Imposible, la palabra que es posible...

Silencio

Estaba con Luis, abrazados como siempre esta noche seria la peor del universo no solo para mi, si no para el.

-Luis te tengo que decir algo.

-Si mi amor, puedes decirme lo que sea.
Su cara de ilusión me hizo sentir culpable de lo que en realidad le tendría que decir, esto era duro me mordi el labio y me dijo:

-Dime mi vida no te are daño —puso su cara de preocupación— no me digas —agacho la cabeza— ¿quieres terminar con esto? .
Yo no le quería hacer daño, el avía adivinado.

-¡No! ¿Porque lo dices? —forzosamente sonreí— .

-Lo dices muy seriamente.

-No jamas —le di un beso en la mejilla—

-¿Entonces? —comenzó a reír—

-Tienes que presentarte con mis papas.
Por un momento se puso serio y pensativo, después de eso me contesto:

-Adelante, ya tienen que saberlo, amor tenemos ya 3 meses juntos. —me beso la frente— ¡Vamos!.
Entonces, pensé —wuau si, han pasado 3 meses desde que bese a Emiliano—; abrí la puerta de la casa mi padre estaba leyendo el periódico y mi madre el libro de "Donde habitan los Angeles", Luis tomándome de la mano paso y mis padres al mismo tiempo levantaron la cabeza.

-¿Quien es este chico cariño?

-Señor, señora soy el novio de su hija desde hace 3 meses, no se lo queríamos decir porque bueno, ¡ja! Los padres de ahora que ya no dejan que sus hijas tengan novio ¿verdad? ¡Mmm!... Creo que me presente muy mal —yo solo me puse el gorrito de mi chamarra blanca que traía puesta, tenia mucha pena, no sabia que decir—.

-Tu nombre niño —mi papá lo dijo con un tono enojado—

-Luis Berumen, a su servicio.

-Aver, entonces vas a andar con mi hija, que vengas y me lo digas es un buen paso.

-¡Ho! Claro señor aquí viene la pregunta... ¿Me deja andar con su hija? —se arrodillo—

-Claro que si, ahora déjenme leer.
Guardamos silencio esto era extraño nunca antes mi padre había aceptado a un hombre para que fuera mi novio.

-Okey mi niña, ya me boy, ¿lo hice bien?.

-Mas que bien.

-Adiós.

-Adiós.
Nos despedimos de beso, eso fue muy intenso. Pero no dejaba de pensar en la regañada que mi padre me daria.
******
Mi padre me llamo

-¡Sonsa!... —lo dijo en con un tono muy dulce—

-¿Mandeme? —puse cara de "no me importa lo que me digas"—

-Oye —hablo con su todo de voz normal y serio— de verdad... porque si tenias novio... ¿nunca me dijiste? —me dio su cara de confusión—

-Papá —rodó una lagrima sobre mi cachete izquierdo, empece a llorar—
Abrace a mi papá con todas mis fuerzas y el me dijo:

-Si esto lo haces para que no te regañe, no funcionara. Me tendrás que dar tu celular por una semana ¿si? Pero no llores, no te pegare.

-¡NO ES ESO!, LO QUIERO TANTO...

-¿Hablas de Luis? —mi papá se estaba riendo pero luego di gemidos de sentimiento y fue cuando me abrazo, fue cuando supo que hablaba enserio— ¡no hija! Se de quien hablas, el te amaba no es necesario lamentarte, tenias que hacerlo, tú amabas a Luis ¡he dicho! LO AMABAS tu quiere a Gómez ¿verdad?...

Asentí, no podía ser más directa que aquel día. ¡Amo demasiado a mi papá! El me entiende, el me ama, el es como yo, yo soy como el, así de fácil.

-Pero guarda silencio shu... —me puso su dedo indice en mi boca— no queremos que tu madre se de cuenta ¿cierto?

-Claro que no

-Esta bien, ve a dormir.

Mi mamá odiaba a los vecinos, si se enteraba nos mataba a los dos, a mi padre y a mi pero algún día se tendría que dar cuenta, yo sabia que lo amaba no podía dejarlo ir.