-Nina ya es hora, levántate para ir al instituto- la llamo su padre, Robert, con el que ahora vivía
- no quiero, ¿puedo no ir?- se giró y agarro las cobijas y se cubrió hasta la cabeza
-no, vas y punto- sentencio y salió de la habitación cerrando la puerta fuerte, para ver si así se levantaba su hija
Se levantó forzadamente a darse un baño, la verdad no tenía muchas ganas de ir. Un colegio nuevo, ricachones, uniforme, niñitos de papi, ese no es su estilo y aunque su papa tenga dinero no ella no es así.
Bajo a desayunar pero como estaba sin ánimos solo tomo una manzana para comérsela luego.
-vamos te llevare a tu primer día- agarro las llaves del auto
-¿Robert?- lo volteo a ver desviando su vista de la ventana
-¿sí?- respondió con otra pregunta sin quitar los ojos del camino
-¿Por qué me inscribiste en un colegio de niños mimados?-
-si te refieres a un colegio de prestigios, es porque quiero que tengas un buen futuro y te relaciones con gente de bien- la miro por un momento y siguió con la vista en el camino
-¿gente de bien o gente con plata?- seguía cuestionándole
-gente de bien, como sea ya llegamos. Ve donde la recepcionista ella te dará la información y tus libros, adiós-
-adiós- abrió la puerta y salió
-¡Nina!- la llamo su padre
-¿sí?- se volteo a mirarlo con la esperanza de que le diría que estaba bien que no asista al instituto
-ten un buen un día, suerte- le regalo una de sus más sinceras sonrisas para darle su apoyo
-gracias, la necesitare- el auto arranco y entro a ese gran instituto, tenía que vivir en Londres el edificio tenía esa típica apariencia de castillo de la época medieval y los alumnos perfectamente bien uniformados, caminando por esos grandes pasillos se chocó con un gran hombre.
-señorita debería estar en su salón la campana esta por tocar- le hablo una voz ronca
-es que soy nueva y no sé dónde queda mi salón-
-muy bien, venga-
Nina pov:
Me dirigió donde la recepcionista, la cual me dio mis libros y mi horario de clases junto con el número de mi casillero, guarde mis libros y vi mi próxima clase.
Toque la puerta del salón y un profesor me abrió la puerta.
-¿es la señorita Jones?- pregunto el hombre de una edad de 35 años con el cabello oscuro pantalones de vestir una camisa crema y un saco color café que hacia juego todo perfectamente
-sí, siento la tardanza fui por mi horario-
-ok, pase y siéntese la clase ya empezó. Ah espere, clase ella es la señorita Jones es nueva háganla sentir como en casa, ya puede ir a sentarse.
-gracias-
-hola soy Zayn- me desconcentro una voz
-hola- no le di importancia y seguí prestando atención a la clase
-me prestas una sacapuntas-
-no tengo- dije tomando notas de lo que hablaba el profesor de literatura, esta había sido la primera clase de literatura que no me parecía aburrida y una completa perdida de mi tiempo, esta estaba interesante
-¿y tienes otro lápiz?- al mío se le quebró la punta
-noup, pero tengo un bolígrafo- se lo di, sin mirarlo
*toco la campana*
-¿cuál dijiste que era tu nombre?-
-no te dije- revise el papel para ver mi siguiente clase
-me lo puedes decir-
-Nina ¿feliz?-
-sí, ¿ocurre algo? estas un poco cortante conmigo y no te conviene comportarte así siendo nueva- dijo con una sonrisa petulante
-¿Por qué no?- lo desafié
-porque así no conseguirás amigos-
-quien dice que yo quiero tener amigos-
-pues todos quieren por alguna razón y pues como eres nueva solo soy amable-
-de acuerdo, lo siento. Soy Nina Jones y como podrás haber notado soy nueva-
-Latina, ¿de dónde eres?-
-¿Cómo lo sabes?-
-tu acento te delata- rio y salimos a los lockers
-de Ecuador y supongo que tú eres de aquí- sonreí
-si ¿Cómo lo sabes? ¿eres adivina, acaso?- bromeó
-tu acento te delata- dije imitándolo a lo que el rió
-¿Qué clase te toca ahora?-
-biología-
-a mi igual, ¿vamos?- cerré el locker y lo seguí
