Capítulo 6

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- Becca...sígueme hacia tu destino...
Así que seguí la llamada de la mujer. Volví la mirada hacia el túnel. No había nadie excepto la luz que desprendía. Me giré y me sentí asombrosa.
¡Carajo! ¡ Había una mujer sentada apoyada en la pared! Llevaba un precioso vestido azul adornado por unos símbolos. Era muy bella, con un pelo largo y rizado, tan rubia que parecía que su cabeza está adornado por rayos de sol. Sus labios eran pequeños y rosados. Su voz reflejaba el poder que poseía al hablar.

- Masha alhah. Bienvenida, hija. Lo has logrado con éxito.
Hablaba en árabe, aunque no había practicado demasiado mi lengua maternal, comprendía las palabras.

-¿Quién eres? Tú no eres mi abuela- exclamé, me sentía rara cuando mis palabras se unieron a las suyas.
Su sonrisa era una flor.

- No pequeña, no lo soy, pero conozco a Sofía Greeneyes hace mucho tiempo.

-¿Estoy muerta?
Tuve miedo de su respuesta. Creía que se iba a reír de mí, pero su mirada reflejaba ternura.

-No, mi hija. Estas muy lejos de estar muerta. Tú espíritu ha sido liberado para vagar en el mundo de los espíritus.

- ¡El reino d'Occ!-observé mi alrededor, para ver rostros o formas a través de la oscuridad.

- Tú abuela te ha enseñado bien...pequeña Greeneyes. Eres única de las viejas costumbres y el nuevo mundo de la antigua sangre árabe.
Sus palabras me hicieron sentir diferentes sensaciones.

-Aún no me has dicho quien eres- le recordé.

- Soy conocido por muchos nombres...la mujer oscura, Nyx, la Gaea...
A medida que pronunciaba cada palabra, su rostro reflejaba su poder.Debió darse cuenta de mi cara de asombro,ya que se detuvo y me regaló una bella sonrisa. De forma instintiva le devolví otra.

- Pero tú hija mía, puedes llamarme Amanecer.

-Amanecer- susurré-¿ la diosa vampira?

-Me ha complacido llamar durante décadas a los descendientes de los antiguos griegos mis niños. Y si hoy en día, les autorgan el nombre de vampiro.Acepta ese nombre, en él encontrarás tú destino.

- No lo entiendo. ¿Por qué yo?
Tan solo quiero encajar en un sitio. No estoy preparada para cambiar el destino de alguien. Menos si es el mío.
El rostro de la diosa se suavizó y cuando habló parecía una madre intentando tranquilizar a su hija .

- Tienes que tener más fe en ti misma, pequeña Greeneyes. Te he elegido como una de los míos. Serás mi seguidora. Eres especial. Tú sangre es combinada con la magia de las antiguas árabes. Eres la salvación del mundo moderno.
La diosa se acercó a mí, secó las lágrimas de mis mejillas.Y dijo las siguiente palabras que cambiaran mi vida.

- Rebecca Remogonty, hija de la noche. Te nombro a ti como mi sucesora en el mundo terrenal, para encontrar el equilibrio entre el mal el bien.Pero recuerda una cosa , no toda la oscuridad es el mal, ni tampoco la luz siempre es el bien. Confía en ti misma.

Entonces se acercó a mí y besó en la frente. Y por tercera y espero que sea la última vez perdí el conocimiento.

La ElegidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora