Llegamos a la casa de Fernando, me baje de la camioneta sin esperar que él me abriera la puerta, y por esto me gané una mala mirada cuando estuvo frente a mi
- Lo siento - le sonreí y lo besé
Él sonrió - Ale no debe tardar - tomó mi mano y entramos a su casa - ¡ya llegamos!
- Hola linda - la mamá de Fer salió de la cocina y me abrazo
- Hola señora - le sonreí
- hola hijo, ¿Cómo te fue? - dijo Fer sarcástico y las dos reímos
- A ti te he visto desde que saliste de aquí - dijo señalando su abdomen - a ella casi no la veo
- mamá la ves cada fin de semana
- No es suficiente - reí y oímos el sonido del timbre - esa debe de ser Ale - Fer fue a abrir la puerta - ¿Cómo estas hija? - nos sentamos en uno de los sillones
- muy bien ¿y usted?
- también muy bien, ¿qué tal el trabajo? ¿Y tus padres?
- mucho trabajo, es bueno, pero si cansado - ella me acaricio la cabeza y me miro maternalmente - mis padres están muy bien
- Hola señora - dijo una voz femenina detrás de mi
- Hola Ale - la mamá de Fer se levantó y fue a saludar a la chica, era la mejor amiga de Fer, ella solo me saludo con un movimiento de mano y una sonrisa, a lo que yo conteste igual. Nuestra relación no era mala, simplemente la había tratado muy poco, muy pocas eran las veces que salíamos todos juntos, es decir, el novio de Ale, ella, Fer y yo, de hecho el novio de ella nunca nos acompañaba, solo sabíamos que se llamaba Ricardo y eso era todo. Ah y que estudiaba en la misma universidad que ella.
- Nos vamos mamá - dijo Fer besando en la mejilla a su madre - nos vemos el domingo
- Sí, maneja con cuidado - dijo esta abrazándolo
- siempre
- adiós señora, nos vemos -dije despidiéndome, y abrazándola
- Adiós señora -se despidió Ale.
Salimos y ahí estaba él, el gran amor de mi vida, el chico del que había estado enamorada tres largos años de mi vida. El me miro sorprendido, ya que ni el, ni yo, esperábamos encontrarnos aquí
- Mira él es Ricardo - dijo ale sonriente - Rich, él es Fernando, mi mejor amigo
- Mucho gusto - dijo Fer sonriente
- Igualmente - dijo Ricardo y luego me miro otra vez
- ¡oh! Ella es mi novia Amber - paso su mano por mi cintura
- Sí, ya nos conocemos - dije sonriendo - éramos compañeros en el universidad
- Que pequeño es el mundo - se rio Ale
- bueno, creo que es momento de irnos - dijo Fer y todos asentimos, el me abrió la puerta del copiloto y yo subí, Ale subió detrás de mí. Recordé que mi bolsa de mano y mi pequeña cobija iban atrás.
Me gire en el asiento - ¿me podrías pasar mi bolsa, por favor? - ella asintió y me dio la bola - y la pequeña cobija también, por favor - ella me dio mi cobija y Fer soltó una carcajada, tan lindo mi novio
- Mi pequeño cubo de hielo - dijo y me dio un beso en la cabeza, yo lo mire mal y el soltó otra carcajada, nuestros acompañante solo nos miraban extrañados.
- ¿van a ser padres? - preguntó Ale y ahora fui yo la que soltó una carcajada
- No, no, no - dije aun riendo - definitivamente, no
Fer volvió a reír - Ambs tiene un pequeño problema con sus pies, siempre están fríos y en la noche más, así que tiene que cubrirlos y calentarlos con algo. - explicó
- en algún momento necesitaré mis pies.
Llegamos a una tienda a un lado de la carretera, ahí nos encontraríamos con los demás amigos de Fernando. Y efectivamente ahí estaban, Fernando bajo de la camioneta y corrió a abrirme la puerta, esta vez lo espere, porque si no el niño se enoja. Baje y salude a sus amigos, que ya conocía, mientras estos me presentaban a sus respectivas novias. Este fin de semana en la "casa de campo" de los padres de Fernando iba a ser muy divertido.
- Voy a comprar algo - le dije a Fernando, él solo asintió y entre a la tienda.
Fui directamente a los refrigeradores, busque mi bebida favorita
- Hace mucho no sabía de ti - me asusto Ricardo, lo mire y le sonreí
\
ESTÁS LEYENDO
Volverte a Ver
Kısa HikayeRicardo... el nombre del amor de mi vida, si se le puede llamar así. Estuve enamorada de él por tres largos años, hasta que conocí a Fernando. Fernando... el hombre de mi vida, es todo lo que no estaba buscando, pero que necesitaba. El me ayudo a su...