Marcas no deseadas

124 7 0
                                    

Esta vez el video se reproduce desde el principio. 💜
Especial 2/3

Levanté la vista y pude diferenciar a la madre de Draco, empuñaba su varita, al instante Draco saco la suya y se acercaron a mi.

Mi grito se hizo más fuerte, mentalmente hablando, estaba desesperada y angustiada por lo que me quisiera hacer esa mujer, no tanto por Draco, de ese inútil me encargaría después.
Narcissa se acercó a mi brazo izquierdo y empezó a quitar el grillete, cuando estuvo suelto no dudé ni un momento y la tomé por el cuello.

-Bien Draco o me sueltas de una vez o me encargo de hacer le el mismo daño que me hicieron a mi a tu pobre madre.

-Estas loca si crees que lo haré.

-Si, probablemente lo este, pero sé muy bien que adoras a esta mujer y no dejarás que le haga ningún daño -apreté más y Narcissa empezó a forsajear.

-Bien... lo haré .
Se acercó a mi pierna izquierda y sujeté mejor a Narcissa por si pensaba hacer otra cosa.
El cuarto estaba lo suficiente oscuro como para no poder ver exactamente que estaba haciendo Malfoy, a los instantes sentí un piquete en mi pierna, no dolió el piquete, fue el líquido el que ardió. Solté de inmediato a su madre.

-¿Que me hiciste bastardo? -dejé de sentir mi parte izquierda de mi cuerpo.

-Te inyecte tu tranquilizante, si quiero salvarte debo de hacer sacrificios.

-¿Sacrificios? Quisiera tener tu hermosa cara aquí cerca sólo para... -se acercó de inmediato y tomo mi rostro -... ¿que... que haces?

-Detrás de ese odio hay algo de cariño todavía, tendré que matarlo para salvarte -sólo lograba confundirme más en esos momentos -Tu mirada fija en mi, sólo en mi.

Tenía sujeto mi rostro firmemente, lo que fuera a pasar sabía que no era nada bueno.
Divise a Narcissa acercarse a mi brazo derecho, bajó la manga del suéter que aún llevaba, sentí su fría varita en él. Instantes después todo cambió, el dolor que estaba experimentando estaba fuera de los límites permitidos, la torturas que había tenido antes no se comparaban con esto, no podía evitar gritar, no podía evitar llorar del dolor.

-Lo siento... de verdad lo siento... -repetía Draco.

Lo único que cruzaba por mi mente en esos momentos era la pregunta de cuando terminaría el sufrimiento.
Para mi, esos segundos se hacían horas, largas horas, parecía no tener fin.

-He terminado -susurró Narcissa.

Pero para mi nada había terminado, el dolor seguía ahí y parecía que dolía aún más. Mis lágrimas seguían cayendo y los sollozos se hacían más profundos.

-___ yo... ... te amo

-¿Si? -logre decir, respire hondo y me prepare para contestar -Yo no siento nada más por ti Draco Malfoy, nada más que... odio y rencor.

-Debes de entender que...

-¡Draco basta! -lo interrumpió su madre -Debemos irnos de aquí y avisarle al Señor Tenebroso que nuestro trabajo....

-¡Calla Madre! -reí macabramente.

-No sabes en que lío te has metido Malfoy -sonreí y lo mire directamente a los ojos.
Inmediatamente se retiraron. No tengo la certeza de cuanto tiempo habrá pasado pero fue bastante, fue cuando muchas personas entraron a mi habitación.

-Así que nuestra querida invitada ya esta preparada -esa voz era odiosa -Debo agradecer enormemente a nuestra querida Narcissa y a su hijo Draco por facilitarnos las cosas.

Levanté la vista y mire a cada uno de los que se encontraban ahí, especialmente a Voldemort y a Malfoy.

-¿Que sucede ___? Te sientes... ¿diferente? -sonrió.

-Te sorprenderías de lo que estoy sintiendo -le sonreí de igual forma.

-¿Eso crees? Sorprende me.

-No, ahora no, no es el momento, llegará, no te preocupes.

-Estoy impaciente, por el momento me tendré que conformar con otra cosa- volteo hacia todos los que se encontraban en la habitación -Tenemos que poner al corriente a nuestra aliada, antes, debemos de comprobar su nueva adquisición.

Se acercó a los últimos dos grilletes y los soltó, caí disparada al suelo, Draco se acercó a ayudarme.

-¡Quítate! -grite mientras lo aventaba y trataba de pararme.

-___ déjame ayudarte -no pude quitarlo, seguía sin sentir mi lado izquierdo.

-Que lindo, nuestro valiente Draco se apiada de nuestra invitada -se acercó a los dos -Esto debe ser recompensado -apunto a Draco y pronunció su recurrente maleficio -¡"Crucio"!
Draco calló junto conmigo, yo por no poder sostenerme por mi misma y él, era obvio.

-¿Alguien más quiere ayudar a nuestra invitada? -río al terminar -Bien -término la tortura.

Draco se levantó del piso tratando de ayudarme otra vez.

-¿Que estas haciendo? ¿Acaso no escuchaste idiota?-traté de empujarlo.

-Te dije lo que sentía, no voy a dejarte sola ___.

-No te necesito -lo empuje de nuevo y logre pararme por mi misma, ya volvía a sentir mi cuerpo completo.

-Como decía, hay que comprobar su nueva adquisición. ¡Tu brazo!

-Mi brazo que ti... -pude ver lo que llevaba, mi corazón se desmoronó, le pertenecía y todo por culpa de... -¡Tú! -le grite a Malfoy -¡Tú me hiciste esto! ¡Eres un maldito! -me abalancé contra él, lo golpee varias veces hasta que me quitaron de encima.

-¡Basta! -apuntó con su varita la marca.

-Tu varita... esa no es tu varita... esa varita le pertenece a otro mago -me desesperé al ver la Varita de Saúco en sus manos -Esa varita es de Dumbledore.

-No -río -Ahora es mía ___, hay que ponerte al corriente.

Susurró algo inaudible para mi y la marca empezó a moverse y a sentirse real.

-Todo esta listo -sonrió -Ganaremos -se alejó -Avisen a todos, estamos listos para atacar el castillo.

Trought the Dark Force or the Light [Editando] (Draco Malfoy, Fred Weasley & Tn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora