Capítulo 2: "La misteriosa Cabaña de la Señora Ducke"

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Buscar, Buscar, ohhhh hay tantas cosas, todo es hermoso, que le puede regalar papa a mi mama, Busco, busco y....wowww que hermoso espejo, me miro y me arreglo mi cabello, mientras sigo bailando al son de la música, le subo el volumen cosa de que lo único que escuche sea la música y nada más que la bella música, doy una vuelta estilo bailarina de ballet, me miro en el espejo divertida, ya que la música no tiene nada que ver con ballet; pero me vale un comino, después de todo nadie me está viendo y puedo bailar como se me pegue la regalada gana, así que doy una mega patada tipo ninja y sin querer le doy al espejo, se me congela todo el cuerpo del susto espero no haberlo roto el espejo, lo agarro justo a tiempo antes de que se caiga, ufff gracias a dios, no pasó nada el espejo está en perfectas condiciones, así que lo pongo en su lugar tal como estaba para poder pasar infraganti de mi pequeña travesura, al instante casi me desmayo al ver que en el espejo donde me veo hay alguien detrás de mí, hay alguien observándome. Esto me pasa todo el tiempo las personas siempre me encuentran rara porque hago este tipo de cosas todo el tiempo, como hablar sola, bailar sola, dar mega patadas a la nada, ser torpe, mirar al cielo, imaginarme que de pronto los zombies dominaran el mundo y habrá una gran apocalipsis de la cual, yo sé que estaré lista, lo sé, ver muchas películas afecta a mi cerebro; pero que les puedo decir tengo una gran imaginación y la verdad me da igual que me miren o no; pero lo que pasa es que ahora me siento completamente extraña siento como la temperatura se posa en mis mejillas, mmm que raro, espera RAYOS!!! Estoy más roja que un tomate, y también estoy nerviosa, ya que la persona que me está viendo es un chico y no cualquier chico, este en particular es ridículamente SEXI, increíblemente BELLO, su cabello es negro azabache exquisitamente despeinado y al mismo tiempo pulcro, parece muy sedoso, su cabello obvio, me pregunto que shampoo usara?, sus ojos de un color que nunca había visto grises claros con un pequeño detalle de azul, su nariz perfecta no tiene ni una sola curvita, y sus labios....WOW, también se nota que está en forma debe medir 1.80 fácilmente.

Puedo notar que me está sonriendo divertido me doy la vuelta para encararlo y el ladea la cabeza y se acerca lentamente, ahora estoy más que nerviosa y la música no me está ayudando sino lo contrario, gracias Avril Lavigne, soy yo oh está haciendo más calor de lo normal, la música continua y ambienta el momento con el coro y su épico acercamiento hacia mi "You make me so hot, Make me wanna drop, You're so ridiculous, I can barely stop, I can hardly breathe, You make me wanna scream, You're so fabulous, You're so good to me". Ahora está a un metro cerca de mí y rápidamente me saco los audífonos.

-Hola lo siento, no quise asustarte, ni mucho menos interrumpirte, tienes una forma muy particular de bailar sabes, un día tienes que enseñarme como hacer esa patada- Me quedo observándolo como estúpida viendo como me sonríe, un chico me sonríe!!!- Bueno me preguntaba si la señora Ducke está por aquí, ehhh te encuentras bien, me estas escuchando??, ¿hola?.- Oohhh es tan lindo, QUE OJOS!!!, ohh espera ¿me está hablando?, Reacciona Katixa o quedaras como una gran estúpida, ayy disimuladamente tengo que limpiarme la baba que tengo, me siento como Homero Simpson viendo a su rosquilla.

-¿Qué? Ahh si, lo siento es que me gustas tú.... quiero decir me gusta tu gorra- Que RAYOS!!! Porque dije eso ni siquiera trae una gorra puesta, ohhh trágame tierra.

-Ehhh gracias; pero no traigo ninguna gorra puesta, tranquila, respira no te voy a morder- Toca mi brazo intentando calmarme, eso no ayuda nada; sino lo contrario, doy un pasito atrás, abro los ojos como platos y que sorpresa me vuelvo roja, otra vez, para luego bajar mi cabeza y sin querer verle los abdominales marcados en su polera gris apreta a su torso, DEMONIOS, si sigo así me quedare roja de por vida ¿es eso posible? No, creo que estoy exagerando, en fin el punto es que estoy muy nerviosa y me siento estúpida-Jajaja, eres una chica muy divertida, mi nombre es Leonidas, pero por ser tu puedes llamarme León, ¿Cuál es el tuyo?- Lo dice mientras se acerca sin haberse percatado de que me aleje de él a propósito, necesito respirar, en realidad parece estar disfrutándolo mucho, ya que se acerca más, más y más, hasta que se queda a solo un centímetro de mí, me mira como analizando mi reacción, como retándome, veo como la comisura de su boca se forma en una maquiavélica sonrisa, vuelve a agarrar mi brazo solo que esta vez baja despacio su mano, como acariciando mi brazo, cuando al fin llega a mi mano la besa y me observa mientras lo hace con esos ojos tan seductores. No es justo, sé que lo está haciendo apropósito, MALDITO.

Katixa JohnsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora