CAPITULO 3

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Estaba dormida en la sala de la mansión, me quede toda la noche esperando a Austin pero nunca llegó y me vi dominada por el sueño.

Me levante debido a la sensación de hambre que sentía en mi estomago. Fui caminando hasta la cocina y al pasar enfrente de un espejo colgado en el pasillo note que no traía el vestido negro de anoche, estaba en pijama y no recuerdo haberme cambiado, pero bueno, de seguro fueron Michelle y las demás empleadas de la casa.

Estaba por servirme un vaso de jugó de naranja cuando escuche el sonido de camionetas acercándose a gran velocidad a la casa, me asuste, así que saque de uno de los muebles de la casa una de las pistolas que tenemos ocultas por seguridad, defensa y esas cosas, después me encamine a paso lento hasta la puerta de la cocina, así podría ver quien entraba por la puerta principal y de ser necesario tendría un buen punto de vista para disparar en cualquier momento.

-¡Ian! ¡Mike!- escuche una voz familiar llamar desde afuera - ¡maldita sea, necesitamos ayuda!

De inmediato reconocí su voz. Era el, no podría ser alguien más. Guarde la pistola en mi pantalón de pijama y corrí a abrazarlo.

-¡ooh por dios estas bien!- dije envolviendo mis brazos en su cuello- ¿que fue lo que paso?

-hubo un problema, ahorita te cuento, ¿donde están Ian y Mike?-

- aquí estamos señor ¿que se le ofrece?- dijo Ian con respeto y formalidad

-necesitó que vayan por Beltran, en unos minutos llegara la otra camioneta restante, en ella traen a Robert y necesita atención médica- dijo Austin en un tono muy molesto- No se demoren lo necesito aquí pero ya, así que andando ¡vayan!-

Ambos salieron corriendo y se subieron a una de las camionetas para ir a buscar al doctor Beltran, uno de los doctores que trabaja fielmente para algunos de los narcos con mayor prestigio. Recibe muy buena paga por su trabajo por lo cuál a sabido mantenerse cayado, bueno aunque puede que también sea porque sabe que mas le vale no delatar a ninguno de los nuestros si es que quiere seguir con vida.

-¿qué fue lo que paso?- exigí esperando tener una buena respuesta.

-esos hijos de . . . ¡aaaaah!- grito Austin para liberar un poco de su ira- se metieron a la mansión Buscándonos a Alex, Zach y a mi, creyeron que podrían acabar con nosotros pero se equivocaron. Empezaron a disparar y de pronto un montón de la seguridad de Zach logro acabar con su mayoría, fue entonces cuando salimos nosotros y encontramos al que estaba a cargo de todo eso, lo obligamos a que dijera toda la verdad y descubrimos que ellos tenían a Robert secuestrado, fuimos a rescatarlo y todo eso- dijo lo último cortante y supe que no queria alargarse en detalles

-¡o por dios!- dije tapando mi boca con mis manos- ¿como esta Robert?

-esta herido pero bien dentro de lo que cabe, Zach y Alex lo traerán para acá en unos momentos para que sea atendido por Beltran-

-de acuerdo, pero, ¿porque no me llamaste?- dije un poco molesta alejándome de su abrazo- ¡Pase toda la noche como una loca histérica estaba demasiado preocupada, creí que te había pasado algo!-

-Tranquila mi amor, estoy bien es solo que se me perdió el celular en todo este alboroto- dijo volviendo a poner su brazo alrededor de mis hombros

-¿tenias información importante en ese celular?- pregunte alarmada

-no mucha. Tu tranquila bebe, de todas formas ya lo jaquearon unos de los guardias y pasaron toda la información a mi computadora así que no hay nada que temer-

-okey mi amor, esta bien- le di a Austin un buen beso después de todo, no lo había hecho desde que llego- espero y lleguen pronto para que atiendan a Rob.

DESTINYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora