Run → [Chanyeol]

004

••• Chanyeol •••

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Mis intentos por abrir los ojos parecían ser imposibles debido a la gran pesadez que sentía sobre ellos.

Mi cabeza dolía terriblemente, pero lo curioso era que el dolor en mi hombro había cesado.

¿Acaso había sido un sueño?

Sentía algo incrustado en mi brazo izquierdo así que con un mínimo esfuerzo lleve mi mano hacia allí, y pude sentir como una aguja estaba conectada a mi antebrazo.

Abrí lentamente mis ojos y en un momento brusco para inclinarme hacia un lado mi hombro dolió terriblemente.

No había sido ningún sueño.

Observe mi antebrazo y en el había un delgado tubo plástico del cual se podía ver claramente como un liquido rojo corría.

Atónito, observe mí alrededor para darme cuenta que estaba en una sala de estar con sofás blancos y estantes negros.

Seguro había arruinado aquel en donde estaba acostado.

Me senté lentamente y pude observar a aquella chica con el otro extremo del tubo plástico conectado a su antebrazo, estaba recostada sobre su brazo libre con su cabello cubriendo su rostro.

Inmediatamente desconecte ambos extremos haciendo que el poco liquido que quedaba en el, cayera al suelo manchando un poco la alfombra que lo decoraba, para luego tomar un par de vendas que estaba en el suelo y cubrir su antebrazo para que la sangre se detuviera.

¿Qué tipo de chica da su sangre a un desconocido?

De manera cuidadosa la moví suavemente y al instante me miro un poco débil.

-¿despertaste?-

La mire de manera burlona -No, no lo he hecho- Respondí, a lo que ella cambio su mirada a una molesta.

-ten cuidado- Susurre cuando esta se levantaba rápidamente y tambaleo un poco.

-estoy...-

Con un arduo esfuerzo me incline hacia ella y atrape su cuerpo cuando esta cayó al dar un paso.

-te dije que tuvieras cuidado- Le regañe, haciendo que ella me mirara de manera incrédula.

-el que debe tener cuidado eres tu- Susurro ella zafándose de mi agarre.

Se sentó nuevamente en el suelo y me dio la espalda para luego encender la televisión.

Mire hacia mi costado y pude darme cuenta a través del gran ventanal que aun la lluvia no cesaba, luego poco a poco observaba cada espacio de aquel lugar.

Había hecho un gran desastre.

Paredes llenas de sangre, mi camiseta tirada a un costado, medicamentos y mas estaban tirados por todos lados.

Esperen.

ESTOY SIN CAMISA!

Me voltee a mirarla y ella miraba distraída las noticias.

La reportera llamo mi atención cuando nombraron la calle 42, mostrando una imagen en donde un coche de policías ardía en llamas.

-¿lo has hecho tu?- Pregunto ella un tanto nerviosa obteniendo toda mi atención.

La mire fijamente para luego asentir en modo de respuesta.

-¿Por qué?- añadió esta.

-¿Cómo llegue al sofá?-

Responder con otra pregunta no era de buena educación, pero que importaba eso ahora.

-tu cuerpo es pesado, pero con un poco de fuerza todo es posible- Respondió ella mostrando sus brazos.

-espera-

-no respondas una pregunta con otra- Comento cruzando sus piernas y brazos delante de ella.

-no pienso responderla- Dije seguro.

Pero era estúpido, la reportera comento todo.

Aquello que dijo no era del todo cierto, pero la mayoría lo era.

Lo único verdadero, era lo del coche.

Aquel asesinato, no lo había cometido yo.

-no soy ningún delincuente- Dije en un susurro

-seguro- respondió ella.