Esperando por ti.

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Los personajes le pertenecen a Stephanie Meyer, la historia y los nuevos personajes, son míos.

JACOB POV

Me desperté sin ganas al ver entrar a una enfermera a dar el último chequeo de la tarde a mi padre, pasábamos la mayoría del tiempo en el hospital de Forks debido a la grave enfermedad cardiaca de mi padre, raras veces pasábamos largos periodos de tiempo en la reserva y ya había perdido la cuenta de hace cuanto era esto.
Recuerdo muy bien cómo es que pasó todo.

Me encontraba con los Cullens en la isla Esme, después de dos años a partir del encuentro con los chupasangres italianos se decidieron mudar a la isla y yo no podía vivir en un lugar en el que no estuviera mi pequeño monstruito así que decidí irme con ellos.

Un día al hacer una de mis llamadas rutinarias para ver como se encontraba todo, me contestó Embry muy nervioso y con la voz cortada, fue cuando me dijo que mi padre llevaba días en el hospital y que él no quería decírmelo porque temía que yo me quisiera regresar y el sabía que con esa decisión sería infeliz. Yo por mi parte hice lo que el temía, me regresé a Forks con todo el dolor de mi alma, dejando mi vida ahí, con Rennesme.

Ahora el único contacto que tengo con los Cullen es por medio de correo electrónico y por una que otra llamada. Lo que me tiene en éste estado casi catatónico, aparte del hecho de que mi padre está muriendo, es el estar distanciado del producto de mi imprimación, el amor de mi existencia, mi pequeño monstruito, Rennesme.

Sé que pude haberme quedado con ellos en la Isla Esme, pero pensar que dejaría a mi padre morir solo, era algo egoísta. Al fin de cuentas si no fuera por él yo no existiría y eso obviamente me habría impedido conocer a Rennesme y a los Cullen, sin él yo sería nada.

Cuando me fui de la isla, Rennesme tenía la apariencia de 13 años a sus 5 años, por lo que sabemos del caso de Nahuel, Nessie a sus 7 años tendrá la apariencia de 18 años que sería la apariencia en la que se congelaría. Inmortal a sus 7 años con la apariencia de 18. Ahora ya tenia 11 años y tenia la apariencia de 18, la apariencia permanente desde hace 4 años.

En este momento mi padre está progresando, de forma pausada, pero lo está haciendo. Carlisle había regresado a Forks unas cuantas veces para ayudar de forma clandestina a Billy y gracias a eso él pudo hacer grandes mejorías a su estado y en éste momento está saliendo adelante y en pocos días le darán de alta, le estoy completamente agradecido a Carlisle ya que ha logrado salvar a muchas personas a las que amo en mi vida.

Todos nos estaban apoyando en este momento, en la manada al que dejaba a cargo era a Quill y a Embry a pesar de ser unos completos estúpidos, Charlie y Sue cada que podían venían a visitarnos y nos traían comida a montones con un Matth de 8 años. Me sentía muy agradecido ya que todos nos apoyaban y mi hermana Rebecca en el momento en que mi padre enfermó se mudó a la Push y Paul se convirtió en un hermano más para mí, imprimándose en ella.
La enfermera salió de la habitación y mi padre seguía dormido sin ninguna preocupación, más que recuperarse.

Estos últimos días había estado inquieto porque hace 10 años fue el ataque de los chupasangre italianos y me ponía de los nervios recordarlos queriendo hacerle daño a Nessie, el simple hecho de pensar que pudieron quitárnosla y que ahora sería una posible Vulturi, con ojos rojos y con esas capas negras...

Ni siquiera me di cuenta que había empezado a temblar y tenía los puños cerrados.

— ¿Jacob? – me volteé a ver a mi padre, que al parecer ya estaba despierto.
— Hola – lo saludé con una sonrisa, tratando de lucir lo más natural posible.  — ¿cómo te sientes?
— Muy bien, la pregunta aquí es para ti, ¿tú estás bien? – me acerqué a él para sostener la mano que me estaba estirando.

Después del AmanecerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora