Tomé una toalla para absorber el exceso de agua que recorría mi cuerpo y con otra, anudé a mi cabello para hacerlo secar más rápido.
Mi reflejo se veía opaco en el espejo por el agua caliente que se concentró en el baño y con mi mano removí el agua, que ahora se había convertido en vapor del espejo para poder ver mi reflejo. Por debajo de mis párpados se encontraban unas pequeñas sombras obscuras que reflejaban el cansancio y mi desvelo por las noches.
Francamente no he dormido bien. Las pesadillas que me han agobiado durante mi tiempo de dormir esta semana han sido brutales, la mayoría de las noches despierto con lágrimas en los ojos y empapada en sudor. Jo ha sido la que me consuela. Me da una nueva playera para dormir, me abraza y se acuesta a lado mío diciendo: —Ya pasó, ya pasó. Estoy aquí contigo.
Aunque yo sé que mi pesadilla no ha pasado, de hecho, vivo en ella.No puedo superarlo, no aún. Y bueno, ¿cómo podría superar en una semana la ausencia del chico que me hacía suspira inevitablemente todos los días? Simplemente no se podía, o más bien, yo no podía.
—¡Jal! ¡Por Dios Jal, llevas una hora allá adentro! —mi hermana tocaba desesperadamente la puerta del baño— Yo también me quiero bañar, ¡apesto, gracias a ti!
—Primero que nada; no llevo una hora aquí adentro. Apenas llevo quince minutos, tal vez un poco más, y segundo; nos es mi culpa que apestes, tú siempre hueles mal —me reí a mis adentros porque en realidad sí era mi culpa el mal olor de Jodie. Todos los domingos -o la gran mayoría- salemos a hacer un día de campo o salemos a almorzar en algún parque de la ciudad y esta vez fuimos a Brereton Heath Park. En este se pueden hacer diferentes actividades y una de ellas es remar en el gran lago que hay ahí. Ya estando remando, mi hermana miraba que tan profundo estaba el lago y curioseaba con los pequeños patos que estaban ahí. Entonces le dije "¿Quieres ver qué tan profunda esta?" aunque en realidad sólo trataba de darle un buen susto, no tuve control de mi fuerza y la empuje haciendo que ella cayera de la lancha directo al agua.
—¿No es tu culpa? ¿enserio? ¿¡Entonces quien fue la gran idiota que me empujó de la lancha!?
—No debes echarme la culpa a mi, tú eres la que no usó el flotador ni se sostuvo.
—¡Deja de ser infantil, Jal! —hizo una breve pausa y siguió— ¿Podrías salir del baño de una maldita vez?
—Niña, ¿quién te ha enseñado ese vocabulario?
Jodie comenzó a alegar palabras que no se entendían, o por lo menos yo no lo hacia, y como cualquier hermana mayor empecé a grítale también hasta que mi mamá hizo lo mismo.
—¡Jal y Jodie Ainsworth! ¿¡Quieren callarse de una buena vez o voy yo a callarlas a las dos!?
Cuando mi mamá pregunto aquello supimos una cosa; el caos se había desatado. Una vez que mi madre habló abrí la puerta rápidamente y dejé entrar a Jodie.
(**)
Apenas era lunes, apenas llevaba dos horas en el trabajo, apenas atendía a cinco clientes y ya estaba totalmente cansada, lo único que esperaba era la preciada hora del almuerzo para poder sentarme por lo menos media hora.
Por un momento la tienda se quedó sin clientela y agradecí a Dios por haber sacado por unos momentos a toda esa gente.
—¿Ya supiste que Ley le pidió la renuncia a Lance? —me dijo Tessa, una compañera de trabajo que se hacía a cargo de colocar y acomodar la ropa en el mostrador.
—¿Ley, quien es Ley? —en realidad no sabía de quién hablaba.
—Ley, Leyda, la chica que se encargaba del área de niños. Una chica un poco bajita de cabello clarito, corto.
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Never Enough | Harry Styles
FanfictionJamás creí que llegaríamos a esto. Jamás creí que lo que teníamos armado se desmoronaría en tan solo un segundo. Un adiós nunca es suficiente, necesito más de ti como sé que tú necesitas más de mi. Lo sé, y no lo puedes negar. Ahora, ¿por qué te vas...