Capítulo 8

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Ana Dávalo.

Mientras sentia los labios de Nathan contra los míos, mi mente volo hacia ese día..

Flashback (tres semanas antes)

-- date prisa Ana-- rodé los ojos ante la impaciencia de Alexia.

-- dame un minuto -- me retoque los labios.

Nos dirigimos a Frizo un antro que estaba a pocas calles de nuetsra fraternidad.

Esta era una noche de chicas, ya que Nick me dijo que estaría ocupado y que nos veríamos hasta la siguiente mañana decidí salir a pasar un momento agradable con mi mejor amiga.

Llegamos al antro y como éramos conocidas por venir con frecuencia el guardia nos dejo pasar sin hacer fila. Si lo sé la vida no es justa para algunos.

Entramos y como siempre la música estaba a todo volumen varias parejas bailando y algunos estaban entretenidos en otros cosas.

-- ¿te apetece un trago?-- dijo Alexia tomando mi mano para tratar de llegar a la barra dentro de esta multitud de personas.

-- un whisky-- Alexia y yo siempre tomamos tragos fuertes no como estas espudideces de Margarita y Martini.

-- que sean dos -- afirmó Alexia.

Frizo era un antro muy conocido en España los sábados había música en vivo y siempre era para pasar un buen rato con tu mejor amiga.

-- ¿quieres bailar preciosa?-- me di la vuelta y me encontré con un rostro hermoso, era un chico sexy tenía el cabello castaño ojos color miel por su compleccion se notaba que iba al gimnasio.

-- tal vez en otro momento -- trate de ser amable al rechazar la invitación.

El me vio desilusionado y se marchó.

-- pero que te pasa ese chico esta re bueno-- escuché el sermón de Alexia.

-- tengo novio, que no se te olvide-- respondí.

-- eso no te prohíbe bailar con otros chicos, tines 22 disfruta-- Alexia se echó a reír.

Pero ella tenía razón eso no me impedía bailar con otros chicos, además estaba enamorada de Nick asi que los otros chicos no tendrían oportunidad conmigo.

Alexia me sacó de mis pensamientos.

-- ¿ese de allá no es Nick-- Alexia señaló hacia el otro extremo de la barra donde pude ver al capullo de Nathan.

-- es Nathan -- corregí a Alexia.

-- me refiero al que esta a su lado -- entonces vi a una chica de vestido negro por como estaba arreglada podría haberla confundido con una puta.

La chica estaba disfrutando de un apasionado beso con Nick, abrí los ojos y trate de ver mejor esto tenía que ser una confusión Nick no me traicionaria ¿o si?

-- ¡¡capullo!!-- grité pero por la música no se escucho, tomé lo último de whisky que me quedaba.

Nick camino hacía la salida con la puta esa y los perdí de vista.

-- ¿lo seguimos?-- pregunto Alexia Dios amaba tener una amiga tan loca y atrevida.

-- por supuesto--

Fin de flahsback

Nathan Abellán.

Me sorprendió que Ana respondía al beso.

Como un loco la tire a la cama y no deje de besarla, ella no me lo impidió así que decidí seguir hasta donde pudiera.

Fue todo demasiado rápido, Ana me quitó la polera que llevaba puesta y yo hice lo mismo con la suya admire su cuerpo ya que no llevaba sujetador abajo de la pijama pude ver sus pechos ¡¡joder!! Había esperado tanto este momento.

Ella arañaba mi espalda eso me hizo sonreír ya que supe que estaba excitada.

Volví a besarla sin pensarlo mordí su labio inferior y mientras la besaba mis manos iban bajando hacia la entrada de su cuerpo, pude sentir su bragas mojadas.

Ella gemia, de pronto ambos nos detuvimos ya que escuchamos la puerta del apartamento cerrarse. ¡mierda! Nick había llegado.

Oímos pasos que se dirigían hacia la habitacion de Ana.

-- métete en el ropero -- me susurró Ana a lo que yo asentí.

Rápidamente fui al ropero y Ana lo cerró pero había una abertura que me dejaba ver el exterior.

Ana se vistió lo más rápido que pudo y arreglo la cama.

¡¡Mierda!! Mi polera la deje olvidada en el suelo, si Nick no lo notaba sería un milagro.

Se abrió la puerta.

-- Hola amor ¿estas dormida?- Nick camino hacía Ana quien fingia dormir.

Al ver que Ana no respondió Nick le dio un beso en la fentre y se susurró-- te amo-- luego salió de la habitación.

Salí del armario y tomé mi polera del suelo mi respiración aún era agitada al igual que mi pulso.

Me sentí como una mierda como pude hacerle esto a Nick.

Ana no apartó la vista de mi y yo no podía verla a la cara o perdería el control de besarla otra vez.

-- tenemos que olvidar esto -- le dije en un susurro ya que no quería que Nick escuchará.

-- ¿es lo que quieres?--

-- sólo olvidalo Ana-- salí de su habitación camine hacia la cocina necesitaba un vaso con agua.

Para mi sorpresa Nick estaba sentado en el sofá.

-- ¿dónde estabas Nathan?--

-- estuve con Luis -- mentí.

-- ¿acabas de venir?-- mierda sospechaba algo.

-- si-- afirme.

-- Me resulta difícil de creer ya que vi tu auto estacionado afuera cuando llegue di por echó que ya estabas aqui-- tenía que pensar en algo rápido.

-- ¿tines algún problema Nick?-- pregunté

-- ninguno -- me observó por un momento -- descansa Nathan.

Se marchó dejándome sólo con mis pensamientos.

Esto no podía seguir haci tenía que irme de mi apartamento por un tiempo, o hasta que Ana regresa a su fraternidad.

Mi móvil sonó, vi la pantalla número desconocido.

-- ¿quien es?-- pregunte.

-- tienes un paquete en la entrada de tu apartamento -- no reconocí la voz.

-- no estoy para bromas-- dije fastidiado.

-- lo envía Lorenzo Lacasa-- ¿Qué? Ese bastardo.

-- ¿Hola? Responde gilipollas-- pero la persona al otro lado de la línea ya habia cortado.

Me encamine hacia la puerta y al abrirla me quedé helado...

-- ¿Luis? -- susurre..

El Mundo De La MafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora