Capítulo 11

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Antes de llegar a su trabajo Demi fue a ver a su prometido, para Kevin verla ahí fue una gran sorpresa.
—Hola cariño
—hola Kevin
—¿Qué tienes? ven acá—Demi se acercó a él a paso lento, Kevin la atrajo hacia él y la sentó en su regazo.—¿pasa algo malo?
—¿debería?
—no, pero mira como estás, pareces triste y como si no hubieras dormido nada.
—es solo que te extrañaba—mintió Demi
—pronto amor, pronto serás mía.
Demi sonrió amargamente
—ya sé ¿por qué no hacemos algo juntos por la tarde?
—no puedo, decoro la habitación de una amiga
—pásale el trabajo a otra decoradora
—no, quiero hacerlo yo misma, además esto es fuera del trabajo.
—por lo menos en dos semanas más te tendré para mi solito, seremos solo nosotros dos y así va a ser siempre.
—¿Siempre?
—siempre—dijo Kevin decidido.

¿Acaso no quería hijos? Se preguntó Demi, ella quería hijos no muchos pero si dos o tres.
—amor, ¿y los niños?
—¿qué niños?
—¿no quieres tener hijos?
—¿para qué?

Demi no dijo nada y lo miro asombrada

—sinceramente creo que podríamos tener un hijo único en siete u ocho años, pero eso lo podemos hablar después por ahora no quiero compartirte.

¿un hijo único? ¿siete u ocho años? Pero que rayos...¿no quiere compartirme? ¿Qué soy? ¿una cosa?¿Qué rayos estaba pasando con mi Kevin West?, se preguntó asombrada Demi.
Llegó a su trabajo con diez minutos de retraso, esta vez por culpa de Kevin, saludó a Vanessa y terminó el trabajo de esa semana.
Vanessa le dijo que los muebles llegarían hoy a la casa de Nick por lo tanto tenía que estar temprano allá, para terminar antes de que Nick llegara, Danielle llegaba en dos días y al fiesta de compromiso era en tres días tenía muchas cosas en la cabeza para tener que lidiar también con Nick.


***

Nick creía que estaba solo en su casa, entro al baño para tomar un ducha para cuando volteo para quitarse los pantalones sintió unas delicadas manos pasarse en su espalda, pensó que era Demi pero al voltearse se encontró con los ojos brillantes de Hannah.
—¿Qué haces aqui?—dijo severo
—vine a visitarte
—¿Cómo entraste?
—me abrió tu empleada
—yo no tengo ninguna empleada
—pues ella dijo eso...
—ella ¿quién?
—Demi Evans
—ella no es mi empleada—dijo serio.
Aunque por dentro estaba atónito, no sabía que tonterías le pudo llegar a decir Hannah a Demi.
—¿Qué fue exactamente lo que te dijo?
—a no, si quieres información vas a tener que pagarme
—¿Cuánto quieres?—dijo cabreado
—dinero no es lo que quiero—dijo ella despacio acercándose a él y paso sus manos por el pecho desnudo de Nick hasta llegar a su cuello y acerco sus rostros aunque él no se movió ni un centímetro.
—bésame—susurró ella cerca de sus labios
—No—dijo Nick serio
—Entonces no te diré nada
—está bien—cedió el
Se acercó nuevamente a ella y sin tocarla la beso en los labios, Hannah no conforme con eso lo atrajo hacia si tomándolo de los brazos quiso hacer el beso más intenso pero él no lo permitió.
—¿ya me vas a decir?—susurró el en los labios de Hannah
—solo dijo que estaba en tu casa por trabajo y que nos invita a su boda ¿iremos cierto?
—¿juntos?
—claro mi amor
—Hannah no me llames así
—pero ¿si iremos verdad?
—no, tu puedes ir con quien te plazca pero yo no iré.
—Has lo quieras pero sígueme besando—se acercó melosamente hacia él
—me dijiste que hiciera lo que quisiera y lo que menos quiero en este momento es besarte—dijo alejándose bruscamente


Cuando Nick se libró de su incomoda ex, no dejaba de pensar en Demi y en lo que pudo llegar a pensar al ver a Hannah ahí, tenía que hablar con ella a como diera lugar.

***
Demi salió del trabajo al medio día y fue directo a la casa de su ex, el portero le aviso que el mobiliario había llegado y estaba en el departamento de Nick, Demi subió el ascensor y cuando este se abrió en el piso indicado, el mismísimo Nicholas Jonas estaba ahí en el pasillo ayudando a meter los muebles a su departamento. ¿Qué hacía ahí? ¿no se supone que debería estar trabajando?
Pero Demi no le podía preguntar nada en primera porque no quería hablar con él y en segunda porque era la casa de Nick y él podía entrar y salir de él cuando quisiera.

—Demi
—Hola
—hola, ven pasa—la tomó de la mano y entraron al departamento de él—vi las paredes listas y como los muebles llegaron en la mañana creí que necesitarías algo de ayuda.
—no he terminado las paredes aun
—entonces termina, mientras yo preparo algo de comer

Nick dejó a Demi en la futura habitación de Danielle y salió directo a la cocina.

Nick se comportaba más que raro pero Demi no le tomó importancia, se giró hacia las bolsas que había dejado un día antes allí y de una de ellas extrajo unas aplicaciones color blanco para la pared; eran líneas abstractas pero en conjunto y en contraste con el verde de la pared se veían hermosas. Las colocó en una de las paredes y tras haber terminado con las paredes fue en busca de Nick a la cocina.

Nick sonrió al verla.
—siéntate
Demi obedeció, Nick colocó un plato delante de ella, Demi inhaló el delicioso aroma de su arroz con pollo, era simple arroz con pollo pero por alguna razón era diferente a los demás.
Comieron el silencio
—Demi
—aja
—quiero pedirte una disculpa si te hice sentir mal la última vez que nos vimos, lo menos que quiero es hacerle daño
—Nick déjalo.
—entonces ¿estamos bien?
Se miraron a los ojos
—si
—bien—dijo sonriente—ahora ha amueblar una habitación.

Cinco horas después de arduo trabajo Nick y Demi observaron su trabajo terminado en un tiempo record colocaron la cama de cuatro postes, los sillones, la mesa de noche, la cómoda, cuadros, almohadones, etc.
Todo quedó más que perfecto, como resultado algo glamuroso, moderno, elegante y vintage todo al puro estilo de Danielle Jonas. 


Quiero Robarme a la NoviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora