Capitulo 11 La Otra Cara De La Moneda Parte 1

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Al darme cuenta del poder de mi corona y del riesgo al que estoy exponiendo a Jonatan me di cuenta de que tal vez debería enterrarla y dejarla en un lugar escondido, donde nadie mas la encuentre, al intentar hacerlo me dolía, lo intente de todo hasta le pedí a Jonatan que me ayudara a quitarla pero fue inútil, al tratar de quitarla durante mucho tiempo escuche la voz de aquel ente que vivia en la corona y no había hablado desde que congele el mundo, esta dijo

-No lograras quitarme de ningún modo escoria mortal, como ya te haba mencionado seré dueño de tu cuerpo hasta que mueras por mi presencia

yo no me sorprendí de la respuesta porque ya de cierta manera me imagine que el demonio haría lo imposible para que yo muriera,al llegar la tarde un Inzanati se acerco a nuestro refugio y nos dijo que se  acercaban un grupo de cordero diciendo que nos matarían por ser enviados de satanás y que somos los lobos que venían a corromper las almas de la gente inocente, y por curiosidad pregunte

-¿Quien los encabeza?

a lo que el joven respondió

-¡El Maldito Cura!

yo también me lo esperaba, porque al ver la transformación que  sufrí  pensó que eramos demonios, al igual que el resto de personas no humanas y que desataremos terribles males sobre la tierra y que eliminaremos a la humanidad etc..

cosas de creyentes obsesivo y que creen que cualquier cosa que sea diferente a lo normal ya es acto demoníaco o divino, también me dijo que varios de los Inzanatis que se encontraron fueron masacrados y que algunos fueron crucificados, también amenazaban con matar a cualquiera que se encontraran o que intentaran protegernos, yo agradecí al joven y me dirigí con el jefe de los Inzanatis al cual le pedí el favor de que si me ayudaría a defenderme, el me dijo

- Claro que te ayudare pero con una condición

yo le dije 

-¿cual?

el me respondió

¿Cuéntame de donde viene esa corona y porque es tan peligrosa?

yo al no tener mas opción le conté todo y me dijo

-Tu causa es noble pero lo máximo que podemos hacer por ustedes es pelear y ojala que encuentres lo que tanto anelas

yo agradecí y me integre a la batalla y ai fue donde comenzó todo

los Cordero nos superaban en numero y en armas pro o tenia la corona en caso de que la cosa se pusiera seria, yo tenia en mis manos en ese momento una pistola, una mágnum y una ametralladora, estaba listo para pelear, pero en eso apareció al padre diciendo

-Simón se que estas aquí presente, si no apareces tu pequeño acompañante morirá

yo me presente  le dije

-Déjalo escoria tu problema es conmigo no con el, déjalo o enfrentaras las consecuencias

el respondí muy confiado

-Al fin la rata sale de su madriguera para salvar a su ratita, pensaba que no te importaba que me arias te tengo rodeado y no podrás hacer nada si lo mato jaja que estúpido fuiste al creer que lo dejaria ir no ahora los 2 morirán para que veas que con los cordero nadie se mete

el menado a disparar a Jonatan pero el golpeo al que lo mataría pudiendo escapar con migo pero mientras corría el cura no se rendía,intento disparar a Jonatan pero el corría muy rápido por lo cual no podía darle, mientras los Inzanatis nos defendían, tratando de matarlos, pero el padre se defendía con sus propios seguidores, al final el había demostrado su otro lado, Jonatan seguía corriendo, casi llegaba pero de repente un disparo le dio en las piernas, dejándolo herido, yo corrí a ayudarlo, en ese instante yo solo recuerdo mucho frió y ....









El diario de Simon PetrikovDonde viven las historias. Descúbrelo ahora