Mi Loba Interior

Capitulo 15

Chicos/ as e estado leyendo un par de libros e sacado cosas de ellos así que sí ven algo que es de otro libro es que decidí usarlo.

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Jason:

Mi mente no podía concentrarse en los obstáculos que se me atravesaban en el bosque, en cada momento me golpeaba con alguna rama o tronco que hubiese tirado en el piso, pero como concentrarme si no podía sacar el enojo que había en mi corazón, el que mi padre había ocasionado.

Pare en un lago que había cerca para poder tomar algo de agua e intentar despejar un poco mi mente.

Estaba ya al frente del río y pegue mi osico y empece a tomar como un perro, lo que en verdad parecía ser que todos me odiaban ese día, me ordenaban, pegaban y más cosas...

lo único que sí sabía es que Patricia de seguro me extrañaría- seguí tomando de la fuente hasta que escuche un ruido cerca de donde estaba.

Me moví sigilosamente para no hacer mucho ruido entonces mire que del otro lado había un lobo tirado en la fría tierra cerca del agua del lago, lo mire desde mi mismo sitio y tenía algo familiar... no se era como sí su aroma me fuera familiar, decidí acercarme sin perder mi delicada cautela.

Cuando estuve a pocos centímetros del lobo pude olfatear el aroma y darme cuenta que ese olor lo conocía, era un olor que reconocería en cualquier lugar, era... era Patricia, al fin había logrado transformarse.

La luna se desvaneció en las nubes y volvía mi forma humana igual que Patricia, había olvidado lo frío que podía ser para ella estar en el bosque y mas, si no tenía nada de ropa.

Pensé rápido y la cargue en mis brazos tapándola con una manta que tenía guardada la lleve a la casa de mi amigo James.

James era mi mejor amigo desde la infancia no había nadie mejor que el y de seguro me ayudaría con todo esto.

Llegamos a la casa de James y toque la puerta- ¡James! ¡Abre por favor, necesito su ayuda!- gritaba desde el jardín de su casa, vivía adentrado en el bosque.

Alguien abrió la puerta- Que hay hombre, cuanto tiempo?¿Quien es ella y que hace en tus brazos?- me decía sin entender la situación.

No hay tiempo para explicar, le dejas pasar?- le mencione en voz baja ya que Patricia estaba inconsciente.

- Claro, pasa.

-Gracias, la dejare en el cuarto de huéspedes- dije entrando al pasillo de la casa de James.

La deposite en la cama del cuarto para que descansara un poco después de que al parecer había corrido kilómetros. Me pare de su cama, me puse algo de ropa de Jason y volví a cuidar de Patricia.

Hubo un momento donde me senté en la cama y me que de a admirar su belleza exterior, ver como mientras se enrollaba con las sábanas se iba notando sus hermosas curvas de pie a cabeza, deje de admirarla para que pudiera descansar en paz, escuche una voz muy dulce y cautelosa así, que me di la vuelta y me fije que ella estaba despierta....

-Por favor, quédate no me dejes... sola- me pedía sujetando mi ante-brazo.

- Si eso te hace feliz.

Me senté en el espaldar de la cama para poder recostar me sin molestar a Patricia que se encontraba casi dormida.

Patricia se recostó en una de mis piernas, no podía dejar de ver la así, acostada al lado mío solo me daban ganas de plantarle un beso en esos jugosos y apetitosos labios tan hermosos.

Te amo, gracias por siempre... siempre...- estaba balbuceando Patricia.

- Que? ¿Qué cosa?... Di lo, ¡di lo!- le susurraba en el oído para que lo dijera inconscientemente.

- Te amo- salía esa simple, pero muy importante frase de sus labios, que al llegar a mis oídos hicieron que me alegrara por dentro.

Me acerque a ella y le plante un beso en la mejilla cuando se había que dado totalmente dormida- Yo también te amo.

Me pare de la cama sin hacer el más mínimo ruido, salí del cuarto y serré la puerta.

Di saltos de felicidad en mi interior aunque por fuera me quedaba inmóvil como sí me hubiese quedado en shock...