--¿Señorita Matwell?--Fui apenas consiente de quien me traía devuelta al débil presente que se iba formando ante mi. No es que la alta y esbelta figura de la oficial Carter me asustara; mucho menos existía la posibilidad de que, irremediablemente, ella me causara algún tipo de inquietud.
--Disculpe, me distraje unos segundos--Le decía en tono firme mientras ella hacia el mayor esfuerzo por parecer interesada.
--Tanto mi tiempo como el suyo es muy valioso Señorita, así que por favor, dígame usted que necesita--Sin duda la oficial Carter no sabia que mi maldito tiempo es sin duda mucho mas valioso que el de ella.
--Créame oficial Carter estar en una oficina policial no es mi pasatiempo favorito--el tono de mi voz había bajado momentáneamente algunos grados bajo cero. Vi el pequeño atisbo de curiosidad en su mirada que un segundo después trato de ocultarme.
--Encuentro entonces oficial Carter que usted fue quien llevo a cabo la investigación de el asesinato del Señor Luis Reyes en el año 2010 y mas concreta mente el 08 de mayo--la observo fijamente mientras ella se ve tan confundida y posiblemente asombrada al ver que alguien como yo puede estar a la altura de alguien como ella. --recordando le entonces que la victima era nada mas ni nada menos que un respetado integrante de la orquesta Filarmonica de Washigton.
--Le recuerdo señorita que esto es sin duda un caso confidencial y que a menos de que usted sea un familiar del difunto lo que dudo mucho no puedo darle ningún tipo de información, lo siento--contraataca gelidamente la hasta ahora muy dura oficial Carter.
Lastima que, indudablemente parezco estar 3 pasos en ventaja de su pobre intento de evitar hacerle revivir uno de sus casos mas complejos.
--Oh, casi lo olvido-- saco rápidamente de mi mochila una carta que muy amablemente el señor Ismael Reyes me ha redactado cuando muy encarecidamente le pedí su autorización para investigar a fondo el caso de su pariente y por ultimo una vieja certificación de mi antiguo colegio donde se afirma que yo hago parte de el grupo periodístico de la Ontaurius High School.
Su mirada se pasea hábilmente desde mi documentación hasta mi rostro donde se detiene para mirarme desafiantemente, no me dejo intimidar y observo satisfecha como perezosamente levanta su huesudo trasero de la maldita silla para al fin buscar en su gran archivero lo que parece ser el expediente que para mi, brilla como la gloria misma.
--Debo suponer entonces señorita Matwell que su interés en este caso es únicamente escolar ¿no?--vaya, la oficial Carter es en verdad una maldita bruja.
--oficial Carter creo que en su trabajo es inaceptable suponer ¿no es así?, por lo tanto siento decirle que el interés de esta investigación es enteramente confidencial en mi institución-- boom, punto para Matwell.-- Pero si tanto le preocupa re-abrir este caso para una inocente alumna escolar es mejor que me retire y hable directamente con su superior-- la miro con firmeza mientras tomo mis papeles de el ya muy viejo escritorio.
--No tan rápido señorita--me, literalmente rapa los papeles y con bastante molestia habré el expediente y empieza a leerme:
--Luis Reyes fue encontrado en la estación New Park en la sexta avenida en el metro de Washigton el 08 de mayo, día sábado con tres heridas de bala en el pecho a las 00 horas, horario Washigton-- me observa unos segundos y continua-- Cuando llegamos al lugar de el deceso encontramos al Señor Reyes tendido de manera occidental sujetando un arco en su mano derecha; su documentación y cartera personal fue encontrada en el piso a la izquierda del cadáver-- sin ningún tipo de delicadeza la oficial Carter me muestra imágenes frívolas y crueles de quien fue alguna vez quien me cambio la vida con su música.
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En la quinta estacion
Teen Fiction"Resulta ser que nada en la vida es constante a excepción de tu mente, hasta que la muerte entrega su carta mas preciada, el suicidio. Allí es cuando nada en la vida es constante" -fragmento de una carta a los Luneth --¿Es que quieres morir Lauren...