Corazon de melon- UNA VIDA "PERFECTA"

EN CLASE...

De nuevo lo mismo:
Veía a una familia, riendo y conversando; pero justo cuando intento acercarme todo empieza a desmoronarse y por más que intentó alcanzarlos no puedo; lo raro es que no se quienes son esas personas o porque siempre sueño son ellos, es como si no pudiera sacarmelos de la cabeza, como si los hubiera visto en alguna parte, pero no logro recordar.
Al final termino despertando, con la respiración agitada y con sudor frío, pareciera que tuve una pesadilla, pero era lo que siempre soñaba.
Me levanté de la cama y vi mi mano, aun se veía mal, incluso con la venda, en la noche empezó a sangrar otra vez y terminó por dejar una mancha en mis sábanas, me quite el vendaje y me fui a bañar, aun faltaba un rato para que comenzará el instituto.
Me tomé mi tiempo para darme un baño, entré a la tina y me quedé un rato dentro, salí, me seque todo el cuerpo y me enrolle en una toalla para salir a mi cuarto por mi ropa.
Escogí unos jeans negros y una blusa gris, me puse unas zapatillas que hacían juego y me puse una vendas nuevas y puse en la ropa sucia las otras, me cepille el cabello y me puse un poco de mi perfume favorito, comencé a quitar las cobijas de mi cama para poner unas nuevas y me dispuse a tomar el desayuno, como siempre, yo sola. Las clases empezaban a las 8 y apenas eran las 6:45 cuando salí de mi casa, cerré la puerta con llave y después las guarde en mi mochila. Cuando iba a cruzar la calle para dirigirme al parque escuche que alguien dijo mi nombre.

??? : Como estas querida, ¿te la pasaste bien ayer en tu primer día de clases?

Cuando regresé la mirada para ver quien era, me encontré con mis vecinos, la pareja de ancianos que por lo general está en el parque. Escondí mi mano vendada para que no se preocuparan por mi.

SAM: Pues creo que estuvo bien.

Dije con una sonrisa un poco forzada, mientras recordaba todo lo que había pasado en el día anterior, lo único bueno fue la cena con Ken y sus padres; los señores se acercaban a mí lentamente.
La señora se llama Luz y su esposo Jorge, siempre se les veía felices y siempre estaban juntos, se notaba que disfrutaban su matrimonio, por alguna razón pareciera que fueran mis abuelos, aunque si me pongo a pensar, desde que empecé a vivir en esa casa con mi madre, ellos siempre eran atentos con nosotras y cuando ella murió lo fueron aún más.

LUZ: Entonces tu primer dia fue agradable, me alegra escuchar eso.

JORGE: No todos los días eres la nueva del colegio, ¿segura que te fue bien?

SAM: Pues ayer invite a un amigo a cenar y vinieron sus padres, ya saben que a pasado mucho desde que traigo gente a casa así que, creo que fue un progreso.

JORGE: Pues me alegra escuchar eso, te ves feliz, si necesitas algo ya sabes que puedes pedirlo.

SAM: Si muchas gracias, bueno me tengo que ir a la escuela, al rato regreso.

LUZ: Muy bien, cuando regreses ve a la casa, te invitamos a comer.

JORGE: Y no quiero excusas esta vez de acuerdo.

SAM: C-claro ahí estaré, gracias.

Cuando terminé de hablar con ellos crucé la calle para llegar al parque, aún era temprano, pero después de lo que había pasado el día anterior, prefería no llamar la atención. Crucé el parque lo más tranquila posible, pero en un punto sentía que alguien me estaba viendo y comencé a caminar más rápido. Me sentí más tranquila cuando llegué a la puerta que estaba enfrente del instituto, miré atrás para asegurarme de que nadie me estaba siguiendo, pero logre ver a alguien a lo lejos, era un chico albino, creo que su nombre era Lysandro. Crucé la calle, ya había unos cuantos estudiantes, miré mi reloj ya eran las 7:03 al parecer me entretuve con mis vecinos un poco; cuando llegué muchos de ellos comenzaron a susurrar cosas, realmente no me importaba si era de mi o no, yo sólo pasé entre todos ellos y entré por las puertas. Me dirigí al salón, no tenía nada que hacer, pero cuando iba a entrar, de nuevo alguien abrió la puerta y me golpeó, caí al suelo de sentón otra vez, comencé a sobarme la cabeza y escuche que alguien dijo.