Aveces la vida no tiene un final feliz. Aveces las relaciones no tienen un "felices para siempre". Aveces lo único que importa es el viaje y no el final. El contenido del libro y no su trágico y amargo fin.
Es increíble como la vida es una cosa en un momento y otra al siguiente. Es casi como una comedia trágica.
Se preguntaran como termine aquí abajo.
Bueno... fue mi decisión.
Aveces solo necesitamos una solución, un punto, un final.
Por triste y depresivo que sea, aveces solo necesitamos que algo concluya.
Y allí es cuando viene la parte divertida, recordar por que empezó esa historia. Recordar que le dio un principio a un final tan amargo e indiscreto.
Y si uno se da cuenta, todo empieza con una decisión.
La decisión de amar, de confiar, de odiar, de divagar, de perderse o encontrarse.
La decisión de creer que lo que estamos a punto de hacer tendrá alguna especie de desarrollo y desenlace.
La decisión de apostar otra vez al universo y decir "una vez mas".
Por que aveces, todo lo que se necesita, es un nuevo principio.
El mio... es algo rutinario y triste, pero hay cierta esperanza en estar muerto: no puede ser peor que esto.
Yo ya no puedo apostar.
Mi esperanza, ya no es mía.
Pero la tuya, quien quiera que seas, aun tiene decisiones que tomar e historias que terminar.
Por que aveces, hace falta un mal final para un buen comienzo.
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Filosofía de un habitante del Inframundo
De TodoEl punto de vista de los muertos debe ser escuchado...