Vecinos

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Jesse y Linsday dormían como marmotas en un colchón inflable que estaba justo al lado de mi cama, en el suelo.

Por mi parte, me habia despertado hace unos minutos.

Miré la hora en mi Iphone. 10:27.

Con sigilo salí de la habitación, directo al baño.

Ahí cepille mis dientes e hice mis necesidades.

Intenté domar mi pelo lo mejor que pude, habia heredado el pelo de mi mamá. Era largo, de color chocolate muy claro, casi rubio. Que caía lacio hasta la mitad, y finalizaba en unos bucles naturales. Literalmente, amaba a mi cabello.

Me dirigi a la cocina, hoy me apetecía Cappuccino. Y, como toda gorda de alma, hice caso a mis antojos y preparé una taza.

Con ayuda de un banquito, bajé una lata de galletas de la alacena. Y al bajar, pise mal y caí estrepitosamente sobre mi trasero-¿ En serio, otra vez?- alertando a mis amigas, que salieron a trompicones de la habitación y al verme en el suelo explotaron a carcajadas.

Por suerte, mis adoradas galletas se habian salvado, y me observaban sensualmente desde el frasco, ya casi podia oir que me decian "Comenos, no importa que tu trasero este rojo y te acabes de caer como una idiota al suelo, solo comenos."

-Mierda, esta si es una buena mañana,- dijo Jesse entre risas- Ya, ya, juro que parare de reirme.

-Debes estar acostumbrada a caerte de culo, pronto rebotarás.- añadió Linsday.

-Ja, ja, que buenas amigas- Sarcasmo, gracias por aparecer aun cuando estoy en el piso de la cocina, con un tarro de galletas en las manos, despues de haberme roto la retaguardia con el suelo.

Deje a mi adorado frasco de galletas en el suelo y me levanté.- Dejen de mirarme como idiotas y vallan a asearse, quieren?

-Si señora- respondieron en unisono y giraron sobre su eje para ir al baño, tal como les dije.

Despues de haber tomado mi Cappuccino y haberme comido unas tres o cuatro galletas,- mentira, me habre comido unas diez pero no importa- sentí ruidos en el pasillo.

Algo asi como voces, "cuidado con el sillón!" "Tenemos que dejar esto limpio para el mediodía!".

Sali de mi departamento al pasillo. Ni siquiera me moleste en quitarme mi improvisado pijama.- una remera vieja, que decia "Kiss me" y dejaba mi ombligo al aire. Y un mini short morado- Vi a unos hombres sacando los muebles, de lo poco que quedaba del departamento de la Sra Murffy.

¿Se mudaba?

-Hola, Haley!- dijo Kendra, la nieta de la Sra Murffy.

-Hey, que pasa aqui? Porque sacan todo?- pregunté.

Ella sonrio hacia mi- Oh, la abuela se va a vivir con mis padres, ya esta vieja y no la podemos cuidar si esta aqui.

Asentí tristemente, hecharia de menos a esa ancianita.

-Este depa quedara deshabitado en unos treinta minutos, -continuó- aunque creo que ya tienen cupo para el.

¿nuevos vecinos?

-Oh, si, seguro, esta en una muy buena zona de la ciudad.- dije yo.- Gracias Kendra, mandale saludos a tu abuela de mi parte.

-Nuevos vecinos?- pregunto la rubia cuando se lo conte a ambas.

-Si tienes vecinos candentes no dudes en que me mudare contigo.- añadio Jesse

-Ajá, no lo creo, seguro sera otra ancianita o una familia de adinerados.- dije

Let's fall in love againDonde viven las historias. Descúbrelo ahora