EL TRISQUEL.

Prólogo.

El trisquel representa la eterna evolución a través del conocimiento, la búsqueda del eterno aprendizaje, es por ello que decidí nombrar a este conjunto de escritos de tal manera. Mi intención con todo esto es enseñar y ayudar a otros a fortalecer sus debilidades. Para mí resulta sencillo aprender de cada experiencia, pero sé que para muchas otras personas no.

Siempre he pensado que la esencia de la vida, del por qué vivimos y el para qué vivimos, no es otra que para ser útiles a los demás.

Actualmente el mundo está regido por el pensamiento individualista, las personas solo piensan en sí mismas, compiten por mantenerse en la cima y les da igual pisotear a quien sea para lograr sus objetivos. Esta para mi representa una de las grandes causas que hacen que el planeta sea un lugar horrible para vivir, que nuestra convivencia sea tan mala, que haya tantos crímenes y atrocidades, que vivamos en constante guerra y que el amor se esté convirtiendo en un mito.

La vida no siempre fue así, en algún momento de la historia hubo una sociedad colectiva, donde todos se ayudaban, donde cada uno pensaba en el prójimo, y el amor y la paz reinaban en cada rincón.

Espero que este sea uno de esos libros con los que al final del día te cuestiones, un libro que al terminarse, te deje con ganas de más, con ese sentimiento de incertidumbre, y el "¿Y ahora qué hago con mi vida?" retumbando en la cabeza.

Antes de empezar, quiero dar gracias a todas aquellas personas que al día de hoy he conocido. Reconozco su misión en mi formación, y gracias por llegar en el momento adecuado.

Mamá, te amo, siempre has dicho que nací para cosas grandes, y creo que esto lo demuestra.

                                                                                                                                                                           -Luisa Rey.