La investigación (Death Note) [OC]

#8

Luego de que me secara la lágrimas Light me invitó a comer.

—Gracias por lo de hoy, te debo una —dijo mientras nos sentábamos en la mesa.

—Ésta comida lo paga —dije sonriendo.

—Te ves más linda sonriendo —comentó Light provocando que me sonrojara.

—Aquí está el menú —dijo el camarero entregándonos el menú. Ordenamos y hablamos mientras nos traían nuestra comida.

—Por cierto... no sabía esa faceta de ti, Ryuk —dijo Light mirándome fijamente a los ojos como si me hablara a mí.

—Yo tampoco... solo sé que no soporté ver llorar a Kumiko —contestó Ryuk quien dudo un poco al decir mi nombre pero casi no se notó. Vi que Light se puso pensativo.

—Gracias Ryuk, la verdad me hiciste sentir un poco mejor —dije viendo a Light y sonriendo —, te abrazaría pero se vería raro una chica abrazando algo invisible —dije riendo levemente —. Además, gracias por lo del nombre...

—¿Lo del nombre? —preguntó Light confuso.

—Sí, Ryuk me dijo que ese era un nombre falso, pero no me quiso dar el verdadero —expliqué —, él me dijo que tú sabías... ¿Ryuk no te lo dijo?

—No, lo descubrí yo, él solo se reía... ¿por qué se lo dijiste a ella y a mí no? —preguntó un tanto molesto.

—Porque sabía que ella podía idear algo para sacarte de los problemas, no iba a tener la misma oportunidad que tú para darse cuenta, y no quiero volver a mi aburrido mundo... sólo eso —dijo alejándose.

Nos trajeron la comida y comenzamos a comer.

—A propósito, Light-kun —dije y él me miró —, si quieres que sospechen menos de un suicidio puedes hacer que la víctima escriba una carta... esa mujer parecía una de esas mujeres que no se suicidan por nada, y L la conoce al parecer —dije dándole un sorbo a mi bebida.

—Tienes razón, tengo que tener más cuidado, gracias por el consejo lo tendré muy en cuenta —dijo sonriendo.

Terminamos de comer y salimos, aún seguía nevando y yo no estaba abrigada como para la nieve, mientras caminábamos comencé a temblar ligeramente.

—¡Oye Light! —exclamó Ryuk captando la atención de Light quien caminaba sumergido en sus pensamientos —, la chica tiene frío —dijo volando a mi lado, yo lo miré y él me miró preocupado.

—Lo siento, soy muy desatento, estaba pensando —dijo disculpándose

—No te disculpes —dije sonriendo —, no es nada —dije tratando de disimular mi congelamiento en potencia.

—Pero estás temblando... no puedo verte así, ten —dijo mientras se quitaba su abrigo.

—No, no —exclamé mientras colocaba sus manos en sus hombros evitando que se lo quitara.

—No estás lo suficientemente abrigada como para aguantar la nieve —dijo preocupado.

—No importa, no quiero que tú te congeles —dije.

—Te vas a enfermar y me voy a sentir culpable —dijo y término de quitarse su abrigo poniéndomelo sobre mis hombros.

—Bueno —dije mientras me lo ponía bien —, gracias... —dije casi en un susurro asegurándome de que Light lo escuchara, para acto seguido abrazarlo por la cintura.

—De nada —dijo pasando un brazo por mis hombros.

Luego de caminar un poco se nos hizo de noche.

—Deberíamos volver a casa —dijo Light.

—Bueno, voy a tomar el tren —dije —, hasta luego —me despedí ya que la casa de Light estaba cerca —. Casi lo olvido —dije quitándome el saco de Light.

—No importa quedatelo, luego me lo devuelves —dijo tomándome por los hombros y sonriendo.

—Está bien —me di la vuelta y caminé hacia la estación.

~×~×~POV Light~×~×~

Vi como Kumiko se alejaba así que me volví a Ryuk.

—¿Qué tienes? —le pregunté en voz baja.

—¿A qué te refieres? —preguntó.

—Desde que viste a Kumiko-chan te ves algo preocupado, ¿qué pasa? —dije, Ryuk soltó un suspiro.

—No debería decirlo pero como esa chica me importa te lo diré... —Eso no me lo esperaba —, a Kumiko le queda poco tiempo de vida.

—¿¡Qué!? —exclamé provocando que las pocas personas que estaban ahí me miraran. Caminé hacia un lugar más apartado —. Ryuk quiero que me expliques en éste instante —ordené.

—Sabes que los ojos de un shinigami pueden ver tanto el nombre como el tiempo de vida de las personas, bueno hoy al ver a Kumiko noté que su tiempo de vida, si lo concierto a tiempo humano... puedo decir que morirá hoy

—¿¡Hoy!? ¿cuando? —pregunté rápidamente.

—Dentro de una hora aproximadamente —dijo, salí corriendo en dirección a la estación en donde Kumiko toma el tren.

~×~×~POV Karla~×~×~

Me encontraba caminando por las calles y a unos pocos metros antes de llegar al metro me detienen cuatro motociclistas.

—Hola preciosa —dijo uno. Los ignoré y seguí caminando.

—No nos ignores —dijo otro que me agarró de la muñeca deteniéndome.

—¿Qué quieren? —dije mirándolos.

—¿Tienes que preguntar? —dijeron acorralándome contra la pared.

—¡Suéltenme! ¡Ayuda! —grité desesperada forcejeando con los hombres, lo cual fue inútil ya que me taparon la boca y me inmovilizaron.

—No grites.

—No vamos a matarte... aún —Entré en pánico mientras ellos reían, pero la mordaza no me dejaba gritar.

Entre los cuatro me comenzaron a desvestir, uno me besaba el cuello y sujetaba mis manos mientras otro me quitaba el saco de Light y masajeba mis pechos sobre el sostén. Me sentía asquerosa, estaba siento violada y, según lo que dijo, al terminar me matarían. Las lágrimas caían de mis ojos, me sentía impotente, por más que quisiera luchar no podía, eran más que yo y más fuertes. Repentinamente todos me soltaron y cayeron al suelo sujetándose con dolor en el pecho y gritando.

—¿U-un a-ataque al c-corazón?... —dije mientras me volvía a poner la ropa —Light-kun... —susurré asustada. Recogí el abrigo de Light y me lo puse arreglando mi ropa temblando.

—¡Kumiko-chan! —escuché gritar a Light desesperadamente, me gire y lo vi corriendo hacia mí, me abrazó fuertemente.

—Light-kun —dije abrazándolo aferrándome a su camiseta.

—¿Estás bien? —dijo mirándome, yo asentí un poco dudosa.

—C-creo que sí —respondí —¿tú hiciste esto? —pregunté mirando a los cuerpos de los hombres tirados a mi alrededor.

—No, sabes que no puedo matar sin saber el nombre y cara de la persona —dijo, lo miré confusa —, hay que salir de aquí —tomó mi mano y salimos corriendo hacia su casa. Entramos y subimos a su habitación —. ¿Ryuk, qué tienes ahora? —preguntó Light, noté que Ryuk no dejaba de verme algo asombrado.

—Su vida... —musitó.

—¿Qué tiene mi vida? —pregunté confusa.

—Aumentó...