Parte 6: El espectáculo

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Jamie volvió en sí muy despacio. Una sensación claustrofóbica atormentaba desde hacía un par de horas su letargo desprovisto de sueños. Su mente trató de iniciarse como siempre, cargándose como si fuera un ordenador, pero algo estaba bloqueando las progresiones mentales. Tenía la boca horriblemente seca y el regusto impreciso de un producto químico.

Además, había otra cosa que no


encajaba; parecía despierto, pero lo veía todo negro. Se tocó cautelosamente alrededor del ojo con el dedo; estaba abierto. Cuando movió la mano escuchó un rumor como de tela. Durante un traumático instante se vio arrojado a una regresión: había acampado junto al lago con su familia cuando despertó de una pesadilla en la que había una serpiente dentro de la tienda, solo para descubrir que realmente había una serpiente arbórea verde arrastrándose sobre sus pies. Presa de un débil ataque de pánico, agitó los brazos y gimió.

Oyó el sonido de pasos junto a su cabeza. A continuación hubo un


atronador desgarramiento a escasa distancia de su rostro. De pronto la luz inundó aquel espacio reducido y tenebroso, refulgiendo dolorosamente ante sus ojos, y Jamie vio justo encima de él a la última persona que esperaba encontrar: Steve.

—¿Jamie?

—¿Eh? —fue lo único que este consiguió responder.

—¿Tú también estás aquí? —dijo Steve—. Me había parecido ver que algo se estaba moviendo ahí dentro. Tío, tienes que venir a ver esto. Es una feria o algo así. Levanta. ¡Venga!

Jamie se incorporó y miró fijamente


la bolsa de cadáveres en la que había dormido, sin comprender nada. La tela negra estaba abierta como un capullo rasgado. Parpadeó; aquello no tenía lógica. Se restregó el rabillo de los ojos para despabilarse y procuró acordarse de lo que había sucedido antes de que se quedara dormido. Acostarse en una bolsa de cadáveres no estaba en aquella lista.

—¿Qué demonios estás haciendo ahí? —preguntó Steve, como si Jamie pudiera contestarle—. Ah, aquí está. — Steve recogió su chaqueta del suelo—. Tienes suerte de que te haya encontrado, solo había venido a coger esto. Vamos.


Tienes que ver esto.

Demasiada información, demasiado pronto. Anoche..., pensó. Me acosté en el suelo. ¿Antes de eso...?Policías. El calabozo. Sí... Me pillaron corriendo desnudo... Y después ¿qué?

Miró a su alrededor. Se encontraban dentro de algo que parecía un toldo de gran altura. El suelo era de hierba pisoteada y aplastada por grandes pisadas de zapatos deformes. En el rincón había una mesa con naipes y botellas vacías desperdigadas encima. En el suelo había docenas de cajas llenas de baratijas y trapos de colores. Había una armadura tumbada sobre el

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⏰ Última actualización: Dec 15, 2015 ⏰

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EL CIRCO DE LA FAMILIA PILO [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora