Relatos De Un Asexuado

Luego de la primera vez

Cuando despertamos, nos miramos con cara de cómplices, pero nunca se hablo el tema... Habíamos perdido la virginidad y la castidad, juntos y muy chicos.

Nos levantamos muy temprano y el primero en bañarse fui yo. Tenía más que claro que él iba a estar en la pieza cuando yo subiera a vestirme, dicho y echo, cuando subí a vestirme, él todavía estaba acostado. Yo con ganas de probocarlo, como siempre, me quito la toalla que tenía amarrada a la cintura, frente a él (en ese momento, que pudor podía quedar entre nosotros, PENSÉ), por un momento me quedo mirando completo y me dijo riendo: -Vístete luego por favor-. Mientras yo me terminaba de vestir, él bajo a bañarse.

Obviamente esperé sobre la cama que él llegará a vestirse, cuando llegó vi algo increíble, en realidad dos cosas increíbles, primero que su pene era más chico que de lo que me lo imaginaba jajajajajaja (sólo lo había tocado y visto de noche) y segundo, a él le daba vergüenza que yo lo viera desnudo, porque lo primero que hizo, fue taparse.

Me produjo mucha risa la inconsecuencia de taparse después de todo lo que había pasado.

En eso yo me siento en la cama (la pieza era extremadamente chica, a tal punto que sólo caía una persona parada al lado de la cama), y le tiró la toalla, lo empujó a la cama y lo comienzó a tocar y a pasar la lengua por todo su cuerpo desnudo.

Después de un rato en ese juego, me paro y me voy para abajo.

Luego de unos minutos nos fuimos a tomar el bus para irnos a la playa.