Capítulo 8. Primera parte.
Harry no sabía lo que le hizo decir esto en voz alta. Se sentía poseído por su cuerpo, en el piloto automático listo para hacerse cargo. Era como si su conciencia hubiera hablado y al final dijo: 'Te acabo de hacer sonar y sentirte como un completo idiota, lo tendrías que haber dicho para ti, ¿estás contento?'
Sus mejillas se sentían calientes y sus manos comenzaron a sentir frío y pegajosas. Él empezó a temblar y sentía la parte posterior de su garganta quemándose. Había un gran peso empujando hacia abajo, con fuerza en el pecho. Sus pulmones se sentían como si iban a explotar en cualquier momento. El pánico se estableció y así, Harry momentáneamente olvidó cómo respirar.
"¡Harry! Joder. Respira bien ¿cariño? Por favor, Harry, estoy aquí ¿lo ves?" Dijo Louis tirando rápidamente a Harry cerca de él, agarrando sus dos brazos con fuerza suficiente para hacer que Harry saliera de lo que fuera.
Incluso las cosas más simples como respirar eran un desafío. Harry estaba demasiado ocupado lanzando intentando reaccionar.
Su mente empezó a correr y lo único que podía pensar es en lo avergonzado que se sentía.
"Me gustaría- Yo- Ojalá puediera controlar esto." Harry dijo con voz ahogada, sintiendo las lágrimas calientes en sus ojos.
"Harry, cariño, no es tu culpa."
Harry negó con la cabeza, excavando con la cabeza la camisa Louis en sollozos.
"¡No! No, no, no. ¡Soy tan estúpido!" Gritó Harry.
Los dos chicos se pararon frente a la tienda de flores a causar una escena. Algunas personas se pusieron de pie y miraban a lo lejos y algunas personas sólo movían la cabeza con desaprobación a alejarse.
Louis hizo todo lo posible para calmar a Harry. Trató frotando círculos suaves en los brazos de Harry. O trató de correr sus dedos por su cabello rizado, a veces frotando el cuero cabelludo porque sabía lo mucho que le gustaba a Harry.
Pero no funcionó.
Y así, Harry murmuró la única cosa que ardía en el fondo de su mente desde hacía algún tiempo. "Tú- Yo no te gusto, ¿verdad?" Harry cerró los ojos mordiéndose el labio inferior con fuerza suficiente para extraer sangre.
El cuerpo de Louis se puso tenso.
"¡Es por eso que no quieres besarme!" Harry seguía gritando, llorando más que nunca.
"No, esa no es la razón en absoluto Harry, y me gustas."
Harry agarró la camisa apretada de Louis, mirando a través de sus pestañas respirando pesadamente.
"¿Me lo prometes?"
Louis sonrió, ahuecando la mejilla de Harry en una mano y con la otra deslizando las lágrimas pegajosas con el pulgar.
"Prometo Harry."
El corazón de Harry comenzó a correr y empezó a relajarse un poco.
"¡¿Qué demonios está pasando aquí?! Oigo gritos y- Oh, es que ¿estáis bien?" Liam dijo acercándose a los chicos con una expresión de preocupación en su rostro.
Los ojos de Harry se abrieron y comenzó a sonrojarse, encontraba tan difícil ocultar su rostro en la camisa de Louis. Era una sensación muy, muy vergonzosa ahora.
"No es nada Liam-"
"¿Estás seguro? No lo parece si me preguntas. "
Louis rodó los ojos: "Està un poco conmocionado, esto es todo, pero debería estar bien ahora."