La Chica del Bus (Camren)

Capítulo V

Otoño.

El verano había terminado, era el primer día de clases y este era su último año de preparatoria. Por fin sería una Senior.

Sus vacaciones en Cuba habían sido realmente maravillosas. Había visto a su abuela otra vez desde hacía dos años y había visitado lugares increíbles de Cuba que no se había dado la oportunidad de ver con anterioridad.

Además, había conocido a una chica. Su nombre era Karime, era muy bonita y un amor de persona. Su historia juntas había sido corta, sólo consistía en unos cuantos besos robados y varias citas para comer helado o pasear por ahí. Algo así como los amores de verano solían ser... cortos, hermosos y memorables.

Pero la ojiverde debía aceptar que su corazón le pertenecía a la chica del Bus. Por esa simple razón, Lauren se encontraba ansiosa. Ansiosa porque la vería de nuevo. Ansiosa porque por fin, después de tantas noches de desvelo mientras veía su foto en la oscuridad, la vería de nuevo. Ansiosa porque la había extrañado. La vería en persona. La tendría cerca, si dos asientos de distancia se podrían denominar así.

-"¡Lauren!" Una efusiva Vero la saco de sus pensamientos, mientras se abalanzaba sobre ella. Abrazándola fuertemente y besando desventuradamente sus mejillas.

Normani no tardo en unirse también.

-"Cielos, de saber que me recibirían así me desaparecería más seguido" bromeó, pero a decir verdad era mentira. Había extrañado a sus amigas tanto como había extrañado a la chica del Bus.

Las chicas rieron.

-"¿Cómo estuvieron tus vacaciones, Laur?" preguntó una curiosa Normani.

Lauren sonrió.

-"Conozco esa sonrisa" dijo Vero levantando divertida, una de sus cejas perfectamente depiladas. "Conoció a alguien, y por la chica linda que aparece en sus fotos de Instagram más recientes, lo confirmo"

La ojiverde se sonrojó. Verónica Iglesias no era para nada sutil.

-"Su nombre es Karime" fue lo único que dijo, pues el autobús había llegado.

Esta vez, Vero se le adelanto y fue la primera en subir. Lauren creyendo que era para torturarla un poco más, de inmediato.
Subió después de Verónica, presenciando el momento en el que ésta intercambiaba una sonrisa cortes con la chica del Bus.

Los celos se apoderaron de ella y se apresuro a pagar su pasaje. De mala gana se sentó en su lugar de siempre... dos asientos detrás de la otra chica.

Estaba demasiado celosa como para haber notado que la sonrisa que las chicas compartieron fue vacía. Hasta la persona más ciega del mundo pudiera haberse dado cuenta de que fue una sonrisa falsa... Pero Lauren no lo notó.
Así como tampoco notó el hecho de que los ojos de Camila ya no eran de un hermoso color marrón. Sino que ese día eran amarillos, vacios, tristes... sin brillo.

Y como tampoco notó que ya no se reía de los chistes de sus amigas, y constantemente miraba su regazo. La chica lucía fatal, tan triste... tan ida.
Pero aun así, se permitió observar un par de veces a la ojiverde detrás de ella. Disimulada e impredeciblemente... como siempre lo hacía.

Tal vez, si Lauren lo hubiese notado... las cosas serían diferentes.

**

-"¿Laur, que te sucede?" insistió una confundida Verónica.

-"Tú sabes bien lo que hiciste" respondió secamente, azotando la puerta de su casillero.

-"Pues no" la tomo del brazo, deteniéndola. "No sé lo que hice, tengo una terrible memoria. Y sé que de todas las cosas que hago, muchas de ellas te molestan. Así que dime, por favor, ¿Qué demonios hice?"

Lauren se soltó de su agarré.

-"¡Le sonreíste en mis narices!" exclamó celosa, Verónica la miró confundida. "¿Sabes lo que se siente verte sonreírle frente a mi? ¡Cuando yo ni siquiera tengo el coraje de hacer eso!"

Silencio.

Su amiga simplemente la miraba arrepentida. En un movimiento rápido Verónica envolvió sus brazos alrededor de Lauren y ambas se quedaron así por unos minutos.

No necesitaron palabras para disculparse... Con tu mejor amiga, las palabras siempre salen sobrando.