Eh estado esperando a mi madre durante 40 minutos fuera del hospital. Ya estoy mojada por la lluvia, no puede pasar algo peor.
Un auto se acerca y suena el claxon, Oh sorpresa es mi madre, al fin se digna a llegar.
Me indica con la cabeza que suba al auto.
En el camino, sólo miro por la ventana el paisaje.
Madre: -Siento haber llegado tarde. Sólo han pasado diez minutos.
Rae: -40 minutos.
Madre: -Termina con tus 40 minutos. Hablas más al azar que una mierda de pato, a veces.
«No tiene sentido lo que dice mi madre»
Coloca un cigarrillo en su boca mientras conduce.
Madre: -¿Quieres uno?
Rae: -¿Desde cuándo fumo?
Madre: -Podías haber empezado.
Sólo frunso el seño y no dejo de mirar por la ventana.
Madre: -Creo que hay un Blue Ribands en la guantera.
«Okay, no me puedo resistir a un Blue Ribands»
Abro la guantera y ahí está ese delicioso chocolate.
Rae: -¿Quieres?
Madre: -No, no. No puedo cielo. Estoy haciendo la dieta "abecedario".
Rae: -¿La qué?
Madre: -Cada semana, sólo comes comida que empiece con una cierta letra. Te hace rotar todo tipo de comida. Esta semana toca la "W".
Rae: -Entonces, ¿has hecho casi todo el alfabeto?
Madre: -No. Empecé por la "H" porque compré unos huevos en gabardina de oferta. He perdido 3 kilos, aún así, en... ¿qué? Poco más de un mes. Un mes y algo.
Rae: -¿No tienen barquillo los Blue Ribands? Barquillo (= wafer) empieza por "W".
Se lo doy a mi madre y ella parece disfrutarlo. Pongo algo de música en la radio. Se escucha una pandilla de motociclistas detras de nuestro auto, volteo a ver por la ventana de atras y efectivamente, eran unos chicos y chicas en moto. Al parecer se la están pasando de maravilla.
Nos detenemos en el semáforo y estos chicos a lado de nuestro auto. Una chica voltea hacia mi auto. Es Chloe.
Rae: -Oh no.
Trato de acomodarme en el asiento para evitar que me vea.
-¿Rae?- dice Chloe desde la moto.
Madre: -¿Quién es?
Rae: -Chloe.
-¡Rae! ¡Oh, dios mío!- dice Chloe mientras baja de la moto.
Madre: -¿Chloe? Manda cojones, ha florecido. Mira que pecho.- dice mi madre, adulando a Chloe.
«¿Qué?»
Chloe está afuera del auto tocando por mi ventana, volteo y me hace una seña indicando que baje del auto.
Rae: -Por favor no me avergüences.
Madre: -Oh, déjalo ya. Y no tardes. Tenemos prisa.
Bajo del coche y Chloe me abraza, los demás chicos sólo nos miran desde las motos.
Chloe: -¡Oh, dios mío! ¡Ven aqui! ¿Por qué no me dijiste que habías vuelto? ¿Qué tal Francia?
Rae: -¿Francia? Este, mmm. Si ha estado genial. Muy, muy bien.
Chloe: -No puedo creer que hayas estado fuera tres meses.
Rae: -Cuatro meses.
Chloe: -Si, bueno...
-¡Rae!- dice mi madre desde el auto, pero la ignoro.
Chloe: -Me alegro de que hayas vuelto, de todas formas...
Rae: -Gracias.
Ahí va mi madre a ponerme en ridículo...
Empieza a pisar el acelerador, a lo que los chicos voltean a verla confundidos.
Rae: -Tengo que irme.
Chloe: -Oh, no, no, no. Escucha, escucha... Ven ésta noche con la pandilla. He empezado a salir con la antigua pandilla del sexto de Wellesley Park. Los chicos están buenos, ¿eh? Y están todos solteros. Así que vente, por favor, guapa. ¡Por favor!
Volteo a ver a los chicos desde lejos. Uno de ellos se quita el casco y puedo notar lo guapo que es. Me dedica una pequeña sonrisa.
Chloe: -¿Si?
Rae: -Quiero decir, eh, si... Estoy un poco ocupada, pero estaría bien salir por ahí contigo. En Francia no hice más que salir por ahí. Definitivamente. Seguro que me entra síndrome de abstinencia si dejo de salir.
Chloe: -Si.
-¡Rae!- dice mi madre mientras toca el claxon durante varios minutos.
Subo al auto sin despedirme de Chloe y cierro la puerta.
Chloe: -Bueno, nos vemos más tarde, entonces. Adiós.
Rae: -¿¡Francia!?
Madre: -Bueno, algo tenía que decir. Me dijiste que no se lo contara a nadie.
Rae: -¿¡Francia!? ¿Por qué no dijiste que tenía mononucleosis, o algo así?
Mi madre continúa conduciendo hasta llegar a nuestra casa.
«Bienvenidos a la casa del dolor. Apenas espacio para una persona, menos para mi y ella.» «Ni siquiera estoy adentro y ya quiero salir.»
Mi madre ah bajado del auto, se dirije hacia mi lado y toca la ventanilla.
Madre: -Vamos, Raechel. Tengo que enseñarte algo- dice mi madre en susurros.
Rae: -¿Qué?-bajo del auto.
Ella se dirije hacia el maletero y yo la sigo. Lo abre...
Oh diablos, es un hombre, en el maletero del auto. ¿Qué demonios hace ahí dentro?
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My Mad Fat Diary
Teen FictionRaechel Earl. 16 años. 104 kilos. Gorda. Por los 90's Raechel era una chica recién salida de rehabilitación después de estar allí 4 meses por problemas mentales. La historia comienza el primer día que sale de ahí. Su vida va cambiando para bien, com...