Abrí un poco mi persiana dejando ver solo mis ojos marrones, mi respiración empañaba el vidrio de la ventana y mi corazón latía más rápido que la velocidad de un carro en la NASCAR; de la nada una mano llena de una sustancia viscosa color rojo chocó contra la ventana de la casa de al lado, di un salto para atrás ahogando un grito, apague la luz de mi habitación y me metí al clóset.
-solo es un sueño, tienes que despertar! Ahora joder! Ahora!.
Justo en el momento en el que se abrió la puerta del clóset me di cuenta de que esto no era un sueño... Sino una pesadilla, y a comparación de las demás una muy tranquila; mi cuerpo recupero conciencia y a causa del tremendo susto mi cuerpo reaccionó tomando una gran bocanada de aire y abriendo los ojos de golpe provocando que me ahogara con el aire, voltee a ver mi reloj y marcaba con números rojos digitales las 3:00a.m. Eso significaba que aun me quedaban al menos dos horas de sueño, sin embargo y puesto que no podía dormir, decidí bajar y prepararme un expresso doble para después ducharme con agua fría, arreglarme y ver algún capítulo de la serie que pasaban en la televisión mientras daban las 6:00a.m. Para así tomar rumbo hacia el instituto. Si, esa era mi rutina de diario, todo gracias a las pesadillas que también se habían hecho rutinarias, esto había logrado que aparecieran en mi rostro dos grandes ojeras y que mi rendimiento escolar bajara exponencialmente.Ese día escogí ponerme unos Jeans obscuros una playera gris y un gorro rojo, el cual me quité de inmediato por el simple hecho que que me recordaba a las pesadillas, las cuales tenían un factor en común... ROJO.Me encontraba sentada en mi escritorio, mirando hacia el lugar de la maestra.-Perdón maestra, me quedé dormida.-dijo Paz entrando al salón a las 7:03, la maestra asintió con una ligera expresión de desaprobación y yo solo pensaba en cuanto anhelaba que algún día me pasara eso, hasta que Paz se sentó a mi lado e hizo que mi mente regresara a la clase.-Hola Berni.-dijo susurrando.
-Hola.-respondí seca, Paz era mi mejor amiga y sabía de mis problemas de sueño, con una excepción, no sabía acerca de las pesadillas, pero gracias a eso no me preguntaba si había dormido mal, simplemente lo sabia.
-Oye, Ferbuus volvió a preguntar por ti.No supe como responder a eso, así que me limité a darle una pequeña sonrisa de lado y a perderme en el limbo de mi mente. Ferbuus, un chico muy obscuro, con un pasado algo turbio y repleto de rumores junto con su hermana Kali; los dos compartían varios rasgos, ojos azules, piel blanca, cabello negro cual carbón y rostro cuadrado.-¡¿Bernabé que no has escuchado el timbre carajo?!-¿que dices?-eso me contesta todo, vamos quiero comer algo.-No me entré de cuando habia sonado el timbre, no tomé apuntes ni escuche al profesor, solo me quedé pensando, como siempre, en mis pesadillas, con el ligero cambio de la pregunta "¿por que Ferbuus esta preguntando por mi?" rondando en mi cabeza.Nos sentamos en la mesa de la orilla de la cafetería como solíamos hacer, Paz escogió un plato de waffles y un poco de fruta acompañado de leche con chocolate y lo comió con una rapidez impresionante mientras que yo le daba vueltas a mis perlas de sandia y melón con la cuchara.-no planeas comerlo?.-Dijo Kali sentándose con nosotras, voltee con cara de desprecio e hice una mueca.-vaya ojeras...-Déjala en paz víbora.-dijo Ferbuus, lo cual me sorprendió puesto a que son hermanos e inseparables.-que aún así se ve guapa.-decidí ignorar ese comentario y seguir meneando las perlas de fruta. -si no planeas voltear niñita dinos de una buena vez para irnos rápido.-volvió a hablar Kali. -ey, dije que la dejarás, no entendiste Kali?-no me importa.-dijo metiendo una perla de melón chino a su boca.-Bernabé... Me gustaría pedirte ayuda en Matemática, me ayudarías?-a las 2:00p.m. En la biblioteca, segunda mesa.-dije para que se fueran de una vez.-excelente.-esbozó una sonrisa con sus finos labios y palmeó a Kali en la espalda.-vamos.-dijo firme moviendo la cabeza en dirección a la mesa del centro, Kali solo refunfuñó y lo siguió. -si sabes que su promedio en matemáticas es de 100, cierto?.-dijo Paz matándome con la mirada.-por su puesto que se, todos lo saben, así que es claro que me quiere hablar de algo ¿no?Yo no solía ser ruda, no solía hablarle mal a mis amigos, no solía hacer muecas, simplemente, esta no era yo.Regresamos a los salones y siguió mi jornada de no prestar atención hasta que dieron las 2:00 p.m. y me dirigí a la biblioteca.-¿Esperaras sola?.-preguntó Paz, yo asentí y suspiré al mismo tiempo, ella hizo una mueca y saló de ahí junto con Zigor su hermano mayor.Tenia temor en el interior, sabia que había algo malo en todo este plan, sabia que algo saldría mal, ¿por qué había aceptado? ¿qué estaba pasando por mi mente?
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Unconcious (inconsciente)
Mystery / Thriller"Yo solía gritar bajo las sabanas, pero para mi desgracia, no por placer, sino por terror." -Bernabé McAlyster Todo es parte de una profecía.