pudo pensar en ese momento fue en cargarla para llevarla al hospital. Ya en el carro, manejo lo más rápido que pude, mientras sacaba mi teléfono. Marco dos veces al teléfono de Jake y maldigo cuando no me responde. A la tercera por fin se escucha que contesta.

Jake: Jinxx, amigo, ¿qué hay?
Jinxx: Dime dónde estás
Jake: Saliendo del estudio y voy para mi casa
Jinxx: Desviate por favor para el hospital
Jake: ¿Pero por qué? ¿Pasó algo malo?
Jinxx: Abi se puso mala... ¡por favor hazlo!
Jake: Bien, entonces nos vemos allá –Ambos colgamos-

Abi sigue diciendo lo mucho que le duele la cabeza, maldigo, pues el trafico me alenta demasiado, y cuando hay un hueco, lo aprovecho y manejo a todo lo que da para el hospital. Al llegar, tomo a Abi entre mis brazos y bajo corriendo y pidiendo ayuda, por fortuna un par de médicos me ven y llaman a una camilla. La acuesto y se la llevan para examinarla, en el tiempo en que conocía a Abi, jamás se había puesto tan mal como ese día, y no entendía por qué. El tiempo pasa lento, y cuando menos lo espero, aparece Jake, completamente alterado y nervioso.

Jake: ¡¿Dónde está?! ¡¿Qué ha pasado?!
Jinxx: Aún no se... la ingresaron hace unos minutos, pero no me han dicho nada
Jake: Maldita sea... ¡¿por qué no estuve ahí?!
Jinxx: Calmate... no puedes alterarte amigo, por ahora tenemos que mantenernos completamente tranquilos y esperar a ver que nos dice el medico
Jake: Lo sé... pero es que simplemente no puedo dejar de preocuparme por ella
Jinxx: Ya sé amigo, pero debes calmarte al menos por ahora... -Asiente y toma asiento-

El tiempo pasa lentamente, los médicos no salen y Jake y yo estamos con el pendiente. De un momento a otro veo como Jake se levanta y sale un momento a hablar por teléfono, supongo que ha de haber sido al hermano de Abi para explicarle la situación. En cuanto regresa, me entrega un café y se lo agradezco, mis nervios están a tope, hasta que por fin sale el médico.

Dr.: Buenas noches, ¿ustedes son parientes de la señorita Black?
Jake: Yo soy su prometido... dígame cómo está
Dr.: Descuide... ya pudimos controlarle el dolor de cabeza, es algo normal, ¿no saben si se tomo su medicamento?
Jake: ¿Medicamento?
Jinxx: ¿Está seguro que nos está hablando de nuestra paciente?
Dr.: ¿Que no son parientes de la señorita Abigail Black? –Ambos asentimos- Ustedes sabían que ella usa medicamento, ¿no es así?
Jake y Jinxx: No –Respondimos al unisono-
XXXXX: Yo sí... -Ambos miramos a la puerta y vemos a su hermano parado-
Dr.: ¿Conoce a la señorita Black?
Andy: Por supuesto... soy su hermano, Andrew Biersack
Dr.: Supongo que usted sabe más del tema entonces... por favor acompáñeme
Jake: Yo también quiero saber esto... soy su prometido
Andy: Está bien... pero tienes que ser fuerte, por favor
Jake: Siempre, con tal de saber que Abi esté bien –Ambos asienten y, junto con el médico, se marchan-

Me quedo sentado en la silla, preocupado por Abi, preguntándome cómo estará y por qué no había mencionado nada de su enfermedad en el tiempo en que estuvimos juntos como pareja. Las piernas empiezan a dolerme, me levanto de la silla y me estiro un poco, y cuando giro la cabeza hacia la puerta, veo a Ale. Mi corazón palpita a mil por hora al verla, y más con su hermosa pancita donde está nuestro hijo, pero la alegría se esfuma de un momento a otro al verla entrar con un sujeto que jamás había visto en mi vida. Ambos me ven, ella se sorprende, él se molesta, pero yo no pienso ceder tan sencillo, después de todo es mi novia todavía. Es como una lucha de titanes donde gana el más fuerte, el sujeto que va con Ale se la lleva a un lado aparte, mientras ella me mira con ojos cristalinos. Sé que le he hecho daño, que la he lastimado de la manera más ruda posible, pero necesitaba estar lejos de ella, poder apartarme para saber qué es lo que siento realmente y por quien lo siento, si por Abi o por Ale.   

N.A.: ¡Uff! Y las cosas comienzan a complicarse cada vez más 7u7r

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