Crónicas Z II: Juego Macabro

Desembarquen sentimientos

R: -Corre... Corre... Corre... Grita como niña... Sigue corriendo-

Mi respiración se agita al mismo ritmo que mi corazón late, esto no es bueno, debo huir antes de que las cosas se pongan mal, ya no puedo seguir con esto...

R: -¡Corre sin ver atrás!-

M: -Wey, te mamas, puedes matar 100 Zombies, sobrevivir a un pinche Dady con esteroides, resucitar cuando te creímos muerto pero ¿No puedes matar una pinche araña?-

Emm bueno... sí, exageré al huir de una araña pero no es culpa mía, es parte de ser aracnofóbico...

R: -Mátala y dejame tranquilo-

Mauricio la mató con un pisotón y finalmente me calmé después de casi morir...

A: -Me cae que eres bien dramático-

G: -Sigo sin saber... ¿Cómo mierda había arañas en un barco?-

R: -Yo que rayos voy a saber-

L: -¡Tierra a la vista!-

Finalmente después de tantos días de viaje llegamos a costas asiáticas, por fin mis amigos verán a su familia

R: -Finalmente hemos logrado llegar-

Un minuto, en la costa... ¿Zombies?... excelente...

Z: -Zombies a la vista-

K: -Y muchos en realidad-

Son aproximadamente 400

R: -Hora de divertirse, hace casi un mes que no mato más que moscas-

S: -Pero son muchísimos-

R: -Parece que me subestiman... Espíritu de la oscuridad prestame tu poder-

Las sombras comenzaban a envolver mi cuerpo tal como lo hicieron en la pelea contra mi padre

M: -We ¿Es necesario que digas alguna idiotez cuando haces eso?-

R: -Cállate, el estilo es importante-

Finalmente mi armadura oscura estaba completa

-Nos vemos en la costa-

Creé una sombra viviente y la lancé hasta la orilla para después cambiar lugares con ella, desenvainé mis katanas y estaba listo para gritar el nombre estúpido de mi movimiento pero...

M: -¿Te quedarás todos tú?, Que egoísta-

R: -Tardaste más de lo que esperaba-

M: -Ya sabes cómo soy-

R: -Me agrada la apuesta, dos contra 400-

M: -Sabes, quiero ver si tienes las pelotas para usar tu supuesta nueva técnica-

Estaba por gritar el nombre cuando de repente las chicas y Gabriel llegaron

A: -¿No quieren ayuda?-

Volteé a ver a Mau y sin lenguaje verbal me entendió

M: -No gracias, estamos bien-

Desesperado casi gritando dije:

R: -Por un demonio, ya déjeme decir el nombre-

Sared echó a reír

R: -No te burles, llevo meses practicando esta técnica y no puedo hacerla por falta de espacio-

S: -Bueno ya, no te enojes... procede-

Un plomazo sonó y cayeron 10 Zombies al piso

R: -Maldito, te adelantaste... Vaya, esas balas si que perforan mucho-