Capítulo 2

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-Matías POV-

Estoy viendo todo en cámara lenta como si fuera una película de esas a las cuales puedes poner las escenas en forma lenta para apreciarlas mejor, cerré mis ojos fuertes como si cuando los abriera habría despertado de ese sueño y es que era un completo extraño para mí. Escuché una voz a lo lejos, abrí mis ojos y al parecer era la madre de alguien...

-Ya deja tu novio, mi amor, nos tenemos que ir. Es tarde.- Al parecer le hablaba a la chica que vi unos momentos antes con su pareja, eh señora, ¿qué hace?, se dirige hacia acá, no, no, no puede ser... ¿acaso es madre de......Marcos?

-Lo siento madre- soltó el agarre en mi rostro y se acerco hasta mí para susurrarme lento pero fuerte -Nos vemos otro día Mati.- ¿Mati?, me sonrojé sin querer, ¿qué me está pasando? El solo pudo soltar una carcajada ante mi reacción y se dio media vuelta para irse con su madre.

Suspire y es que habían pasado tantas cosas ese día, primero Damián y ahora él. Camine hacia el árbol en el cual estaba ahora y vi a Damián, estaba... ¿molesto? Me acerque a el ya que mi aspecto se veía mucho mejor que el de hace unos minutos antes y aunque no me haya visto al espejo, me siento mejor.

-¿Qué haces aquí?- Le sonreí cuando estuve enfrente de él.

-¿Qué hago aquí?, ¿¡TU que haces aquí?, dime ¿tienes la idea de la hora que es?, ¿quieres que te pase algo? Tu madre está preocupada por ti y tu aquí haciendo nuevos amiguitos, Caray Matías ¿acaso no piensas en las consecuencias de tus actos?- su tono de voz era molesto, no entiendo que le sucede, bueno, tal vez sí, me excedí al salirme sin permiso pero mi madre sabe que siempre regreso a casa-

-Woah...tranquilízate Damián, solo fui a caminar un poco, no te exaltes, Damián estoy bien ¿o no?- le sonreí tratando de que se calmara.

No dijo nada, solo se dio media vuelta y comenzó a caminar en dirección a mi casa, eso era la señal de que debía de seguirlo. Me incorpore hasta caminar a la par suya y pasamos casi todo el camino en silencio hasta que sin haberlo previsto antes, menciono en tono molesto:

-¿Quién era él?- me detuve y es que no entendía a qué venía la pregunta sobre Marcos. Se percato que no caminaba a la par suya por lo que se dio media vuelta, por una fracción de segundo pude ver en sus ojos algo parecido a ¿tristeza?, pero eso es imposible aunque ahora su mirada refleja molestia, para no hacerlo enfadar más, respondí:

-Un amigo... ¿por qué?- su ceño se frunció y cruzo sus brazos.

-¿Sólo eso?- no entiendo por qué tanta la insistencia, tengo muchos amigos y nunca Damián me interrogaba tanto por ellos.

-¿te sucede algo, Damián?- desvió su mirada aún con el ceño fruncido.

-Nada. No me pasa absolutamente nada y apresúrate que tu madre debe de estar preocupada- se giro y recomenzó su caminata hacia mi casa, lo seguí un poco cabizbajo ya que Damián estaba molesto conmigo y no sabía el porqué.

Durante todo el camino nos quedamos en silencio. Al llegar a mi casa mi madre estaba afuera, esperándonos. Suspire ya que me iba encontrar en problemas por haberme salido de casa sin pedir permiso. Se veía enojada y preocupada a la vez, no quería hacerle eso pero mi corazón se podía quebrar si veía a Damián en ese estado así que decidí hablar pero fui interrumpido por Damián:

-Estaba en casa de Alicia y el muy tonto no me había avisado, disculpe haberla preocupado- No puedo creerlo, Damián había mentido por mí, engaño a mi madre por mí, eso sin querer me hace sentir feliz y alegre pero todo tiene que caer ya que cuando mi madre asintió, él me dirigió una mirada fugaz cargada de molestia, trate de ver otra cosa que no fuera él, no quería hacerme falsas ilusiones.

[Homosexual] Te amo en silencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora