Que lugar tan peculiar [South Park y Tú]

Capítulo 5.- Abrazos

Desperté un tanto aturdida por el sueño que tuve ayer. Hacia tiempo que no soñaba con dos chicos teniendo relaciones sexuales descontroladamente. Espero y no se me salga lo fujoshi enfrente de la clase. Joder.

Me levanté de mi cama y realicé mi rutina diaria: Cepillo, ducha, desayuno, y la elección de mi atuendo de hoy; consiste en una chula polera que tiene una calavera con una corona de flores- rehipster mi polera-, unos jeans claros, y unos botines a juego con una parka marrón. Me veía divina.

Después me hice una trenza estilo frozen y salí en dirección hacia la parada del autobús. No vi a mis padres en toda la mañana, solo llegue a ver una notita que me dejaron con el siguiente mensaje: "Hija, lamentamos no recibirte ayer y esta mañana, estamos muy ocupados. También hoy llegaremos tarde. Cuidate bebé". Todo lo que hacen por mí, al menos tengo unos lujitos que antes no tenía.

De pensamiento en pensamiento los minutos pasaron rápido y mis pies me hicieron llegar en seguida a mi destino, la parada. Pude notar que el pelinegro... Stan creo... se veía algo decaído.

-¿Por qué esa cara?

-¿Uh? -Parece que lo interrumpí de sus pensamientos.- Ah, eres tú _____. Buenos días. -Contestó mirando al piso con desanimo.-

-No respondes a mi pregunta.-Reclamé insatisfecha por su respuesta.-

-Ugh. Lo que me pase, no te incumbe. -Respondió frunciendo el ceño y dirigió su vista hacia otro lado.-

-Perdón, señorito. Tampoco me voy a morir por saber las cosas que te sucedan. -Mencioné enfadada.- Solo trataba de ser amigable, por una vez en mi vida.

-¿Eres ya muy agradable en sí, y quieres serlo más? -Exclamó subiendo el tono de voz.-

-¡¿Estás insinuando que soy pesada?! -Grité con rabia.-

-¡Te estoy diciendo que eres agradable! ¡¿En qué momento dije pesada?! -Dijo devolviendome el grito.-

No pude evitar soltar una sonrisa contenida en mi rostro.- ¡¿Pero que demonios te pasa?! ¿Eres bipolar? De un momento a otro empiezas a-...-Mi sonrisa rápidamente se convirtió en unas sonoras carcajadas, haciendo que el confundido pelinegro me mirara con una cara en plan "Estoy con una loca, ayuda".-

-P-Perdón, creo q-que de verdad me falla la cabeza. Pff... -Mencioné entre risas.-

La verdad es que en medio de la discusión le vi un moco en la cara a Stan, por eso empezaron mis risas. Pff. Planeaba decírselo, lo juro. Pero las risas no me dejaban... Mi sentido del humor es algo especial. Imaginar que todo el mundo le verá el moco me mata de la risa.

-Estas realmente mal de la cabeza...-Afirmó el pelinegro.-

-Nghh... Lo siento.-Dije, ya calmándome.- Uff, ya. Ya pasó.-Mencioné, aliviada porque el ataque de risa ya se estaba apaciguando. Stan solo miraba hacia la nada, mientras que yo le seguía mirando el moco.-

-.... ¿Acaso... tengo algo en la cara? -Preguntó, algo incomodado por la mirada fija que tenía hacia él.-

-No, nada. Simplemente me gustan tus ojos.-Mentí, tratando de no soltar una de mis risitas de loca; lo que ocasiono que me mirara atónito con un leve sonrojo en sus mejillas.-

-Gracias... supongo.-Agradeció, aún con la leve tonalidad rojiza en sus mejillas y las manos en sus bolsillos.-

Permanecimos unos minutos en silencio, hasta que llegaron los otros tres que faltaban. Cartman y Kyle peleando mientras que Kenny estaba al lado del gordo muy concentrado con la revista que tenía en manos.