¡Lo odio!, ¡Lo odio!, ¡Lo odio!, no, no es otro fan fic en donde el chico se enamora de su mejor amigo o del chico popular y estos quedan felices para siempre, no señor, esta es mi vida y supongo que no terminara así aunque aquí entre nosotros espero que termine de esa forma. Empezare desde el principio para no hacerlos tanta bola.
Primero lo primero, mi nombre es Matías tengo 15 años, soy delgado y piel algo tostada, mis ojos son café claro, tengo labios algo delgados pero no tanto, mi cabello es castaño claro y me llega hasta el cuello. Soy tímido con las personas que acabo de conocer, soy muy celoso y un poco infantil, cuando me agrada una persona y siento una especie de conexión me muestro como en realidad soy, extrovertido, juguetón y sobretodo me encanta reír. Tengo dos mejores amigos, una es una chica y su nombre es Alicia y el otro es un chico y se llama Damián. A la edad de los 12 años me di cuenta que era homosexual ¿Cómo? Fácil, no me gustaban las chicas en absoluto y me atraía mi mejor amigo.
Damián es mi mejor amigo y es un chico sociable, bromista y le encanta molestarme, lo declaró como uno de sus pasatiempos favoritos, tiene piel pálida y ojos color azul oscuro, su cabello es negro y lo tiene del mismo tamaño que el mío, sus labios son delgados pero tentadores y tiene un cuerpo que ¡woah! Te dan ganas de ir al gimnasio solo para verlo a él, es delgado pero definido y tiene unos brazos que... ¡Ah! Se me hace agua la boca de tan solo pensarlo, es más alto que yo, 20 cm para ser exactos. No es homosexual o eso es lo que me ha dicho él y aquí esta el problema, está enamorado de mi mejor amiga...Alicia.
Alicia es la típica chica perfecta, delgada, piel blanca, ojos cafés, labios gruesos, proporcionada en los lugares adecuados y una sonrisa que hace que te derritas, su cabello es castaño, largo y rizado.
Ahora pasemos a lo importante, estoy acostado en mi cama con los ojos rojos de tanto llanto y es que no puedo creerlo...mi mejor amigo me acaba de confesar que esta enamorado de mi mejor amiga, de tan solo pensarlo hace que sienta una punzada en mi corazón y tenga un nudo en mi garganta.
+++++Flash Back+++++
Estaba sentado copiando una clase ya que el día de ayer había faltado por una gripa que me dio, mi mejor amiga tomo asiento delante de mí y giro su cuerpo para verme escribiendo, al principio no me molestaba pero sus penetrantes ojos hicieron que la mirara y le dedique una de mis tan famosas sonrisas y por supuesto ella me la respondió. Al poco tiempo habían tocado el timbre para salir a receso deje mis cuadernos sobre mi escritorio y busque con la mirada a mi mejor amigo cuando de repente vi que todo se nublaba ante mí y es que mi amiga me había cubierto mis ojos con sus manos, las quite reconociendo al instante su tacto y luego le sonreí.
-Jajaja Alicia te reconocería de aquí a 100 km.-
-Jajaja Mati que cruel eres y yo que pensaba que pasaba inadvertida por los chicos.- me sonrió de una forma dulce y de repente vi que miraba atrás de mí, mi rostro cambio a uno de duda y sentí que alguien me levantaba del suelo por inercia trate de zafarme de ese agarre cuando de repente conocí esas manos, las manos por las cuales me he vuelto loco.
-¡Damián! -grité con todas mis fuerzas para que me bajara, él sabía muy bien que me daban pánico las alturas. - ¡Bájame! - me removía entre sus brazos tratando de zafarme y a todo esto mi amiga Alicia se estaba carcajeando de ver nuestra escenita montada, me sonrojé debido a la vergüenza y luego sentí como me bajaba de sus fuertes brazos, me voltee y lo miro con el ceño fruncido -Idiota.-
El me miro con una de sus sonrisas seductoras y yo pase de largo tratando de ocultar que me derretía por completo, pude ver cuando pasaba a la par suya que su rostro estaba dudoso y luego escuche que mi mejor amiga grito mi nombre, me voltee y ella me tiro un beso, yo le respondí tirándole otro y guiñándole un ojo y luego comencé a correr hacia el cafetín ya que moría de hambre.
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[Homosexual] Te amo en silencio
HumorEste libro va dirigido a todas esas personas que tienen un amor prohibido, un amor que no hace más que lastimarlos pero que, aún siguen, con esa esperanza de que ese amor tan fuerte les sea correspondido. Para aquellos soñadores que creen aún en la...