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Un fuerte golpe se escuchó en la puerta, despertando a Michael de un salto. Parpadeó unas cuantas veces, adaptándose  a la tenue luz de la habitación, y se levantó lentamente de la cama. Se quedó unos segundos allí de pie, y luego fue a abrir la puerta. Luke estaba allí parado, con una sonrisa tan brillante que casi hizo que Michael se quedara ciego. El rubio entró al piso, y Michael cerró la puerta tras él, bostezando. "¿Qué haces aquí tan temprano? ¿No deberías estar en clase?" Luke rodó los ojos y se sentó en el desgastado sofá. "Son las tres y media de la tarde por lo que ya he salido de clase, y tu también deberías haber estado allí." Luke contestó haciendo a Michael suspirar, y se sentó al lado de Luke, "Traigo una buena noticia, pequeño Michael." Luke hizo una pausa, girándose para mirar de frente a Michael. "Y es que no te voy a hacer salir de casa para ver a un psicólogo." Michael sonrió con satisfacción, pero antes de que contestara Luke ya estaba hablando de nuevo. "La otra parte es que el psicólogo va a venir aquí. Resulta que mi compañero de habitación está en el tercer año de psicología, y le he dicho que si quería practicar contigo." Michael se quedó mirando a Luke como si tuviera cuatro ojos, "Es una broma, ¿no?" dijo mirando al rubio, su expresión casi de furia. "Bueno, es la mejor opción que tenemos y nos beneficia a ambos; tú no sales de casa y yo no tengo que pagarte un psicólogo." Luke seguía con una sonrisa el su cara, y Michael sólo quería quitársela de un puñetazo. Se levantó y miró a Luke, cruzando los brazos. "No quiero que venga aquí un tipo que va a hacer que le cuente mi vida y así intentará arreglármela. Me niego." Michael volvió a su habitación, tirándose a la cama, y Luke lo siguió. "Vamos Michael por favor. No quiero que sigas así, quiero que mejores y que seas el mismo Michael de antes. Por favor." Luke dijo y se tiró encima de Michael, abrazándolo. "Por favooooor." Michael soltó un suspiro, y asintió. "Está bien. Pero si no funciona no quiero que vuelvas a intentar traer a otro psicólogo o algo parecido." Luke soltó un chillido poco masculino y se levantó de la cama, con la misma sonrisa de antes pero incluso más grande. "¡Si! Este es mi Michael." Luke sonrió y besó la mejilla de Michael antes de salir del piso.

anxiety | mashtonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora